Category Archives: Novel.la de creixement personal

MENSAJE CIFRADO

mensaje-cifradoMENSAJE CIFRADO,
DE MARTA ZAFRILLA,
SM, 2007

Anabel Sáiz Ripoll
Doctora en Filología

“Mensaje cifrado” fue Premio Gran Angular 2007. El premio, dotado con 100.000 euros, ha llegado a las 30ª edición y, en 2007, se presentaron 154 ejemplares. Marta Zafrilla (Murcia, 1982) es una jovencísima escritora que mantiene que “Al escribir no conviene perder de vista un detalle importante: que siempre hay alguien al otro lado, personas que están más allá de las páginas, pero que sienten tu voz y escuchan tu historia”.
“Mensaje cifrado” es una novela de intriga y de emoción protagonizada por un adolescente, Santiago, que es quien escribe la historia o recuerda los hechos que sucedieron y que aún no están cerrados del todo, porque pertenecen a un pasado muy cercano. “Mensaje cifrado” es, pues, una novela abierta que invita a que el lector supongo distintos finales.
A la muerte, de su abuelo, que se llama como él, Santiago recibe un legado extraño, el tablero de la oca del abuelo, un viejo tablero que ha pasado por mil batallas y del que el abuelo no quiso desprenderse jamás. Juntos pasaron tardes gloriosas jugando, tanto que Santiago, por su cumpleaños, decide hacerle un regalo especial: recoge toda la información sobre la Oca y, perplejo, comprueba, que entronca con el misterio de los Templarios y con el Camino de Santiago. Lo malo es que nunca se lo pudo leer al abuelo porque murió antes.
Junto al tablero de la oca hay un jeroglífico que Santiago interpreta poco a poco y le lleva a recorrer algunos de los escenarios del abuelo, que estuvo encarcelado durante la Guerra Civil en un pueblo del que ni quiere acordarse, pero al que su nieto vuelve buscando alguna explicación al enigma que le plantea su abuelo.
Santiago, cada vez más inquieto, no sabe con quién compartir sus pesquisas y lo hace con su amigo Ernesto, con el que lleva a cabo la aventura de su vida. En el cementerio de Canila, el pueblo de su padre, un panteón guarda un secreto asombroso del abuelo. Un secreto que no desvelamos, pero que conmociona a su nieto porque, empieza la novela, confesando que lo tiene debajo de su cama y acaba la historia volviendo a preguntarse qué hará con esos petates que esconden algo inquietante.
La novela se lee con creciente interés porque Santiago sabe motivar al lector e implicarlo en su propia peripecia. Destaca el cariño que este chico profesa a su abuelo y los deseos que tiene de respetar su memoria y su recuerdo, aparte de la frescura de sus comentarios e impresiones.
Su autora se siente muy feliz al haber ganado el Gran Angular y desea que sus lectores disfruten “con los enigmas, el misterio y los finales con sorpresa”.

El tesoro de Fermín Minar

EL TESORO DE FERMÍN MINAR,
DE DIMAS MAS, Anaya, 1993 (Tus libros, 123)

Anabel Sáiz Ripoll

“El tesoro de Fermín Minar” se puede considerar una obra de literatura juvenil, pero también un homenaje a la literatura, a las palabras y al diccionario y, a la vez, una novela de crecimiento personal.
La novela se estructura en lo que Dimas Mas ha dado en llamar entradas, concretamente en 27. Se inicia con una carta de Fermín a Lloli y se acaba también con una carta a la misma muchacha, la enamorada de Fermín, aunque entre hay ambas hay una gran diferencia. Para empezar ha transcurrido todo el verano y Fermín ya no es el mismo puesto que ha vivido experiencias decisivas. Ha pasado de ser un chico mediocre, mal estudiante, abúlico y crítico, a ser un muchacho observador, despierto, con la mente abierta y el espíritu inundado por la luz de las palabras; aunque, eso sí, sigue enamorado de Lloli, pero de una manera mucho más coherente y reposada, más madura podríamos decir, aunque sigue siendo un muchacho de 16 años. La primera carta está llena de faltas de ortografía y la última es de una corrección exquisita.
¿Qué le ha pasado a Fermín? Fermín ha suspendido 5 asignaturas y la permanencia en su centro escolar peligra; a de ahí que sus padres le busquen un profesor particular, Manuel Leguna. Leguna es un personaje enigmático que aparece en la vida de Fermín cuando más falta hacía, cuando tenía que enfocar y reconducir su vida en una o en otra dirección.
La novela puede organizarse en torno a tres grandes bloques, la introducción que nos presenta a Fermín en su ambiente familiar y a Manuel Leguna; el nudo que sería la aventura que vida Fermín en el propio Diccionario, más allá de la realidad, en una especie de duermevela, y la tercera parte que es cuando Fermín regresa a la “normalidad” mucho más maduro, mucho más real.
Manuel Leguna es una especie de espíritu que ayuda al muchacho, tanto que Fermín cree que es el propio Diablo, aunque una especie de “Diablo cojuelo”, obra a la que rinde un buen homenaje en las páginas del libro. Cabe señalar que el homenaje continúa con otras obras como “El Lazarillo de Tormes” o “Juan José”, entre otras.
Fermín irrumpe en el mundo de las palabras y las conoce de cerca, las conmociona, por decirlo de una manera. Concretamente la asociación A.L.A., Arabismos Libres Ahora, organizan un movimiento de liberación secesionista que consigue devolver a Fermín a su mundo real; aunque, como dijimos, ya nunca nada será igual para él. Las palabras son también personajes de la novela (al lado de personajes humanos como pueden ser los padres, la hermana, los amigos de Fermín y el propio Leguna, aunque ése no se sabe bien de qué materia está hecho). Dos palabras en concreto cobran protagonismo, Transcriptor General y Amanuense, aunque Fermín se encuentra con otras palabras que encarnan a la perfección, en un juego inteligentísimo, lo que representan.
En definitiva, “El tesoro de Fermín Minar” es un libro lúdico, festivo, un libro de gran frescura, aunque exige una lectura atenta y reposada puesto que son continuos los guiños al lector quien ha de permanecer con la mente bien abierta durante toda la lectura puesto que el juego consiste en saltar de la realidad a la fantasía sin tregua.

