Category Archives: Novel.la d`imaginació

“Tester”

Tester (Probador),

Jordi Sierra i Fabra,

Barcelona, Edebé, 2010.

(Periscopio, 76)

 

En poco menos de una semana, la vida de Lennon dará un cambio significativo. Uno de sus amigos, Hardy, acaba de morir en un accidente de moto. Tester es un inquietante thriller sobre el mundo de los videojuegos. Jordi Sierra i Fabra acude a su estilo más trepidante para narrar esta historia que habla de la amistad, de la codicia, del miedo, del amor y de una serie de sentimientos y emociones, tan a flor de piel, que parecen ser vividas por el propio lector.

Hardy no ha muerto casualmente y eso lo descubre Lennon gracias a la hermana del fallecido, Laura, una joven con la que mantuvo una relación de adolescentes y de nuevo irrumpe en su vida. Lennon se ha emancipado, aunque le cuesta mucho salir adelante, pero lo hace gracias a sus dibujos. Todo su grupo de amigos, superada ya la veintena, ha perdido la fuerza de la adolescencia y cada uno vive cómo puede. Hardy era probador de videojuegos, el mejor y eso le supuso la muerte, como, sin duda, el lector descubrirá.

Tester alude a una realidad muy común entre los más jóvenes, como son los videojuegos. Objetos de culto, en algunos casos, motivo de adicción, elementos de la modernidad más actual… contra el videojuego ya no se puede luchar, ni se debe, quizás, aunque sí, y ahí está la visión del autor, se pueden cuestionar algunos usos y abusos, las temáticas y ciertas maneras agresivas de tratar de imponer el producto.

Jordi Sierra i Fabra, está claro, ha creado su propio sello personal a la hora de narrar, aunque es capaz de manejar registros dispares. En esta ocasión, nos ofrece un relato más que ágil, rápido, que pretende dejar sin aliento al lector, que se lee casi sin despegar los ojos de las páginas. No hay retratos psicológicos de los personajes, es la verdad, pero sí deducimos muchas de sus características a través de sus propias palabras, como es el caso de Lennon, o del recuerdo o la impronta que dejaron, como le ocurre a Tomás o Hardy. Hardy llevaba un mes desconocido, fuera de control, había descubierto algo en el último videojuego que estaba probando que iba más allá de lo legal, puesto que el juego, incluso para él, un probador veterano, era adictivo.

Los diálogos de Tester son también muy sierraifabrianos, ya que desprenden toda una lección de vida, sobre todo las intervenciones de Jorge, un joven muy parecido a Lennon, de ahí el apodo, que trata de ser legal, de vivir libremente, de saborear su independencia y de exprimir su tiempo. Todas cualidades que le gustan mucho al autor, incluída la admiración por el Beatle.

A menudo el poder genera más poder y, en este caso, eso conlleva una ambición desmedida y mucho miedo a perder, de ahí la muerte de Hardy y de ahí también todos los problemas y situaciones, muy al límite, que vivirán Lennon y Laura, de las que saldrán, por supuesto, fortalecidos.

Las relaciones familiares, las relaciones afectivas, los contrastes entre los poderosos y los humildes, el trabajo bien hecho frente al oportunismo, el amor y el desamor, la adolescencia y la madurez, el crecimiento personal… son algunos de los temas que ofrece este relato.

Tester, en suma,  es una novela que maneja muy bien las coordenadas temporales y que se estructura, precisamente, en torno al factor tiempo. Sin duda, una novela juvenil muy atractiva.

La niña que podía volar

 

La niña que podía volar

Victoria Forester,

Montena, Barcelona, 2010.

 

La niña que podía volar es un relato acerca de las diferencias y de lo difícil que es, a menudo, ser distinto en un mundo en el que se tiende a la homogeneidad. Parece que todos hubiéramos de seguir un dictamen y si alguien se sale de la fila está perdido o se le tacha de excéntrico o de imprudente o, lo que es peor, se le arrincona y ningunea. Por eso, novelas como la que estamos comentando, suponen una bocanada de aire fresco para los lectores. Piper es la protagonista y tiene un secreto enorme: puede volar. Es algo que ha descubierto sola, por sus padres, temerosos, no saben cómo enfocar el tema y es algo que le llevará a descubrir su talento y su potencial. Piper acaba ingresada en una escuela especial con unos chicos especiales y en unas condiciones especiales. La idea del centro, cuyas siglas son DEMENTE, es unificar a los seres vivos y quitar de en medio a aquellos que destacan por cualquier cosa. Lo dirige la doctora Hellion que, en principio, se muestra encantadora, pero que también esconde un secreto. Piper y sus compañeros preparan un plan de huida porque se dan cuenta de que lo que quieren hacer con ellos y no están dispuestos a renunciar a sus dones naturales que, bien mirado, pueden ser muy útiles para la sociedad.

