Helena

Me da rabia no tenerte cerca, no verte en muchos días, estar lejos de ti… Eres un pilar en mi vida que no permito que desaparezca así como así. Te he visto en tus problemas y en tus logros y al recordarte, me entra una nostalgia difícil de evitar. Supiste hacer de mi infancia, una infancia llevadera que no todos pueden tener.

Pero llegó el día en que nos tuvimos que separar, no solo por la diferencia de edad que padecemos, sino por el divorcio de nuestros padres, hecho que hizo que te fueras de casa y empezaras una nueva vida junto al amor de tu vida en una casa que no te ha traído el paraíso que tu te mereces. Pero a pesar de todo, eres fuerte, y por eso te admiro tanto. Das todo lo que tienes a los demás y yo sé que por mi, harías todo lo que fuera para verme feliz. Y es eso lo que me da esa impotencia agridulce, el no poderte dar recíprocamente todo lo que me das, y lo intento pero cuando te veo, siento que me falta tiempo, que se acaba, que pronto te irás y que en mucho tiempo no te volveré a ver.

Porque te quiero y te hecho de menos, porque ojalá estuviéramos cada minuto juntas, este escrito te lo dedico a ti, hermana mía, para poder recordar esos momentos en mi infancia que gracias a ti, fueron más fáciles. No dudes en que eres la que me inspira y la que me da fuerzas para superar los entresijos de mi vida. Eres mi mejor amiga, a la que a mi pesar, le cuento todo aunque me cueste. Recuerda que siempre estaré disponible para ti. Que sepas, que cada día pido egoístamente que vuelvas a casa y te quedes conmigo, para poder dar marcha atrás en el tiempo y recuperar los momentos olvidados.

Judith

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Una resposta a Helena

  1. Marta Jareño diu:

    M’ha encantat Judith! La teva germana ha d’estar molt orgullosa de tenir una germana com tu 🙂

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