Category Archives: Novel.la de creixement personal

BEL: AMOR MÁS ALLÁ DE LA MUERTE

belBEL: AMOR MÁS ALLÁ DE LA MUERTE
De Care Santos, Madrid, SM, 2009

Anabel Sáiz Ripoll

“Bel: amor más allá de la muerte” es la última novela publicada por Care Santos, una escritora con una producción más que atractiva que nos ofrece, en esta ocasión, una historia que combina la novela sentimental, con la novela de terror e, incluso la fantástica. Una mezcla bien curiosa que adereza con una banda sonora muy particular –que incluye en un cd en el propio libro- y que se ofrece como un relato destinado al público juvenil, pero, como siempre decimos, en esto de las edades solo juega un factor: que sea buena o mala literatura. El lector, que no tiene por qué leer las críticas, ni falta que le hacen, es quien tiene la última palabra y quien, no nos cabe duda, porque somos lectores ante todos, disfrutará con esta fascinante novela.
La joven Bel se encuentra desplazada, no sabe muy bien qué le ha pasado, su mundo le resulta ajeno y solo tiene una obsesión: acudir a la cabecera de Ismael, el chico del que está enamorada. Poco a poco, a la vez que Bel, el apócope de Belinda, descubrimos conmocionados que está muerta y que ha fallecido de manera violenta. Bel, por lo tanto, es un espíritu que está custodiando a Ismael, también en coma. Pero aún hay más. La familia de Bel, sus padres, cada uno por su cuenta, viven el drama como pueden. La madre resistiéndose a olvidar. El padre, que es policía, investigando por su parte porque no le cuadra que Bel se suicidase, como acaso se dijo, tirándose desde una montaña rusa en pleno funcionamiento. Poco a poco, Care Santos, en tercera persona, nos ofrece más piezas de este curioso puzzle y no damos crédito cuando descubrimos la verdad. Su mejor amiga, Amanda, parece estar implicada en los hechos y solo tiene una obsesión: conseguir el amor de Isma. Para ello no duda en acudir a encantadoras, a pócimas secretas y a distintos elementos que harán que al lector se le ponga el pelo de punta, puesto que la bruja embaucadora es una especie de aprendiz de Celestina.
En “Bel: más allá de la muerte” entran en juego muchos elementos, ya lo dijimos. Gracias a la música que Bel le canta a Isma cada noche, él parece despertar del coma. Hay también personajes que intervienen para ayudar a Bel, en su atormentado camino de vuelta, ya que, cuando descubre la verdad, se vuelve un espíritu agresivo, un poltergeist. Para ello Alma, una médium, e Hyerónimus, un parapsicólogo, tratan de ayudarla y hacer que encauce su misión como espíritu antes de irse del todo. Bel resuelve algunos conflictos, no siempre de manera pacífica, ayuda a sus padres, encuentra un hogar al pequeño Bruno, cuyo cuerpo posee durante un tiempo y, en suma, puede reafirmar su amor por Isma quien, con certeza, sabe que Bel no se ha ido del todo.
Se trata de una historia hermosa, pero nada ñoña puesto que tiene momentos de verdadera violencia, de miedo, de terror, diríamos, de duda, de evolución de los personajes y, en suma, de diversos ingredientes que permiten que el lector no se aburra y vaya atando cabos, aunque no se crea del todo lo que está averiguando hasta el final de relato.
En “Bel: amor más allá de la muerte” el tiempo es importante, puesto que se inicia un lunes 2 de febrero y acaba un sábado, 11 de abril. Los capítulos vienen marcados por la fecha exacta y el relato se estructura en tres partes más un epílogo. El relato se ambienta en Barcelona, recrea el parque de atracciones del Tibidabo y da relevancia a una de las leyendas urbanas más atractivas, la de las paradas de metro fantasmas; pero es el lector quien tiene que abrir los ojos y fijarse cuando vaya a la ciudad condal.
Al final del libro, en la nota de la autora y agradecimientos, podemos averiguar algunos detalles del origen de la historia y los títulos de las piezas musicales que son tan importantes para los personajes.
La portada del libro, en blanco y negro, traspasada por un corazón rojo y una flecha –en la o de amor- y con una pequeña calavera presidiéndolo –calavera que aparece sucesivamente en el interior, así como un pequeño disco-, nos da una pista del contenido del libro, aunque ni por un momento nos permite pensar en todos los avatares que va a vivir Bel.
En la novela de faltan momentos de humor, ni de fina crítica, aunque, por encima de todo, la narradora se muestra respetuosa ya que el tema que trata es sumamente delicado y, como bien piensa Bel, cuando ve que sus amigos hacen una sesión de espiritismo en su tumba: “Mientras queda en la tierra un solo ser vivo que te recuerda, no has muerto del todo”.