La niña que podía volar está narrada en tercera persona de una manera ágil y directa. Su autora, Victoria Forester, escribe fluidamente, con sencillez, pero sin obviar ningún detalle. No pretende escribir una novela de fantasía, de magia o de aspectos sobrenaturales, sino una novela realista, que muestra lo positivo que es distinto y que, al fin y al cabo, todos somos distintos. Si Piper sabe volar y goza con ello. ¿Qué inconveniente hay? Para llegar a esta conclusión hace falta un largo camino lleno de escollos que solo las personas positivas, como Piper, son capaces de superar.

Interesa mucho destacar el friso de personajes que aparecen en el relato, desde los padres de Piper, una pareja entrañable, hasta los compañeros del centro –con seguridad Conrad es la mejor creación- pasando por la doctora Hellion y una serie de personajes más, como la intrigante del pueblo de Piper que goza sembrando chismes y que acaba, como se dice coloquialmente, con “dos palmos de narices”.

Por otro lado, en la novela también hay una clara crítica hacia los valores que predominan en la actualidad donde el tener es más importante que el ser y en donde las apariencias pueden ocultar mucho dolor y confusión. Lo que realmente es esencial para estos niños con dones es que los quieran y acepten, que se sepan parte de una familia. Eso es lo único que importa.

La niña que podía volar, está llena de momentos líricos, de gran fuerza literaria, como cuando un grillo, también especial, se pone a cantar con todas sus fuerzas y hace que muchas de las corazas se vengan abajo o cuando uno de los niños, el tímido Jasper, recuerda de repente cuál es su don y lo aplica con total vehemencia. La solidaridad, el saber parte de un grupo, el sentirse amparado, la autoestima y una serie de virtudes positivas presiden el relato y permiten que el lector, joven o adulto, pueda reflexionar acerca de sus propios comportamientos.

Es una novela coral que merecería una adaptación cinematográfica.

Las Cajas de China

Las Cajas de China,

De María García Esperón,

Colombia, Hillman, 2008 

 

Las Cajas de China, de la mexicana María García Esperón es un libro que presenta una particularidad narrativa muy atractiva. Esto es, puede leerse en dos tiempos que acaban confluyendo: el tiempo real, el del lector, que coincide con el del niño protagonista, y el tiempo evocado, el tiempo de las leyendas, de la magia que se desgrana en las historias que este mismo niño, Jerónimo, lee, a la vez que lo hace el propio lector. Se trata, pues, de un doble eje cronológico que implica directamente al personaje de ficción y al lector real. La escritora así logra un juego literario espléndido. Las Cajas de China no es solamente un relato de ficción, no, es mucho más que eso: es un conjunto de relatos que, a la manera medieval, están incluidos uno dentro del otro; de ahí el título del libro.

 Gustavo Tajín es el tío aventurero de la familia Tajín. Él es quien envía a su sobrino Jerónimo un regalo muy especial: “… siete cajas, una dentro de la otra”. Este regalo viene envuelto en misterio puesto que, siguiendo las indicaciones de Gustavo, han de abrirse una por día. Eso supone un freno a la curiosidad y un ejercicio de disciplina por parte de la familia Tajín, el padre, la madre y los dos hermanos, Andrés y Jerónimo. Todos están deseando llegar a la séptima caja, pero saben que no deben hacerlo y siguen las instrucciones del tío aventurero, aunque con alguna excepción, que él mismo ya había previsto. La voz de Gustavo se hace oír sonora y recia a lo largo del relato. Ahora bien, esa curiosidad de los Tajín y de sus vecinos es la misma curiosidad de los lectores que, si quieren entrar en el juego que nos propone María García Esperón, han de seguir las mismas instrucciones y leer un cuento cada día. ¿O no? Eso… ya se irá descubriendo una vez hayamos aceptado las reglas del juego. 

El amor, la amistad, la humildad, el respecto hacia unos principios son valores que se desprenden de los cuentos con los que María García Esperón ilustra estas fastuosas “Cajas de China”. 

