Sant Jordi 2019: Los límites del humor: ¿Podemos reírnos de todo? Autoria: Misha

Hay muchos tipos de humor, en general hay dos tipos, el que es sano y el que no. El problema está en la gente y su forma de pensar. Depende de la persona con la cual compartas la broma, le hará gracia o le afectará personalmente.

La razón de su reacción cambiará en función de su vida y de sus valores, en caso de tener la broma normalizada, ya sea sana o no, dependiendo de su pensamiento y forma de ser, reaccionará de una manera u otra.

El humor tiene límites, que dependen de muchos factores, tales como la época, la sociedad y el momento. Sin embargo, el humor que supera los límites es el que más suele hacerle gracia a la sociedad o a pequeñas comunidades de ella.

Por ejemplo, si enciendes la televisión, puedes ver que la gran mayoría de bromas son superficiales, evitan palabras malsonantes e intentan alcanzar al máximo número de personas mediante bromas sanas, evitando así el humor negro para no manchar su imagen.

La sociedad establece unas reglas que se consideran correctas y la gran  mayoría de personas prefiere responder con lo correcto por miedo a ser discriminado, encerrando su propio yo y evitando reír a bromas consideradas ofensivas.

Pienso que el humor negro hace gracia, deberíamos evitar tomárnoslo a nivel personal y tomarlo como lo que es, humor.

Aún así, siempre hay que evitar los extremos, el límite que deja de lado el respeto y la educación, porque al fin y al cabo, su propósito es hacer reír y no hacer daño.

En definitiva, los límites existen, por el miedo o los sentimientos de cada uno.

Sant Jordi 2019: convocatòria i bases.

Bona tarda a tothom, ja ha arribat el moment de convocar un concurs d’articles d’opinió sobre una sèrie de temes. Jo proposo tres temes, si vols fer un article sobre un tema que no estigui aquí recollit, consulta-m’ho i en parlem:.

  • No siguis feminazi: l’ascens progressiu de l’extrema dreta comporta, entre d’altres aspectes, el revisionisme envers una sèrie de valors que, a les darreres dècades havíem considerat com a prou establerts a la nostra societat. El feminisme, en tant que moviment de lluita per la defensa de la igualtat de drets, és ara, des d’aquests posicionaments reaccionaris, reinterpretat com a moviment en contra dels drets dels homes. Què en penseu? 
  • Què ets? Què diu el teu DNI? Des d’avui, l’Ajuntament de Barcelona dona la possibilitat de registrar-se amb el nom i gènere amb el que s’identifiquen a les persones transexuals, transgènere i intersexuals. D’aquesta manera, és cada persona qui decideix com registra la seva condició, al marge de com la identifica el seu document d’dentitat. Si voleu llegir sencera la notícia abans d’opinar, podeu anar a aquest enllaç.
  • Els límits de l’humor: podem riure de tot? Fa setmanes vam debatre sobre aquest tema a 2n de btx. A des d’una perspectiva teòrica; fa uns dies, la mort es va apropar perillosament al nostre institut. Des d’aleshores, he sentit (i he fet) bromes d’humor negre i m’he demanat si era èticament correcte.

1- Pot participar qualsevol alumne de Batxillerat i de 4t d’ESO de l’Institut  Maria Aurèlia Capmany.

2- Per concursar cal presentar un article d’opinió escrit a doble espai, amb una extensió màxima de dues cares, en català o castellà. Els treballs s’han de lliurar a Jesús Gómez per mitjà del correu electrònic (jesus@institutcapmany.cat)

3- Els treballs s’han de signar amb nom i cognoms (que només coneixerà l’administrador del bloc) i seran publicats al bloc (sota pseudònim) tot identificant-los com a treballs de concurs.

4- La data límit per al lliurament dels treballs és divendres 22 de març de 2019L’administrador es reserva el dret de publicar o no qualsevol treball lliurat fora de termini.

5- Tots els alumnes podran puntuar tots els treballs presentats excepte el propi. Les puntuacions s’efectuaran com a comentaris als articles publicats i seran publicades anònimament. El jurat tindrà en compte les puntuacions dels alumnes.