LA MALDICIÓN DE ODI (La guerra de las brujas, III)

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LA MALDICIÓN DE ODI,
DE MAITE CARRANZA, EDEBÉ, 2007

Anabel Sáiz Ripoll

Con “La maldición de Odi” llegamos al final de la esperada “La guerra de las brujas”, de Maite Carranza. El lector, con el corazón encogido y tomando el aliento a cada paso, ve como todo se va reorganizando para llevarnos a la eclosión final, al gran momento.
La novela se divide en tres partes, los sentimientos, los errores y la guerra, organizados en 30 capítulos. Cada una de las partes viene presidida por un fragmento de alguna profecía o tratado que se van cumpliendo inexorablemente. Las brujas Omar que siempre se han escondido y que usaban su magia para buenos fines se ven desbordadas ante el empuje de Anaíd quien, sin quererlo, va cumpliendo cada uno de los presagios funestos que sobre ella se habían tejido. Hay que hablar de algunos objetos mágicos que acompañan a estas brujas como su característico cuchillo, el atame o también de los clanes en los que se organizan. Todos estos clanes con sus matriarcas a la cabeza reprueban la actitud de Anaíd, quien acaba desechando los consejos de su madre por el amor que siente hacia Roc, un amigo suyo de la infancia y por la conmoción que vive al conocer a su padre, el apuesto Gunnar quien ha renunciado a la inmortalidad.
Anaíd se alía son su abuela Odish en la que cree encontrar ternura y afecto, pero incumple todas las normas de las Omar. Acaba viajando al pasado y destruye a la maléfica Condesa (inspirada en un personaje real), pero bebe de la copa llena con sangre humana y eso la hace inmortal y, por lo tanto Odish. Todas se alejan de ella, excepto la pequeña Dácil, la Om guanche que ha ido a la península para indicarle el camino hacia el mundo de Om, el mundo de los muertos por el que Anaíd ha de pasar si quiere destruir a su otra gran enemiga, Balaat.
“La maldición de Odi” se cumple, pero también la profecía porque, al lado de los errores, de las ansías de poder, aparece la energía de una madre, Selene, harta ya de la pasividad de las Omar, el amor de un muchacho, Roc y el afecto de dos amigas, Dácil y Clodia. El amor es el antídoto más poderos contra el mal.
Maite Carranza se traslada a México para acabar, al lado de las brujas Om mexicanas, su trilogía con una guerra que, por siempre, pondrá paz entre las Om hará recular a las Odish.
“La maldición Odi” es el libro más mágico de toda la trilogía, está lleno de elementos maravillosos y sobrecogedores como es el camino que nos lleva hacia el mundo de los muertos y que Anaíd recorre.
Maite Carranza se ha documentado muy bien para escribir estos libros protagonizados por mujeres que conectan, íntimamente, con los misterios de la tierra, con la creación y con la vida. Son, insistimos, tres novelas llenas de aventura, de elementos reales que se van uniendo a otros imaginarios o inspirados en leyendas o en creencias que Maite Carranza, como antropóloga, conoce muy bien.
Las brujas de Maite Carranza no tienen nada que ver con Harry Potter, situado en otras latitudes, y sí con la cultura mediterránea y esas primeras religiosas que adoraban a la madre como símbolo de prosperidad.