Las Cajas de China, por lo tanto, contienen más de una historia. El hilo narrativo es el que marca la familia Tajín, con su devenir diario, sus problemas, sus quehaceres y sus preocupaciones. Así, los diálogos entre los Tajín son realistas, llenos de humor y gracia. María García Esperón describe con acierto a esta familia de la clase media mexicana. Trufa estos diálogos con términos propios de México, lo cual dota de mayor plasticidad al relato. Solo por esta historia ya valdría la pena leer el libro. 

No obstante, aún hay más. El regalo de Gustavo Tajín consiste en evocar, para su familia, hermosas historias ambientadas en el Egipto de los Faraones, en la mágica India o en la propia China. Son las historias propias de las leyendas, del acervo clásico, pero rociadas de un tenue perfume y envueltas en el delicado papel chino. Así, conocemos a la princesa Medianoche, la historia de Meryt la mariposa, leemos parte del diario de William Clark o sabemos algo más del gato de Anup.

 Gracias a estas historias, María García Esperón colma el deseo que, desde siempre, el ser humano ha sentido por conocer viejas historias, el deseo de saber algo más de nuestros orígenes y que nos lleva a sentirnos fascinados por las viejas civilizaciones orientales que, como en un prodigio, aparecen ante la familia Tajín. Como dice la propia escritora: “Las Cajas de China es un libro-regalo por naturaleza. A través de su escritura mi intención fue entregar a los niños la magia y fascinación de las civilizaciones orientales encerradas en siete cajas, una dentro de la otra, que el niño protagonista -y los niños lectores- tienen que ir descubriendo al seguir una lectura que debe detenerse cuando el narrador lo indica para retomarse una vez que la ilusión y la curiosidad hayan subido en el termómetro lector”. 

Las cajas de la China, en suma, es un libro poderoso porque encierra las llaves de la imaginación y cuando la imaginación se desata cualquier acontecimiento es posible. Los niños y niñas de 11 o 12 años leerán con gusto estos relatos, pero también los mayores y todos aquellos que, como Jerónimo y su familia, tengan la curiosidad a flor de piel.

Tot despertant la Lluna

Tot despertant la Lluna,

Víctor Panicello, Barcelona, Columna, 2003, (Columna Jove, 183)

 

 

En Xavier és un noi de 12 anys que, de sobte, veu com tota la seva vida podria haver canviat d`una forma dramàtica. La seva mare, embarassada per segon cop, va tenir la criatura més aviat del compte, amb un greu perill tan per ella com per la nena. Totes dues són encara a l`hospital, una a l`habitació i la petita a l`incubadora, lluitant per la seva vida. Mentrestant, Xavier, el seu pare i la seva àvia intenten fer el cor fort i tirar endavant.

Tot despertant la Lluna és una històrica bonica i molt ben narrada. Escrita en primera persona, ens permet veure i entendre el tarannà d`en Xavier, que es fa preguntes, que reflexiona, que té pors i que arriba a algunes conclusions importants. Una és la decisió que pren d`explicar-li a la seva germaneta les coses del món que l`envolten i donar-li així ganes de viure. Gràcies a aquestes xerrades, en Xavier comença a estimar la nena i veu que, entre ella i ell, haurà un lligam per sempre.

Víctor Panicello aprofita les xerrades d`en Xavier per explicar als lectors el funcionament del món i tot allò que ens rodeja i que ens permet viure. Així, ens parla del mar, l`origen de tota la vida; dels animals, del sol i de la lluna i de tantes coses més. Xavier té un projecte molt ben traçat i escriu amb molta cura els apunts d`allò que vol explicar a la nena, a peu d`incubadora. Ell és conscient de que no l`entendrà, però també pensa que, pot ser, quan ho escolti novament, li serà més fàcil entendre-ho.

Tot despertant la lluna és l`opera prima en català d`en Víctor Panicello i ens sembla una lectura agradable i recomanable pels nois i nois del 12 anys fins als 14 o més, perquè, repetim, la història, fins i tot, pot agradar als adults.

Xavier ens parla en la seva vida quotidiana, de com són els seus pares, de com ha patit la seva mare; també ens explica coses del seu institut, on ell és dels més petits i tot el que això comporta. Coneixem també el seu millor amic, l`Andreu. I assistim al seu primer enamorament, que d`alguna manera el va madurar una mica més. Per altra banda, la relació del noi amb la seva germana prematura ens commou. Entrem, amb ell a un lloc quasi sagrat, ens apropem de puntetes a l`incubadora i sabem que els nadons prematurs també lluiten i molt. Gràcies a una infermera, en Xavier se sentirà una mica més confortat quan veu com un petit mor sense que els metges el puguin salvar.

