El pasado viernes, como de costumbre, fui a cenar con unas amigas al Aristic, un restaurante de nuestro pueblo.
Al principio, cuando ya estábamos casi todas, me llamó una amiga y me dijo que le fuera pidiendo su cena, así cuando llegase ya lo tendría a punto. Yo, tal y como me dijo, fui a la barra a pedirle su ‘superkiki’, y sin saber que yo ya lo había hecho, otra amiga pidió otro .
Al traernos el pedido a la mesa, nos dimos cuenta de que uno sobraba. Cuando se lo explicamos al camarero nos dijo que no había ningún problema, y como vamos habitualmente y ya nos conocen, al final nos invitaron al que sobraba.
Más tarde, cuando ya estabamos todas, empezamos a hablar y hablar de lo que haríamos el ‘finde’, de cosas del ‘insti’,… de muchas cosas. Hasta que empezamos a hablar de cosas absurdas, sin sentido pero que nos hacían reir a carcajadas, se nos oía por encima del murmullo del local.
Al final fue una cena como tantas otras que hemos tenido todas juntas, pero muy divertida y particular.
Espero disfrutar de más cenas con ellas, y seguir riendome de esta manera con ellas.
Nabila
Nabila, està força bé la teva “petita crònica d’un sopar divertit”, segur que ho vàreu passar d’allò més bé. No pareu!
Pel que fa a l’escrit, a mi em sembla que pot guanyar en cohesió i unitat. Fixa’t que conté set paràgrafs, que a excepció del segon, són tots paràgrafs-frase. Recordes que vàrem dir que calia evitar-los? Estic convençut que si t’hi mires veuràs que no hi ha cap problema en unificar les informacions dels diversos paràgrafs-frase, de manera que al final l’escrit sigui d’uns tres paràgrafs com a molt. Això evitarà la sensació de telegrama que ara té.
No deixis d’escriure, però fixa’t-hi una mica més, d’acord?
Josep Maria