El desierto de hielo (La guerra de las brujas, II)

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EL DESIERTO DE HIELO,
DE MAITE CARRANZA, EDEBÉ, 2006

Anabel Sáiz Ripoll

“El desierto del hielo” es la segunda parte de la trilogía de “La guerra de las brujas”, de Maite Carranza, cuya primera parte, “El Clan de la loba” reseñamos en su momento en este mismo blog.
Habíamos dejado a Aníd llena de dudas y de zozobras acerca de las intenciones de su madre, Selene, quien no buscaba otra cosa que protegerla de la Profecía que la señalaba como la verdadera elegida. Selene había intentado suplantarla, pero ya no puede hacerlo porque la verdad es más evidente que los engaños.
En “El desierto del hielo”, Selene se sincera con su hija en una larga conversación, salpicada de contratiempos, y la pone en antecedentes de su propia historia. Anaíd descubre su pasado y su presente, pero no sabe muy bien qué hacer porque en realidad sólo tiene 15 años, es una adolescente inexperta, sólo quiere que la amen y no entiende muchas de las cosas que se vaticinan sobre ella. Ése es otro acierto de Maite Carranza quien va barajando continuamente aspectos mágicos o maravillosos con otros normales para facilitar que el lector se introduzca en la historia.
Las Omar esperan de Anaíd acabe con las Odish porque es la elegida, pero no es tan fácil y, con Selene, emprenden una huida para tratar de reorientar su destino. Es en ese viaje disparatado cuando Anaíd descubre quién es.
Selene, la bruja rebelde y emotiva, vivió una juventud difícil, puesto que estaba harta de estar sujeta a los dictámenes de la matriarca del Clan de las Lobas, Deméter, e hizo todo lo posible por romper con las reglas, aunque jugó con fuego y se quemó. Osó e invocar a la sanguinaria Balaat y ése fue su error gravísimo.
Selene se enamoró de Gunnar, cuya verdadera personalidad no descubrimos hasta el final del relato, aunque anticipamos que es un hombre del Norte, de los fríos, acostumbrado a la aventura. Con él, Selene viajará hacia el Polo Norte y vivirá una aventura escalofriante, ayudada por la Osa. En esos momentos nacerá Anaíd, hija del frío y de la nieve. Anaíd cuyo verdadero nombre es Diana, aunque su madre se lo disfrazó para que nadie la descubriera, ya que, desde el principio, supo que era la elegida. Ella y la Omar inuit quien la vinculó con la que luego será s hermana de leche, Sarmik.
“El desierto del hielo” de alguna manera reconcilia a Anaíd con su madre y le hace entender algunas verdades que ella ignoraba, aunque la pone en una situación muy difícil: ella es la elegida y se encuentra entre dos grandes damas, contrarias, una Om, su abuela fallecida, y una Odish, la dama del hielo, la madre de Gunnar, la terrible Odish inmortal de gran belleza quien reclama, una y otra vez, a la elegida. Ella y Balaat la sanguinaria, de quienes huyen y la propia Condesa, otra Odish que ya apareció en la primera parte de la Trilogía y que volverá a adquirir protagonismo más adelante.
La novela, dividida en 17 capítulos, es una larga aventura que nos lleva de Barcelona al Polo Norte y a escenarios imaginarios y que nos permite entender un poco más la gran guerra que se avecina. Los diálogos son vivaces y las descripciones están llenas de belleza.

Días de Reyes Magos

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DÍAS DE REYES MAGOS,
De Emilio Pascual, Madrid, Anaya, 2007