Ara bé, ens falta una part important i és el nom de la nena. Ningú no li ha donat, perquè, pot ser, es pensaven que no sobreviuria, però sí ho fa i amb força. En Xavier ha triat per ella el nom més bonic del món, que també dóna títol a la novel·la: Lluna.

Tot despertant la Lluna és, en definitiva, un cant d`amor i un text que ens fa reflexionar sobre les petites coses de la vida a les quals no els hi donem importància i que, ben mirades, són miracles quotidians, com la llum, l`aire o les plantes.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El bosque de los árboles muertos

 

 

El bosque de los árboles muertos,

Ana Alcolea, Madrid, Anaya, 2010, (Espacio Abierto, 145)

 

Anabel Sáiz Ripoll

 

La autora que hoy nos ocupa está de actualidad puesto que acaba de ganar el VIII Premio Anaya de Literatura Infantil y juvenil con su obra La noche más oscura, destinada a lectores desde 12 años.

Ana Alcolea, en El bosque de los árboles muertos, retoma motivos que nos son familiares de sus anteriores obras como El medallón perdido y El relato de Carlota. La autora va creando, libro a libro,  su propio universo literario con un estilo personal y lleno de sugerencias.

En esta ocasión la joven protagonista, Beatriz, contra su voluntad, viaja a Escocia para pasar sus vacaciones de verano. Ha suspendido el inglés y su madre ha decidido enviarla a casa de una amiga para que practique el idioma. Beatriz se lo toma con bastante malhumor, aunque, ha de cambiar de idea a lo largo del relato y es que ese verano será tan especial que, al final, Beatriz acabará madurando y aprendiendo mucho acerca del alma humana y de su propio pasado.

Como ocurría en las dos novelas anteriores de Ana Alcolea, esta vez también se trata de un viaje iniciático, aunque mezclado con el misterio y la aventura.

Beatriz viaja con su familia de acogida, formada por los padres, un joven de su edad, Peter, y dos pequeños gemelos, hacia un antiguo castillo escocés, lejos del mundo y de la vida, para pasar el verano. Poco a poco, se va empapando del ambiente del lugar y a involucrarse en las historias del pasado. La esposa del capitán, dueño del castillo, Renata, murió hace años, aunque, de alguna manera, se aparece a Beatriz, a Peter y a los hermanos gemelos. El color amarillo de su traje, unas cartas que guardó y las fresas salvajes que tanto le gustaban se convierten en símbolos de su vuelta al mundo de los vivos. No obstante, esta aparición fantasmal no está descrita con aspavientos narrativos, sino de forma muy sencilla y realista. El mundo de los vivos y los muertos parece mezclarse en la novela y no solo en forma de recuerdos, sino de una manera más directa.

Cuando Beatriz, con la ayuda de Peter, averigua el enigma de Renata, a la vez, aprende mucho más de sí misma porque, y eso sí es el destino, el padre de Renata es el mismo idealista inglés, miembro de las brigadas españolas, que luchó en la guerra civil y conoció a la bisabuela de Beatriz con quien tuvo una hija, su abuela, aunque ésta no llegó a conocerlo. Renata y su abuela murieron el mismo día, un 10 de julio, y estaban unidas por algo más que el azar, ya que son hermanastras.

En El bosque de los árboles muertos, como acabamos de ver, se alude también a la Guerra Civil española y a un escritor muy importante, Georges Orwell, quien también luchó por la causa republicada y se retiró a una isla muy cercana al castillo en que veranean Beatriz y sus amigos.

La novela se lee de manera rápida y fluida. Uno de sus aciertos es que maneja distintos tiempos, el presente y el pasado; así, de manera paralela, el lector asiste a la historia de Renata y también a las pesquisas de Beatriz y Peter. Ana Alcolea impregna el relato con una atmósfera de suspense y eso hace que se lea con creciente interés.

Por otro lado, la evolución psicológica de Beatriz está bien trazada. El resto de personajes también cobran importancia, aunque, por supuesto, el más mágico de todos es la figura de Renata.

En definitiva, el lector que entre en el mundo de El bosque de los árboles muertos no quedará defraudado; es más, tendrá ganas de averiguar más acerca del resto de los personajes y se preguntará si entre Beatriz y Peter habrá algo más que la amistad. Eso, tal vez, lo averigüemos en otras entregas.