Duke

duke1DUKE,
Manuel Quinto, Edebé, 2008

Anabel Sáiz Ripoll

“Duke” es una novela que se publica en una colección juvenil, pero que, como otras muchas, está dedicada al público en general ya que el protagonista no es un joven, sino un anciano, Andrés, de más de 80 años quien, durante un largo fin de semana, cuenta a su nieto, el joven de 20 años que narra los hechos en primera persona, la aventura que marcó su vida.
Duke a quien su nieto apoda así porque le recuerda a John Wayne es un hombre de gran vitalidad. Vive solo en un apartamento situado en un pueblo costero, del Mediterráneo gerundense y toda su vida ha sido un luchador nato. Su nieto lo admira y quiere profundamente, para él, que procede de una familia de padres separados, Andrés es su única referencia familiar sólida. Por eso, se conmociona cuando el abuelo le confiesa que padece cáncer, pero que no quiere que nadie lo vea sufrir si esté con él en los últimos tiempos.
Durante un fin de semana, que es cómo se estructura el relato, Duke decide contarle a su nieto un episodio que marcó su vida y que le sucedió cuando era casi un adolescente en los años terribles de la Guerra Civil. Andrés, que perdió a sus padres en un bombardeo, decidió sumarse a la causa republicana y, tras distintos avatares, apareció en un pequeño pueblo de Tarragona en donde fue tratado como un héroe por una chica, por María. María es el amor de su vida, la mujer a quien más quiso y la mujer que dio la vida por salvarlo a él. María era sordomuda y de una vivacidad excepcional. Andrés, quien luego tuvo un mal matrimonio, ahora, al final de su existencia, habla con María y espera que ella vaya a buscarlo. Su relato conmociona al joven nieto quien, poco a poco, deja de ser un oyente sin más y toma partido ante la historia del abuelo que le habla de las mezquindades que hubo durante la Guerra Civil.
El joven, que estudia cine, pretende hacer un guión con lo que le cuenta el abuelo y, de alguna manera, el libro que escribe, “Duke”, podría ser el embrión de este guión.
Manuel Quinto, escritor polifacético, ha querido escribir un homenaje a los hombres combatientes de la Guerra Civil, a aquellos que lucharon de manera altruista, pero tampoco quiere olvidar el presente, de ahí que sean dos los protagonistas de la novela: un abuelo y el nieto.
Por otro lado, encontraremos referencias abundantes a la cocina, ya que al abuelo le gusta el buen comer; también a la navegación, ya que suelen salir a pescar en un bote estrafalario que llaman ¡Virgen Santa!. Por otro lado, distintos son los personajes que se asoman al libro envueltos en sus propias soledades, entre los que destaca Sebas, el portero esperpéntico del edificio en el que vive Andrés.
“Duke” está escrito de manera elegante y directa, con unos diálogos vivaces y una narración que no pierde el pulso de la historia en todo el relato. Una buena lectura, sin duda que nos habla de la amistad, del amor, de las relaciones personales y nos envuelve, poco a poco, en una atmósfera intimista en donde sólo importa lo que dice Andrés y lo que piensa su nieto. “Duke” es una larga confesión de principios, hecha en voz baja, sin aspavientos, pero llena de verdad, de orgullo y de heroísmo.