Anabel Sáiz Ripoll

“Días de Reyes Magos”, Premio Lazarillo 1998 y Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil 2000, es uno de esos libros que ganan con la relectura ya que, su contenido, sus matices y su expresión no pueden aprehenderse a la primera lectura. Necesita un poso, como los buenos vinos. Y es que “Días de Reyes Magos” es una novela que plantea el conflicto generacional típico entre padres e hijos, aparte de una historia de amor, pero es mucho más que eso, puesto que “Días de Reyes Magos” es un homenaje bellísimo a la literatura de todos los tiempos.
Si empezamos ya mirando la portada, de Javier Serrano, y tratamos de fijarnos en los detalles descubriremos que muchos son los personajes que la componen y todos ellos extraídos de grandes obras literarias: Max Estrella, el Principito, el Lzarillo… y un largo etcétera.
Uli, el personaje principal, nos cuenta, desde el pasado, una historia que le sucedió 20 años atrás, cuando era un adolescente y que le cambió la vida por completo. Uli no se entendía con sus padres y quería marcharse de casa y abandonarlo todo. Entonces, Cali, Calypso, la chica más dulce que él nunca conoció y de la que estaba enamorado, pone en marcha una conspiración literaria para tratar de retenerlo. El padre de Uli, que nunca ha sido un buen padre, se vuelca en ello y se convierte en un actor para que Uli acabe prendido de las redes de la literatura y leyendo a un supuesto ciego que está en el metro y que no es otro que su padre disfrazado, al que le aguarda un final rápido, pero antes, quiere ser el primer Rey Mago en la vida de su hijo. Cali actúa como el segundo Rey Mago. La madre de Uli sería el tercero, aunque al principio parece que su presencia es escasa, pero Uli la acaba reconociendo y valorando. Y la profesora de literatura sería el cuarto Rey Mago, una mujer que se hace la encontradiza en los pasillos y que le proporciona lecturas. Uli, en suma, cuando descubre qué hay detrás de todos los sobres que recibe, de todos los libros que le mandan al azar y de su relación con el ciego, aprende a valorarse y sabe, con certeza, que ha crecido y ha madurado.
Uli, el joven Ulises de nuestra historia, vive también su particular regreso a Ítaca. Empieza el libro, siempre en primera persona, contando que él dejó de creer en los Reyes Magos a los 8 años, pero, mira por dónde, como le dice su madre, 8 años después tiene que creer de nuevo.
“Días de Reyes Magos” se organiza en 15 capítulos breves que estructuran la historia en tres bloques clásicos, la presentación de los personajes, las vicisitudes en el metro y el desenlace de la historia. En el libro nada es gratuito, no lo son las citas iniciales, no lo es el comentario de la portada y las solapas, porque todo forma parte, como ya se ha dicho, de ese magnífico canto a la vida y a la literatura. Como bien le dice su padre o el ciego, depende de la perspectiva: “Hay tres clases de libros: los que no has leído ni hace falta que los leas; los que empezaste a leer una vez por equivocación y no tuviste el valor de abandonar en la página merecida, y los que lees y relees como quien visita al amigo o a la amada. En algún lugar de este triángulo ideal habría que situar las excepciones: los que no has leído, pero alguien de quien te fías te recomienda que leas. Estos últimos, como los amigos y las amadas, suelen ser fuente de consuelos y también de decepciones” (pág. 81).

Mujercitas

mujercitasMUJERCITAS,
DE LOUISA MAY ALCOTT, Barcelona, Lumen, 2004

Anabel Sáiz Ripoll

¿Quién no ha oído hablar de estas cuatro mujercitas, Meg, Jo, Beth y Amy? ¿Quién no ha visto alguna versión cinematográfica? Es más, seguro que muchos recuerdan a K. Hepburn interpretando a la indómita Jo.
Del libro que hoy reseñamos se han hecho muchas versiones; pero ésta es la definitiva puesto que se trata de la versión íntegra que comprende los dos títulos de la obra, “Mujercitas” y “Aquellas mujercitas” tal y como su autora quiso que se leyesen.
A lo largo de más de 700 páginas el lector disfrutará, sufrirá, se enamorará, tendrás nuevas experiencias y crecerá de la mano de estas niñas que pasan de la infancia a la adolescencia y de ésta a la incipiente madurez, acompañados por unos padres y un entorno propicio, aunque no siempre fácil. Beth, la más tierna de todas, muere muy joven y ése es el episodio más dramático de la obra. Muchas son las lecciones morales que se desprenden de la novela.
Louisa May Alcott nació en Germantown, Pensilvania, el día 29 de noviembre de 1832. Es autora de libros también conocidos como “Bajo las lilas”, “Hombrecitos” y otros más. En Jo refleja mucho de lo que fue su vida puesto que Jo, como ella, es la escritora, la chica que no quiso someterse, que luchó contra los prejuicios. Meg es la hermana mayor, muy sensata, una chica afable, quien se casa primero de las cuatro. Amy es la pequeña, una niña pizpireta, que nos hará reír con sus ocurrencias y que nos sorprenderá cuando se convierta en una espléndida mujer. Jo, ya lo hemos dicho, es la más rebelde de las cuatro, pero también la que más sufre, la más tierna por dentro. Acaso la preferida de quien esto escribe. Y Beth es el ángel del hogar, quien da todo sin esperar nada a cambio. Por supuesto otros personajes las acompañan, los padres, el Sr. y la Sra. March; Laurie y demás. Todos forman, cuando acabamos de leer el libro, parte de nuestra propia familia y, es más, en muchos de nosotros, estos nombres ya son parte de nuestra propia identidad.
El libro, pese a lo que pudiera parecernos, no ha perdido ni un ápice de frescura; es más, pese a los más de 150 años transcurridos desde su publicación, la obra sigue conteniendo toda su frescura y todo su encanto… y no sólo para niños y jóvenes, sino para cualquier edad.
A Gloria Méndez debemos esta magnífica traducción y un prólogo breve, pero condensado. “Mujercitas” no es un libro ñoño, esta versión, al menos, no lo es porque no reduce, como en otras ediciones, parte del original, porque respeta la voluntad de su autora. En otras versiones se eliminaron pasajes enteros y con su supresión el texto quedó desvirtuado y, a menudo, muy edulcorado. La edición que reseñamos no peca de estos defectos, puesto que se divide en dos partes y en 47 capítulos. Auguramos al lector una lectura deliciosa.