Queremos, por último, comentar las espléndidas descripciones que traza la autora. La Escocia profunda, más agreste y cercana a los orígenes, con su vegetación autótona –el brezo- y sus habitantes hechos al trabajo y a la sobriedad, quedan perfectamente retratados en la novela.

Industrias Gon


La Princesa Doña Letizia entregó ayer en Alcalá de Henares el XIV Premio Cervantes Chico al escritor de literatura infantil y juvenil Fernando Lalana como han reflejado medios como Periodista Digital

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Como Homenaje de Pizca de papel nuestra colaboradora Anabel Sáiz Ripoll ha preparado una reseña de sus últimos libros: Industrias Gon con la que inauguramos una serie dedicada a la obra de Fernando Lalana. ¡Enhorabuena Fernando!

Industrias Gon
de Fernando Lalana-José Mª Almárcegui.
Ilustraciones de Mike Casal.
Madrid, Macmillan Infantil y Juvenil,

col. Librosaurio, 2010. 144 pp.,

En el relato, Nico es un joven avispado y huérfano, que vive en un orfanato en Miranda del Ebro. Un buen día su vida cambia porque recibe una oferta de trabajo de la manera más insospechada, a través de un anuncio en el periódico que le llega volando… y con varios años de retraso; pero eso Nico no lo lee. Decide escaparse y tomar el tren que lo llevará de Miranda a Zaragoza, en donde está su futuro. Allí conoce al sr. Gon, de González, quien, en principio, se muestra reticente y desconfiado con la presencia de Nico.

Lo curioso de la historia es que Gon dirige una pequeña fábrica de artículos de broma y malvive más que otra cosa, porque su hermano, que era el cerebro, murió antes de llevar a cabo sus múltiples ideas. Ahora bien, Nico es mucho más listo de lo que parece y encuentra los cuadernos de Cecilio, quien se le aparece de una manera más bien estrambótica. Total, gracias a Nico, el sr. Gon vive una segunda juventud.
Venden sus productos a una gran empresa francesa, aunque se hace llamar Fumanchú, aunque la operación resulta fallida puesto que los de Fumanchú son unos piratas que comercializan los productos de Gon con su nombre. Ahora bien, eso no importa ya demasiado, porque la vida de Gon y de Nico ha cambiado, ha dado un vuelco espectacular gracias a Odile, una atractiva francesa, rica y relacionada con la industria de la broma. Y el lector ya verá qué pasa y cómo acaba la historia.
Industrias Gon es un relato muy divertido, que se desarrolla en la década de los 60, en una capital, Zaragoza, que Lalana, por supuesto, conoce muy bien y que suele recrear en sus obras. Los dos personajes principales, Nico y Gon aparecen muy bien caracterizados, sobre todo Gon, que es quien evoluciona más en la novela, porque, de aparecer como un viejo descuidado y desalentado, se convierte en un hombre maduro, de buen ver y con ilusiones.
En cuanto al negocio de la broma, que es el que ocupa a Gon, Lalana lo describe muy bien y se recrea en ello. Todo tipo de elementos divertidos, para gastar bromas les o pesadas aparecen en el relato, como las bombas fétidas. ¿Sabía el lector que existen cuatro tipos de bombas fétidas? Pues si lee Industrias Gon sabrá esto y mucho más.
La novela se estructura en dos partes, más una “Previa”. A su vez se organiza en capítulos que van desgranando una historia hilarante, llena de humor, aunque también tierna y muy humana. Resultan conmovedoras las apreciaciones que hace Gon de sí mismo, cuando se considera poca cosa para Odile.
Industrias Gon se lee deprisa, puesto que hay mucho diálogo y el estilo narrativo es ágil. Cada página se recorre con una sonrisa puesto que los dos personajes resultan entrañables. Mikel Casal, que es quien ilustra el libro, nos los muestra en la portada rodeados por sus inventos.
Los lectores de 10 años en adelante, y los mayores, se divertirán leyendo esta historia. Los adultos también reconocerán elementos de su época, como esas tiendas en que se vendían toda clase de artículos de broma mezcladas con otros productos. Y los pequeños disfrutarán con las ocurrencias de Gon y Nico.
Publicado por Carmen Fernández Etreros para El Blog de Pizca de Papel el 10/20/2010 01:16:00 AM

 

Por Anabel Sáiz Ripoll.
Industrias Gon es un relato firmado por dos autores que forman un tándem estupendo, Fernando Lalana y José Mª Almárcegui. No es que se sienten a escribir juntos, en absoluto, eso sería más bien complicado. Parece ser que José Mª Almárcegui tiene una imaginación desbordante y aporta las ideas, a cual más descabellada e ingeniosa; mientras que Fernando Lalana, reciente Premio Cervantes Chico, sabe muy bien cómo dar forma a este torrente imaginativo. Juntos, repetimos, has elaborado obras tan absolutamente geniales como Los hijos del Trueno.