6- El jurat valorarà la coherència, originalitat i correcció de les argumentacions, així com la riquesa lèxica i la correcció tant en la redacció com en l’ortografia. S’aplicaran els mateixos criteris de censura als treballs de concurs que a la resta d’articles i comentaris del bloc.

7- S’atorgarà un primer i un segon premi, el valor del qual serà idèntic a la resta de premis atorgats als diferents concursos literaris de la diada. El jurat es reserva el dret de declarar desert el premi.

8- Els premis es lliuraran al llarg de les celebracions de la diada de Sant Jordi.

Por qué no ser animalista

¿Eres animalista? No pasa nada, todos tenemos derecho a equivocarnos de vez en cuando, y equivocarse de manera no intencionada no es malo, lo que es malo es seguir haciéndolo, adrede y sabiendo que puedes evitarlo.

Os propongo un ejercicio mental, pensad en qué razones puedo tener para detestar el animalismo (que no a los animalistas) mientras leéis las definiciones:

La palabra animalismo, es el nombre que ha tomado el Movimiento de liberación animal, que es como se llama oficialmente. En las próximas líneas,  voy a dedicar únicamente a definir animalismo para que entendáis de que vamos a hablar, y de por qué es un movimiento repudiable.

Cito textualmente: “El animalismo es una ideología que afirma que los animales (todos) tienen los mismos derechos que un ser humano, y cuya vida debe ser respetada de la misma manera que la vida de cualquier hombre.

[…]  Un verdadero animalista sostiene que todo animal no-humano (siendo esta denominación bastante común en la corriente) debe ser, ante cualquier circunstancia, respetada en tanto ser vivo.” [1]

“El objetivo general del movimiento es erradicar el especismo, que consideran antropocéntrico, es decir, en la discriminación negativa de los animales no humanos, generada por el hecho de pertenecer a especies diferentes a la humana.”[2]

Como hemos podido leer, el animalismo sostiene que todas las especies animales, tienen el mismo valor, y por lo tanto, los mismos derechos. Por lo tanto, lo que sostiene este ilustre movimiento es que cualquier acto que hagamos, en el cual sometamos a una especie animal, por más que este beneficie a otra, este acto será ilegítimo.

Este movimiento hace aguas por todos lados, especialmente porque el planteamiento que vertebra este movimiento, no solo es absurdo, sino que para sorpresa de todos, parte de una premisa errónea, y es el afirmar que todos los animales tienen el mismo valor. Esto puede ser cierto desde el punto de vista de una planta, o un hongo, que es al nivel al que se quieren poner los animalistas, pero entre dos animales, siempre tendrá más valor el que sea de tu especie, el que sea de tu raza, el que sea de tu manada, colonia, jauría… y por último, siempre será más valioso el que sea de tú familia, aunque por supuesto, lo más importante siempre será el animal en sí. Y esto es así, no hace falta un estudio a fondo para ver que las gaviotas solo actúan para ellas mismas, o para la de sus crías, o que las hormigas despedazan insectos por el bien de la colonia, y que si en algún momento, se genera una disputa entre dos machos de la misma especie, o dos colonias del mismo insecto, estos pelearán hasta la muerte, porque lo que prevalece es la supervivencia y la selección natural.

Por lo tanto, si todas las especies actúan de la misma forma, no es lógico que nos exijamos el mismo trato para los animales que para los otros seres humanos, especialmente si son de nuestra misma familia.

Remarco que es cierto que si no fuésemos animales, la afirmación de que el ser humano tiene el mismo valor que cualquier otro animal podría ser razonable, pero en este caso, los seres de nuestra especie tienen que primar por encima de cualquier otro animal.

¿Esto quiere decir que es legítimo un maltrato o explotación a un animal? Bueno, considero que única y exclusivamente si hay una razón que lo justifique, es decir, si se hace por el beneficio de algún otro ser humano, y como lo más importante para el hombre es el propio hombre, este acto es moralmente correcto. Por lo tanto, la explotación animal es legítima, y para corroborar esta afirmación, además del razonamiento anterior, podemos justificar la ganadería aludiendo a que otros animales como la hormiga  Melissotarsu  también lo hacen. Cabe remarcar que cuando se domestica un animal, este pasa a ser una parte (inferior a la humana) de nuestra comunidad, y como nuestra propiedad que es, tenemos el deber de cuidarla y hacernos responsable de ella siempre y cuando no represente una amenaza. Y si el mantener a nuestro animal doméstico supone matar otras especies para que coma, es nuestro deber, y por lo tanto es correcto.