EL NUDO

el-nudo EL NUDO, de Montserrat del Amo,
Barcelona, Juventud, 1980.
Anabel Sáiz Ripoll

“El nudo” es una novela que va a ser reeditada, en una versión renovada y muy cuidada, el próximo octubre, afortunadamente para sus lectores, podríamos decir, ya que ha sido una obra con poca fortuna pese a los valores literarios y humanos que contiene.
Montserrat del Amo (Madrid, 1927), su autora, es conocida de todos, pero quizá podamos tratar de esbozar una breve semblanza. Estudió en la Escuela Superior de Comercio el grado de Perito Mercantil. Aprendió el oficio de cajista de imprenta. Al vivir los tiempos duros de la guerra civil y la posguerra, no pudo estudiar hasta ser mayor. Así, en 1976 obtuvo el título de Licenciada en Filosofía y Letras, especialidad de Literatura Hispánica, en la Universidad Complutense de Madrid. Durante unos cursos impartió clases de lengua y literatura españolas, hasta que en 1986 dejó la docencia y, desde entonces, se dedica plenamente a la creación literaria.
Esta autora, que lleva más de 50 años escribiendo, se mueve fuera de los engranajes de la moda y de “lo que se lleva” y sigue su propio camino. Su carrera literaria, por lo tanto, es propia y muy sugerente. Ha escrito y publicado más de 50 títulos y, por supuesto, ha ido evolucionando e incorporando nuevas realidades y nuevas maneras de sentir.
Fue la primera escritora española de posguerra que, en 1958, se reconocía fuera del ámbito nacional. Montserrat del Amo figuró en la Lista de Honor del Premio Internacional Andersen de ese año, al que fue nominada en una segunda ocasión. A partir de ahí, y aun antes, ha conseguido diversos premios que avalan su oficio; en 1956, el “Abril y Mayo” por Patio de Corredor (obra con la que figuró en la Lista de Honor); en 1960, el Lazarillo por Rastro de Dios; el Doncel, en 1968 por Zuecos y naranjas; el CCEI, en 1971 por Chitina y su gato; el Nuevo Futuro por La Torre y el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil, en 1978, del Ministerio de Cultura por El Nudo, obra que estamos reseñando. También podríamos mencionar el Complutense 1993 de Literatura Infantil y Juvenil, el Premio CCEI por La casa pintada. Dos obras suyas han sido adaptadas para televisión: Patio de corredor, emitida por TVE en cinco capítulos en 1866 y Zuecos y naranjas en 1968. Su cuento poético La noche, con música de José de la Vega fue estrenado en concierto por la orquesta de RTE en 1994.
“El Nudo” es un relato precioso y muy emocionante. Se divide en dos partes, más una central, de la que ya hablaremos. La primera parte se centra en un pueblo prerromano, de la península, íbero, que trata de defenderse de la invasión romana y lo hace con medios muy sugestivos. Los guerreros que vigilan las montañas, empiezan a comunicarse tensando las cuerdas de sus arcos y ese sonido, repetido por el eco, causa miedo en los invasores que se retiran. Dos muchachos son los artífices de la hazaña, Ara y Gud. De alguna manera, han descubierto el poder de la música. A continuación encontramos una parte central en blanco, lo cual es un algo muy original. El lector puede pensar que es un error de imprenta, pero no, está hecho con toda la intención. Montserrat del Amo pretende que esas páginas formen nuestro propio nudo particular en las que anotemos lo que prefiramos. Termina la novela con la tercera parte centrada en un grupo de montañeros, una cordada, que hacen un descubrimiento muy interesante: encuentran a un ser extraño, de otro mundo, que reacciona al amor y se debilita ante el miedo. Ese ser viene a culminar la peripecia que se empezó con el pueblo íbero, porque, al fin y al cabo, todos formamos parte de lo mismo, del nudo que nos ata los unos a los otros. Para cerrar, se incluyen dos noticias de prensa que aluden a las historias relatadas en “El Nudo” y que nos hacen reflexionar.
“El Nudo” es un libro escrito en clave metafórica, muy lírico y que esperamos que, gracias a la nueva reedición, se revitalice su lectura porque lo merece.