La palabra más hermosa

La palabra más hermosa del mundo
de Jordi Sierra i Fabra.
Ilustraciones de Agustín Riccardi.
Algar, col. Algar calcetín, 57, 2010.
120 pp., 8.35 €.

Por Anabel Sáiz Ripoll.

La palabra más hermosa es un nuevo tributo del autor barcelonés Jordi Sierra i Fabra a las letras, a la comunicación, al arte de leer. Se trata de una historia destinada para lectores desde 10 años que, partiendo de una situación real, nos ofrece una alegoría del mundo de las palabras. Georgina y Daniel son dos hermanos gemelos que, a causa de una enfermedad, han estado dos meses ausentes del colegio. Cuando vuelven, han de ponerse al día en todo y no les resulta nada fácil. El profesor Maestro, valga la repetición, es el sustituto de la profesora de lengua y decide no hacerles un examen, sino algo mucho peor: les pone una prueba para decidir si merecen pasar de curso o no. La prueba consiste en una especie de enigma ya que han de descubrir, como dice el título, cuál es la palabra más hermosa…

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Publicado por Carmen Fernández Etreros para El Blog de Pizca de Papel el 11/01/2010 01:17:00 AM

Peligro en la Aldea de las Letras

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María Eugenia Mendoza Arrubarena,

Publidisa Mexicana, México, 2008

  

Hilaria es una jovencita vivaz, lista y muy observadora. Le gustan mucho las tareas escolares y disfruta aprendiendo, por eso participa en un concurso muy especial que le brindará la posibilidad, no solo de ganar un estupendo viaje, sino la de conocerse mejor a sí misma y a su propia familia, porque Peligro en la Aldea de las Letras viene a ser un viaje iniciático muy especial, ya que son las propias letras quienes, en sus especiales papeles de generadoras de la escritura y las palabras, se convierten en guías de excepción de Hilaria quien, ni por un momento, duda de que la Aldea de las Letras, a la que viaja de una manera casual, sea real; es más, vuelve a ella en un momento puntual para defenderla de ataques externos que hacen que el idioma se tambalee.

En esta ocasión, María Eugenia Mendoza Arrubarrena defiende el idioma, defiende la importancia de las lenguas maternas en el mundo, en este mundo global en que parece que solo dominen unas cuantas lenguas y las otras queden postergadas porque cualquier lengua, si sirve para comunicarnos y para entendernos, es importante. La escritora mexicana se centra en la Aldea de las Letras del español, pero puede aplicarse a cualquier idioma.

Interesa mucho el personaje de Hilaria, la niña protagonista, quien, con la ilusión intacta y las preguntas a flor de piel, pronuncia una encendida defensa de la letra hache que conmueve a todas las letras de la Aldea. Debido a un correo electrónico que recomienda la simplificación ortográfica, Hilaria encuentra el tema de su redacción y de su discurso, ya que la letra hache es muy importante para ella: ni más ni menos, es la letra de su inicial, pero estos son motivos egoístas que ella sabe superar y acaba entendiendo que, en el mundo de las letras, como en el de las familias, todos son importantes.

Peligro en la Aldea de las Letras es un texto que combina distintos registros, por un lado, el viaje alegórico al mundo de las letras; pero sin olvidar el entorno de Hilaria (las relaciones con sus padres, con su hermana pequeña, Ana, con su abuela ya fallecida, quien le puso el nombre, con sus amigos, en las escuela), no los aspectos cotidianos del día a día. María Eugenia Mendoza tiene la capacidad de unir, en un mismo relato, distintos registros, hace una defensa de la lectura, de la escritura, critica la pobreza de espíritu de aquellos que quieren reducirnos a seres sin opinión ni capacidad de decisión y, sobre todo, apela a la concordia, al entendimiento.

Un idioma es un ser vivo, que se transforma, y así lo entiende la autora, pero que no admite censuras ni barreras, que es capaz de adaptarse a todas las realidades, pero sin cortapisas.

En definitiva, la novela gustará a los lectores de diez años en adelante, pero también a los adultos puesto que contiene muchos elementos de reflexión. No hay que olvidar también la fina ironía con que María Eugenia Mendoza maneja algunas situaciones y cómo, de manera elegante, resuelve los conflictos, que se plantean en el relato.