La caza y la pesca al igual que otras prácticas que consistan en matar animales por diversión, están igualmente justificadas, ya que hay muchos otros animales que también matan por placer o diversión, cosa que técnicamente no es incorrecto siempre y cuando sea para conseguir algún beneficio para el ser humano (carne de caza o pescado) a parte de la recreación lúdica, y no suponga un peligro para el medio ambiente. Además el animal muere al instante y no sufre.

Considero que se ha distorsionado la manera de ver a los animales en esta sociedad, y no nos damos cuenta de que el orden natural es que nos beneficiemos a costa de otras especies, ya sean animales, plantas u hongos.

Para acabar me gustaría que leyeseis este poema llamado “Elogio de la mala conciencia de uno mismo”, escrito por la premio nobel de literatura Wislawa Symborska

ELOGIO DE LA MALA CONCIENCIA DE UNO MISMO. WISLAWA SZYMBORSKA

El buitre no tiene nada que reprocharse.
Los escrúpulos le son ajenos a la pantera negra.
No dudan de lo apropiado de sus actos las pirañas.
El crótalo se acepta sin complejos a sí mismo.

No existe un chacal autocrítico.
El tábano, la langosta, la tenia y el caimán
viven como viven y así están satisfechos.

De cien kilos es el corazón de la orca,
pero no le pesa.

Nada más animal
que una conciencia limpia
en el tercer planeta del Sol.

 


Webgrafia

Definiciones de animalismo

http://klinechair.missouri.edu/docs/equality_and_animals_copenhagen.pdf [1]

https://es.panampost.com/priscila-guinovart/2017/09/02/animalismo-postura-libertaria/?cn-reloaded=1 [2]

¿Está hecho el feminismo por y para los hombres? Autor: David Germán

Hoy en día todos sabemos lo que es el feminismo, de lo que trata y qué pretende conseguir. Si bien no, el feminismo es el movimiento social de la mujer en la sociedad patriarcal (que favorece más a los hombres que a las mujeres) y tiene por consecuencia la equidad de género. Y pese a ser una lucha exclusiva de las mujeres, en la que los hombres podemos ayudar y ser partícipes, nos la hemos acabado adueñando. Por ejemplo, cuando una mujer que se considera feminista hace algún acto reivindicativo, no consigue la controversia que consigue un hombre haciendo exactamente lo mismo, si no, solo hay que mirar en las notícias, cómo a un hombre se le aplaude y agradece por ser inclusivo y tratar en femenino a un grupo de personas que en su mayoría son mujeres, y cómo hacen caso omiso a la que día tras día lucha y aporta el triple que una simple palabra. No desprestigio el gesto, pero hay que ser realista, las mujeres van a estar siempre invisibilizadas, bajo la sombra del hombre, y al igual que en otras luchas, hasta que alguien, que no pertenece en primera persona en el movimiento, hace algo, no se está bien visto. Pongo como ejemplo de esto al colectivo LGBT, que llevamos años tratando de visibilizar que los hombres que se pintan las uñas no han de ser homosexuales o bisexuales exclusivamente por hacerlo, si no que lo hacen por puro gusto, sin excusa ni condición alguna. Pero hasta que no lo ha hecho un hombre cisgénero heterosexual, no ha comenzado a verse bien, e incluso esos que se burlaban de ti por hacerlo, empiezan a defenderlo solo porque su ejemplo a seguir lo ha hecho. No voy a discutir tampoco que esas acciones no supongan una evolución en la lucha, pero hay que admitir que molesta. Molesta que se apoderen de tu lucha, y yo, como aliado feminista y activista LGBT, lo reconozco.