El enigma maya (Las hijas de las tormentas I)

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EL ENIGMA MAYA (LAS HIJAS DE LAS TORMENTAS),
DE JORDI SIERRA I FABRA, Edebé, Barcelona, 2008.

Anabel Sáiz Ripoll

Lo que en otro escritor sería una historia sin pies ni cabeza, en manos de Jordi Sierra i Fabra se convierte en un relato trepidante que, como suele ocurrirle a este todoterreno de las letras juveniles españolas, se adelanta a los acontecimientos. Esta vez Sierra i Fabra le ha tomado la delantera al mismísimo Spilberg, porque, muchos de los aspectos que el director incluye en la última aventura de Indiana Jones, ya Sierra i Fabra los ha utilizado en “El enigma maya”. Nos referimos a la presencia de unos supuestos extraterrestres que se hallarían detrás de la civilización maya y a otros elementos que coinciden en el libro y en la película; no obstante el escritor va mucho más allá como veremos.
Con un gran dominio del suspense literario y ese estilo tan característico de frases cortas que resumen muy bien el estado de ánimo de los personajes y que nos permiten tomarnos un respiro, “El enigma maya” supone el primer paso del nuevo reto que se ha planteado este camaleón de la escritura. Concretamente es el volumen inicial de la trilogía “Las hijas de las tormentas” que supondrá, sin duda, todo un esfuerzo de recopilación por parte del autor y una serie que, predecimos, dará mucho qué hablar por el contenido, por la escritura y por lo atractivo del planteamiento.
“El enigma maya” se inicia en Barcelona, pero se traslada a México e, incluso, a Colombia. Se desarrolla entre noviembre y diciembre de 2012 y mezcla el relato de suspense, con el conocimiento del mundo ancestral de los mayas y su supuesto enlace con el más allá, representado por las llamadas hijas de las tormentas, cuya protagonista, Joa, Georgina, una joven de 18 años, es precisamente, el fruto de una de estas hijas con un arqueólogo barcelonés.
Joa, una chica con grandes cualidades, ve que toda su vida se desmorona y empieza a descubrir nuevos elementos que le permiten explicarse su origen. De la mano de su guardián, otra figura que inventa Sierra i Fabra, vive una aventura que presagia, sin duda, la siguiente entrega que aguardamos con interés.
“El enigma maya” mezcla ciencia ficción con novela histórica y supondrá una lectura atractiva para cualquier lector que guste de estos ingredientes, aparte de otros muchos con los que Sierra i Fabra suele aderezar sus relatos.

Porta Coeli: La orden de Santa Ceclina

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LA ORDEN DE SANTA CECLINA
(PUERTA COELI, I)
SUSANA VALLEJO, Edebé, 2008