El texto contiene el español jugoso de México, buena manera de hacernos entender que, en el caso del español, la madre puede que sea una, pero los acentos y algunas palabras y construcciones son diversas, lo cual enriquece aún más el idioma. Sea como sea, “ninguna letra estorba, ninguna es ociosa, en cambio la pereza mental, la simplificación de las ideas o su anulación, eso sí que daña a la comunicación y a la convivencia humana”.

 

 

 

 

 

 

 

 

Grimpow y la bruja de la estirpe

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GRIMPOW Y LA BRUJA DE LA ESTIRPE,
Rafael Ábalos,
Barcelona, Montena, 2009.
553págs., 19.50€.
ISBN: 978-84-84415-27-5

Literatura juvenil, Fantástica

por Anabel Sáiz Ripoll,
especialista en Literatura Infantil y Juvenil

Grimpow viaja hacia París con sus amigo Weienell y Salietti. Parece que al fin la piedra filosofal ha encontrado su destino, aunque, si al final de la primera parte, “Grimpow”, pensábamos que estaba todo resuelto, estábamos en un error. Rafael Ábalos nos ofrece esta segunda entrega para responder a alguna de las preguntas y plantear nuevos enigmas.
Grimpow ha de quedarse en París, al amparo de los profesores de la Universidad, Anatol Pempis y Edomond de Tokvill, que conocen su secreto y ha de cambiar de identidad para evitar caer en las garras del malvado inquisidor Búlvar de Góztell, que le sigue los pasos muy de cerca. Mientras, la profecía de los Templarios está llegando a su fin, aunque no por influencia templaria, sino por las malas artes del Inquisidor y del hermanastro de rey, el duque de Gauthier, que quiere usurpar el trono a su hermano.
Una joven hermosa que se pudría en las mazmorras acusada de bruja es liberada por Búlvar y conminada a que lo ayude si quiere seguir con vida. Se trata de Agnes, la última bruja de la Estirpe. Ella que ignoraba todo acerca de su pasado va descubriendo, poco a poco, gracias a la vieja bruja que le hizo de madre, a una amiga de su madre verdadera y a su propia intuición, parte de su pasado y entiende que no debe traicionar a su estirpe, pero para ello han de pasar muchas peripecias, mucho dolor y mucho sufrimiento.
Agnes y Grimpow coinciden y el joven se da cuenta de que ella es quien ha de poseer la piedra filosofal, pero Agnes, cegada por el dolor, traiciona al joven y se precipitan los hechos sin remedio.
En la novela, aparte, intervienen otros dos personajes decisivos, el joven Kylian, un estudiante que se hace muy amigo de Grimpow y que lo ayuda en su misión, y Sofi, la hija de uno de los comediantes que se encontraron en el camino. Sofi y Grimpow se enamoran y viven un primer amor adolescente.
Por fin se desvela el secreto de los sabios, el secreto tan celosamente custodiado por los templarios y por todos aquellos que dieron su vida para protegerlo; pero el lector o lectora tendrá que llegar al final para descubrirlo. Eso sí, no es ni oro, ni tesoros, ni poder, es algo mucho más importante.
El libro se estructura en tres partes, divididas en capítulos breves que nos ofrecen, de manera alternada, distintas visiones de los personajes; acaso sea este perspectivismo lo que dota de agilidad narrativa al relato.
Grimpow y la bruja de la Estirpe es una novela que conserva la frescura de la primera parte, aunque se centra más en unos personajes concretos y en sus peripecias. En la novela asistimos a la creación de la sociedad secreta Kôt que, como sabemos, es el título de otra de las novelas de Rafael Ábalos.
La superchería da paso a la realidad, el enigma se aclara, los pactos con el diablo son solo fruto de la sugestión, la razón ilumina los pasos, pero también la intuición. Y el arma más poderosa de la que se valen los perversos es, muy a menudo, el miedo y la ignorancia de las pobres gentes. Estos son algunos elementos que encontraremos en la novela y muchos más. No hay excesivas descripciones, pero sí una narración espléndida y unos diálogos muy logrados, así como algún pasaje de introspección.
Grimpow no puede quedarse en París, con Sofi, porque ha de seguir su camino al lado de sus dos amigos… Tal vez aún nos queden nuevos enigmas por descubrir. Ojalá.
Rafael Ábalos sabe iniciar un relato, lanzar las primeras hipótesis y poco a poco ir retomando los cabos de todas las historias personales de sus personajes para unirlas en un gran proyecto común; en este caso, permitir que el Secreto de los Sabios esté en las manos adecuadas.
Otros libros de Rafael Ábalos reseñados en Pizca de papel:
– Gripow por Anabel Sáiz Ripoll.
– POLIEDRUM por Carmen Fernández Etreros.