Volviendo al gesto inclusivo que he comentado antes, todo se debe a que en el programa de TVE, Operación Triunfo, el concursante Miki dijo “todas nosotras”, refiriéndose al plural del conjunto de personas que formaban el “nosotras”. Las redes sociales y los informativos ardieron con ese comentario, alabando a Miki, el cual se considera abiertamente aliado feminista, y aplaudiéndole, cuando otras mujeres en la academia ya habían tenido ese gesto empoderativo y nadie les había dicho nada. Las redes, también, ardieron porque el mismo programa le hizo un vídeo especial a Miki, felicitándole por su inclusión de género, y, como es normal, las chicas se mofaron del vídeo más tarde, diciendo cosas como:  “¡Qué inclusiva Miki!” “El rey del feminismo” “¡Sin ti el feminismo no sería nada!”, claro que con cierto tono de broma, porque el muchacho tampoco tenía la culpa de nada, más bien la teníamos todos nosotros, es decir, el público, que congratulamos lo que él dijo. También, en otra noticia que leí en Twitter, vi que un hombre destacó en una manifestación feminista por llevar pancartas apoyando el feminismo y a las mujeres. Yo no creo que eso sea malo, de hecho lo valoro, ojalá todos el mundo apoyando la lucha así, pero lo que no veo bien es que tenga el revuelo que tuvo un chico de entre ¿cuántas mujeres? ¿miles? destaque solo por eso, cuando las demás estaban haciendo exactamente lo mismo. Hay quien lo defiende y cree que así es como funcionan las luchas, sin embargo, yo no creo que sea la mejor forma.

El machismo y el sexismo nos afecta a todos, sí, pero las desigualdades sociales no las tenemos los hombres, no sufrimos eso, ni lo vamos a sufrir nunca, por lo tanto, no abanderemos a los hombres en esta batalla.

Concluyendo, el movimiento feminista no nos pertenece a nosotros, sino a las mujeres. Todos juntos ayudamos y aportamos lo que podemos, pero no por ello hay que ponernos la medalla a “feminista del año”.

Contra l’empatia. Autor: Jesús Gómez

Donada l’escassedat de la producció dels alumnes d’aquest curs pel que fa a articles, he decidit redactar un jo mateix per veure si provoco una mica d’activitat mental.

Als darrers anys s’ha estès força l’ús del terme “empatia” especialment en el món educatiu i, el que és més preocupant, quan es tracta de l’educació en valors; allò que abans en dèiem “ètica”.

L’empatia es defineix com una capacitat que ens permet participar dels sentiments d’una altra persona. La definició és molt vaga i es pot confondre amb la tradicional “simpatia”, és a dir, la comunitat de sentiments entre dues persones o entitats, però el terme ha saltat al llenguatge ordinari i ara no perdrem el temps en lluitar a una batalla perduda.

Empatia, per tant, vol dir connectar amb els sentiments dels altres i, això últim, resulta impossible si no es produeix una mínima identificació amb l’ésser amb el que pretenem ser empàtics. Això explica que el mateix conductor que es traumatitza per atropellar a un mamífer (gos, cérvol…) no té cap mena de problema per acabar amb la vida de milers d’insectes amb el mateix vehicle. Puc empatitzar amb la mare de Bambi per què és un mamífer (com jo) però no m’identifico en absolut amb els insectes als que he rebentat el crani o l’abdomen amb el parabrisa del meu cotxe, ja que es tracta d’invertebrats, tenen exoesquelet i més de 4 extremitats, la qual cosa els allunya molt de la imatge que tinc de mi mateix.

Aquí radica el principal problema de basar l’educació en valors en l’empatia: la comunitat de sentiments es produeix si m’identifico amb l’altre ésser, però… i si no m’identifico?

L’altre dia sentia una entrevista a la ràdio uns fotògrafs professionals (lamento no poder donar més dades) que es queixaven del següent fet: pots fotografiar i publicar les desgràcies de qualsevol nen refugiat o del Tercer Món, ara bé, no pots publicar cap fotografia d’una víctima (nen o adult) si aquest pertany a l’anomenat Primer Món. És senzill comparar l’allau de fotografies publicades dels nens refugiats que diferents organitzacions rescaten cada dia de la tragèdia del Mediterrani, amb l’absència clamorosa d’imatges de les víctimes de qualsevol dels recents atemptats dels darrers anys a Europa.