Anabel Sáiz Ripoll

Susana Vallejo con “La orden de Santa Ceclina” inicia una tetralogía muy ambiciosa que, seguramente, dará mucho qué hablar y será muy leída que es lo que importa cuando se escribe y publica un libro.
“La orden de Santa Ceclina” es una novela que se sitúa en la Edad Media y que nos habla de un nuevo mundo, un mundo al que se puede acceder desde el nuestro y que, sin embargo, no tiene nada qué ver ya que allí, en el mundo al que se accede por la Puerta, las criaturas, las estaciones, el paso del tiempo… todo es distinto, más diáfano, misterioso y lleno de magia, puesto que las pequeñas criaturas que allí habitan se nutren de los sentimientos de quienes viven en ese mundo.
Nuño y Bernardo, dos antiguos monjes de la Orden de Santa Ceclina reciben la misión, junto a Yebra, una joven que ya ha visitado ese mundo y ha vuelto cambiada por él, de cerrar la puerta, de volver con el libro “Puerta Coeli” para que nadie más pueda traspasarlo y, sin embargo, todo será muy distinto a como pretendía el prior de Santa Ceclina.
Santa Ceclina era un centro de estudio, de investigación y también de formación militar. Un centro que, con el tiempo, empezó a caer mal entre los señores feudales y comenzó a sufrir el acoso de uno de ellos, Arnau. Lo mismo le pasó al convento femenino, Las Inviernas. En este orden acaso podemos ver un trasunto de los templarios, aunque la imaginación supera la realidad.
Bernardo y Yebra han ido a ese otro mundo y han regresado de él muy cambiados. Lo que se encuentran es muy distinto a lo que dejaron y de alguna manera, gracias a esa experiencia, emprenden otra vida, ellos y los monjes y monjas que han sobrevivido al sitio de Arnau; aunque eso debe descubrirlo el lector.
Sea como sea, Nuño es el juglar que recoge estas aventuras y que siembra el ansía de conocimiento entre sus oyentes, los más jóvenes siempre. Nuño es el encargado de encontrar habitantes para ese otro mundo.
“La Orden de Santa Ceclina” es una novela llena de sugerencias en donde el narrador deja paso a menudo a sus personajes quienes, mediante los diálogos, se dan a conocer al lector. Amor, magia, misterio, ideas preconcebidas que se vienen abajo, respeto hacia lo distinto y mucha mucha fantasía son ingredientes básicos de esta primera entrega de “Puerta Coeli”.
Susana Vallejo nos ofrece una nueva forma de ver el mundo en donde nosotros podemos labrar nuestro propio destino. Es respetuosa con el hecho histórico, aunque, por supuesto, se deja llevar por las intuiciones y la fascinación que despierta en ella, y en sus personajes, la posibilidad de que nuestro mundo no sea ni el único ni el menor.
Uno de sus aciertos es empezar la tetralogía en la Edad Media, una época aparentemente oscura que demuestra no serlo tanto gracias a hombres de la talla de Bernardo y a mujeres como Yebra que osaron plantarle cara al destino y ser como ellos quisieron, no de otro modo.
El lector disfrutará sin duda con este volumen y con las descripciones que Susana Vallejo nos ofrece de ese otro mundo, de su fauna, su flora y su especial devenir temporal.

La primavera no reía

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LA PRIMAVERA NO REÍA
De Mercedes Neuschäfer-Carlón, Ediciones Madú, 2005