Publicado por Carmen Fernández Etreros para EL BLOG DE PIZCA DE PAPEL el 1/21/2010 12:16:00 AM

LA CRIATURA DEL BOSQUE

lacriaturadelbosque

LA CRIATURA DEL BOSQUE,
de Pedro Riera,
Barcelona, Edebé, Colección Otros títulos 13+, 2009.
320 págs., 21×14 cm., 15 €.
ISBN: 978-84-236-9410-5

Literatura Juvenil

Por Anabel Sáiz Ripoll, especialista en Literatura Infantil y Juvenil

La criatura del bosque de Pedro Riera es una de esas novelas que crean lectores y que pueden leerse varias veces a lo largo de la vida ya que, en cada lectura, dependiendo de la edad de lector, uno irá descubriendo nuevos aspectos e identificándose con un personaje u otro.

No es fácil ser un niño como Matías, el protagonista de 10 años, que tiene una cualidad que no siempre es bien entendida por los demás. Matías puede comunicarse con las cosas y con los animales; pero no es algo que le permita vivir de una manera idílica, en absoluto, porque, a menudo las cosas son realmente impredecibles. ¿Cómo parar a una cerilla pirómana?, ¿cómo proteger a un servilletero roto de la crueldad de sus compañeros?, ¿cómo entenderse con un abejorro conquistador?, ¿cómo ayudar a un bonsái deforme?, ¿cómo guardar esos secretos? Matías, pese a todo, es un niño feliz que vive con su madre, hasta que un buen día, su padre, Simón Rotundo, decide tomar cartas en el asunto y hacer de su hijo el modelo que él quisiera para sí mismo, sin pensar en los intereses del pequeño, sino solo en su vanidad, en su egoísmo de hombre hecho a sí mismo, que ha superado un pasado de pobreza y que hace de su riqueza material su tarjeta de presentación. Simón es publicista (vendedor de coches, dice su hijo) y quiere que Matías siga sus pasos e inscribirlo en una escuela de élite, contra los deseos del niño. Para ello lo lleva un verano a su pueblo, Acedo de los Aguiluchos, en donde Matías entra en contacto con otras realidades y conoce el secreto del “Bichogordo”.

Todos los vecinos del pueblo pensaban de el “Bichogordo” era uno de ellos disfrazado, ya que desde hace 30 años, una noche especial, los niños del pueblo se internan en el bosque para recibir su bautismo de miedo a cargo del llamado “Bichogordo”. No obstante, con Matías todo cambia porque él descubre la realidad, desea proteger al pobre animal, por el que siente una infinita pena, y acaba callando y ocultando una información, aunque eso le suponga dejar su escuela de siempre y cumplir los deseos de su padre.

Matías crece a lo largo de ese verano, aprende a respetar a los que no son iguales y a valorar mucho más la palabra dada; es más, de alguna manera entiende que la posición de soberbia de su padre es fruto de su inseguridad porque hace del dinero su bandera.

La criatura del bosque presenta una serie de personajes muy interesantes, como son la tía Úrsula, la prima Asia, Belisario, el futbolista retirado, el conde György y otros más que hacen de la novela una historia tierna, hermosa, llena de humanidad.

La criatura del bosque se cuestiona también algunos de los valores de nuestra sociedad actual que no siempre está bien orientada que se suele fijar más en la apariencia de las cosas que en el verdadero trasfondo. Por eso, la mirada de Matías, limpia y no contaminada por el dinero, ve en el “Bichogordo” a un ser desvalido y amable cuya identidad hay que preservar a costa de lo que sea porque, si no, corre peligro su vida. Hay, por lo tanto, una serie de valores implícitos de la novela nada desdeñables y que apelan a la verdad de las personas y de las relaciones humanas.

Un libro escrito en tercera persona y nos descubre, a través de los diálogos y de los fragmentos narrativos, la psicología de los personajes cuyas relaciones van evolucionando a lo largo de la historia. La criatura del bosque es, pues, una novela amena, llena de humor, amor y sensibilidad que gustará, como dijimos al principio, a todos los lectores.


Publicado por Carmen Fernández Etreros para EL BLOG DE PIZCA DE PAPEL el 12/27/2009 01:09:00 PM