Category Archives: Ensayo literario

La magia de leer

 

 

LA MAGIA DE LEER

De José Antonio Marina y María de la Válgoma

Mondadori, 2005

 

 

            La lectura no debe considerarse un pasatiempo sin importancia; antes al contrario, es la base para adueñarnos del lenguaje y visto está que somos seres lingüísticos que necesitamos la lengua para comunicarnos.”Sin la ayuda del lenguaje –leemos en este libro- somos estúpidos, inarticulados, toscos e insociables”. Por lo tanto, fomentar la lectura ha de ser una tarea urgente, no sólo de los educadores, sino de los padres y el resto de la sociedad.

            Los dos autores de este ensayo que hoy reseñamos nos ofrecen un buen motivo de porqués y un puñado de fórmulas o recetas –como las llaman- llenas de optimismo y fáciles de aplicar. José Antonio Marina es catedrático de Bachillerato, filósofo  ensayista. Su trayectoria es sólida y va avalada por premios y obras importantes dentro del campo del pensamiento y de los sentimientos. María de la Válgoma es profesora de Derecho Civil en la Universidad Complutense de Madrid y está muy interesada por la literatura.

            “La magia de leer” es de lectura fácil y enriquecedora. Se divide en siete capítulos de títulos tan sugerentes como: “La magia de la lectura”, “¿Por qué se ha perdido la magia de la lectura?”, “¿Por qué hemos de recuperar la magia de la lectura?”, “Los enigmas del deseo”, “Tareas para los padres”, “Tareas para los maestros de primaria” y “Tareas para los profesores de secundaria”.

            Queda claro que, como leemos en la página 71, la lectura es “el medio más eficaz para adueñarse del lenguaje, lo que, a su vez, es condición indispensable para el desarrollo de la inteligencia, la plenitud afectiva de nuestras relaciones, y la dignidad de nuestra convivencia”. Con éstas ya tendríamos bastantes razones para fomentar la lectura, pero se añaden muchas más que el lector descubrirá a cada paso. Además, continuamente se aportan ejemplos y citas que hacen más enriquecedora nuestra lectura.

            Ofrece lo que los autores dan en llamar recetas mágicas y concretamente da seis:

-Primera: contagiar el entusiasmo por la lectura

-Segunda: aprovechar la tendencia que tienen los seres humanos para imitar conductas y hacer que los niños se fijen en que los mayores también leemos y lo imiten.

-Tercera: establecer metas y recompensas.

-Cuarta: fomentar la adquisición de hábitos.

-Quinta: cambiar el sistema de creencias acerca de esta actividad.

-Sexta: allanar los caminos.

            Por si fuera poco, proponen Marina y de la Válgoma una gran conspiración en la que todos estemos implicados, la gran conspiración de la lectura; pero para ello hay de demostrar que leer no es ni aburrido ni obsoleto y que puede competir con la televisión y las imágenes porque, precisamente, ni es televisión ni imagen y nada tiene que ver con ambas. El mundo de la lectura se ampara en el libro y un libro es siempre un tratado de magia que está por abrir. Nuestra cultura, lo más antiguo que somos y que sentimos, nuestras raíces, nuestros sentimientos, nuestros amores y nuestros anhelos todos se basan en la escritura y en la lectura. ¿Quién de niño no ha sentido la fascinación por un cuento contado por su abuela? Somos seres humanos y, para seguir siéndolo, jamás debemos olvidar ni soslayar nuestra parte lingüística, la más importante, la que nos sustenta y nos da dignidad.

 

           

 

 

 

La página escrita

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LA PÁGINA ESCRITA,
DE Jordi Sierra i Fabra, SM, 2006.

Anabel Sáiz Ripoll

“La página escrita” se inicia con unas aseveraciones rotundas. Jordi Sierra i Fabbra asegura que “No hay un método para escribir” y añade: “No existe un manual”. No obstante, sí es capaz de escribir cómo escribe él, de qué manera organiza sus materiales, cómo crea las secuencias, las historias, los personajes…; en definitiva, sus propios recursos de escritor, su experiencia a la hora de crear una historia y su, por qué no, instinto e intuición. Estos ingredientes, y toda la fuerza de un hombre apasionado por su trabajo, son los que encontraremos en “La página escrita”.
Sierra i Fabra no da la fórmula para la novela perfecta, porque no existe, no quiere hacer clones, antes al contrario, huye de los estereotipos y de las fórmulas manidas, por eso “La página escrita” no es un manual académico, y sin embargo su utilidad es superior nos atrevemos a decir porque está escrito desde la experiencia, desde la ilusión y con la fuerza y energía que siempre derrocha este escritor camaleónico y visceral.
“La página escrita” se divide en 9 capítulos y, fiel al estilo del autor, cada capítulo está subdivido en otros apartados breves que es donde Sierra i Fabra desarrolla sus propias técnicas, inspiradas en la libertad y el respeto, porque él no quiere imponer nada a nadie, solo muestra cómo escribe y por qué lo hace así. De esta manera, ejemplifica sus técnicas narrativas con fragmentos de sus novelas y hace, así, un ejercicio importante de autoanálisis.
En cada uno de los apartados, Jordi Sierra i Fabra hace preguntas y las responde, se pone en la piel de los jóvenes narradores que es a quienes, en definitiva, va dirigido el libro, aunque nos puede interesar a todos los que amamos la palabra escrita y queremos mejorar nuestras habilidades.
Sierra i Fabra, fiel a su estilo rápido, de párrafos breves e impactantes, va desglosando aspectos como los géneros literarios, los personajes, el guión, la narración, el diálogo y va demostrando que es un escritor que cuida mucho sus novelas, aunque a menudo se le critique por su rapidez a la hora de escribir. Este libro demuestra que sus proyectos nunca surgen de la nada, sino que se crean a partir de un buen guión y una buena reflexión previa.
Son interesantes las pequeñas frases entresacadas del texto que aparecen resaltadas en gris y que resumen lo que se está diciendo a cada momento, así: “El arte de contar historias es la suma de muchos factores” o “Un buen guión te asegura en un gran tanto por ciento una buena novela”. Tampoco son infrecuentes los decálogos a los que Sierra i Fabra es aficionado.
En suma, un libro práctico, lleno de vida y de garra, también de ironía y de honestidad, que puede ayudarnos a escribir mejor, aunque, como dice el propio escritor al final, lleno de ironía: “Por lo tanto, el último consejo es: no hagas caso de nada de lo que te he dicho y móntate tu propia película. Sé feliz”.
“La página escrita” se lee de manera rápida y con mucho interés, puesto que Sierra i Fabra se dirige continuamente a un tú, al propio lector, y lo implica en la lectura como si de una novela de suspense se tratase.