Anabel Sáiz Ripoll

De Mercedes Neuschäfer-Carlón se pueden decir muchas cosas (y buenas). De ella destacaría su inmensa humanidad que se plasma en todo lo que escribe. Es una persona amable, afable y muy interesada por el mundo y todo lo que le rodea. Asturiana de nacimiento, vive hoy en Alemania (de allí es su marido), aunque con frecuencia visita Madrid o Marbella, por ejemplo. Su vocación literaria va por el camino de la literatura infantil donde destacan obras como “Antonio en el país del silencio”, “Violín y guitarra”, “La acera rota”, “Tras los muros”, “Una fotografía mal hecha”, “En la guarida secreta”, “La cabaña abandonada” y “El yate blanco”.
Conocí a Mercedes gracias a “La acera rota”. “La acera rota” es un libro sin edad que recoge los recuerdos de Elena, la niña que también fue Mercedes, en los duros tiempos de la Guerra Civil. El libro que ahora reseñamos es su continuación, por lo tanto, no es tampoco un libro que tenga un lector determinado. Pienso, incluso, que requiere una lectura seria y profunda, la lectura de la experiencia porque lo que narra no es fácil, aunque lo cuente una niña de ojos puros. No obstante, también pueden leerlo los niños y jóvenes porque así se acercarán a un periodo de nuestra historia que fue tremendamente duro, en el cual, por mucho que se buscase, “la primavera no se reía”.
La novela está narrada en tercera persona, aunque da la impresión de que es la propia Elena la que nos lo cuenta todo. La reencontramos, tras “La acera rota” con 8 años y la dejamos, al acabar el libro, con 16. Son, pues, los años que cierran la infancia y entran en la adolescencia. Elena ha vivido la dureza de la guerra, aunque no se puede quejar porque tiene una familia que la arropa y no pasa hambre, pero la sensación gris de la época late en todo el relato. Sin embargo, no es un libro triste, en absoluto, es un libro limpio, de lectura diáfana y esperanzada. Nos cuenta, es verdad, la represión de los cuarenta, pero también los anhelos de unas personas, de unas gentes que luchaban por salir adelante. Nos habla de una época en que la magia del cine era importante, en que las relaciones se establecían poco a poco, en que las circunstancias eran distintas y, sin embargo, las ilusiones, los sueños y los amores eran los mismos que pueda sentir un joven hoy en día.
¿Hasta qué punto es una novela sin más? Sospechamos que tras Elena, como ocurría en “La acera rota”, sigue habiendo mucho de la propia autora, aunque animado por la mirada de la distancia, a veces de la nostalgia y siempre de la buena literatura. Es una novela fácil de leer, es cierto, pero no nos engañemos, porque tras su aparente facilidad hay un esfuerzo, precisamente, para ajustarse a los pensamientos de una niña, primero, y de una joven, después.
Bien es cierto que no es un momento de nuestra historia reciente que debamos echar de menos, pero, de alguna manera, todos podemos entender la vida que late tras “La primavera no reía”. Elena sigue viviendo en un pueblo de Asturias, va al colegio, no acaba de entender bien las diferencias de clases, quiere a sus padres, a sus hermanos y lucha por integrarse en su vida; pero de una manera noble, pura, esencial. Elena descubre que no todos somos iguales, y eso le da mucha pena, pero también encuentra grandes sentimientos como la amistad y, sobre todo, el amor. Así acaba el libro, con una puerta abierta a la esperanza. Aunque pueda parecer nostálgico no lo es, precisamente porque se cierra mirando al futuro y porque “para Elena la primavera empezaba a sonreír”.

A lo lejos, Menkaura

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O`CALLAGHAN I DUCH, Elena
A lo lejos, Menkaura
Zaragoza, Edelvives, 2008 (Alandar, 104), 172 págs. ISBN 978-84-263-6835-5

Anabel Sáiz Ripoll

“A lo lejos, Menkaura” ha obtenido el VIII Premio Alandar y lo firma una escritora ya consolidada en el panorama de la literatura infantil y juvenil. Para Elena O`Callaghan, la literatura, escribir, es una forma de ejercer la libertad y lo demuestra en esta novela llena de vida, de amor y de solidaridad.
“A lo lejos, Menkaura” denuncia una realidad actual: la de los niños invisibles en pleno S. XXI, como dice la autora en la explicación final. Gamal es muchacho que malvive en El Cairo, a la sombra de la pirámide de Menkaura, a quien confía sus cuitas y anhelos. El pequeño vende souvenirs a los turistas, pero desea poder ir al colegio, como sí hace su hermano mayor. La historia es hermosa porque tiene un trasfondo de esperanza, pero, de la mano de Gamal, un muchacho de natural alegre, somos testigos de la miseria a la que están condenados los que nada tienen y lo poco que tienen les es arrebatado. Gamal ha sufrido mucho, aunque su mayor dolor es haber perdido a su madre que era su mayor valedora. Su padre trata de organizar la vida familiar y decide que sea el pequeño quien se ponga a trabajar, aunque eso Gamal no acaba de entenderlo. El niño tiene los ojos puestos en el futuro y, al final, gracias a una arqueóloga y a un encuentro fortuito, el lector quiere suponer –y así lo desea- que el destino está empezando a cambiar para Gamal.
La novela se estructura capítulos breves que desgranan la difícil infancia de este chico. Está escrita en tercera persona, aunque son frecuentes los diálogos y los pasajes introspectivos que hacen que conozcamos mejor a los personajes y su ambiente