Els fotògrafs deien que el criteri per publicar o no les fotografies es basava en l’impacte que podien produir al públic: la imatge d’una víctima de l’atemptat a les Rambles de l’agost del 2017 resulta insuportable, però qualsevol pot sopar mentre contempla el cadàver d’un nen mort a un vaixell d’Open Arms. La qüestió és no molestar a la persona que està sopant, per què amb una imatge s’identifica (ell, o el seu fill, o el seu net…) i amb l’altre no…

On queda el valor ètic de l’empatia? Resulta que l’empatia pot ser racista? Sexista? Classista? Homòfoba?

L’empatia és un bon instrument si podem garantir la possibilitat de la identificació amb aquell que pateix una injustícia, però si no ens identifiquem (i això passa sovint) és perfectament inútil. No hem d’oblidar que basar l’educació dels valors en l’empatia implica deixar-ho tot en mans dels sentiments i, senyores i senyors, els sentiments no són racionals. Per tant, podré empatitzar amb algunes persones i amb d’altres no; com a conseqüència, seré sensible als drets d’unes quantes persones. Pel que fa a la resta, em passarà el que em passa amb la majoria de la població mundial: amb l’excepció dels que em cauen malament, la resta, i els seus drets, em resulten perfectament indiferents.

En conclusió, no són els sentiments sinó el raonament qui ha d’orientar els nostres judicis ètics i hauríem d’incidir en educar en el raonament ètic, ja que, de la mateixa manera que la raó ens porta a formular lleis científiques que són vàlides malgrat que no ens puguem identificar amb fongs o insectes, la raó ens ha de portar a formular judicis ètics que ens permetin respectar els drets d’altres éssers, malgrat els trobem lletjos, invertebrats… o el color de la seva pell, la seva religió, els seus costums o la seva situació socioeconòmica, siguin radicalment diferents dels nostres. I, ja que ens posem, és l’ètica filosòfica la que pot garantir la racionalitat dels nostres judicis morals.

És a dir, desconfieu dels conceptes que no es defineixen de forma clara, desconfieu de la pseudofilosofia que no remet els seus conceptes a experiències contrastables: en nom de l’empatia podem justificar el racisme o la solidaritat. Quan un concepte se’ns pot girar en contra, més valdria no fer-lo servir per si de cas…

Mi teoría ética. Autor: Daniel Punzano

¿No os pasa que cuando estudiáis teorías éticas, ninguna os cuaja? La mayoría de ellas me parecen lógicas aunque no esté del todo de acuerdo, y algunas hasta me parecen ingenuas.

Pero no me parecía justo juzgar una teoría ética, porque no sé el valor que tiene hacer una, así que decidí dar a luz mi teoría ética, encontrar por mí mismo lo que está bien o mal, no quiero que mis valores dependan de lo que dice otra persona.

Sin más me armé de valor, e hice mi propia teoría ética, que llevo comentando con mis conocidos des de hace unos días.

Mi teoría consiste en cuatro normas, que están ordenadas según su importancia, siendo la primera la más importante, y siendo la última la menos.

Por lo tanto, un acto es bueno si:

  1. Sirve para preservar la especie humana al máximo dentro de lo posible.
  2. Protege la vida del máximo número de personas posibles.
  3. Brinda la mejor calidad de vida posible al máximo número de personas posible.
  4. Mejora la especie humana dentro de lo posible.

Como habéis visto, todas las normas incluyen que se cumplan dentro de lo posible, no soy optimista respecto a mis normas, porque dudo que se puedan acatar al cien por cien, pero creo que si la sociedad se rigiese por estos principios, la humanidad daría un paso adelante.

Si el mundo se basara en estas normas, yo creo que mejoraríamos en gran manera, porque se generaría una sociedad que velaría por el bienestar y la salud del resto, pero sobretodo, por la humanidad. Y sería más fácil juzgar los actos de lo que lo es ahora. La gente se preocuparía porque todos fueran felices, y crearíamos una especie mejorada y más efectiva de lo que lo es ahora, aunque no sea difícil.

El problema de la sociedad es que precisamente se da demasiada importancia a sí misma, cuando, según mi opinión, lo más importante es la humanidad, es decir, el ser humano como especie. Porque la sociedad depende de la existencia del ser humano, pero el ser humano no depende de manera absoluta de la existencia de la sociedad. Y la sociedad, con su sistema económico que depende de la sobrepoblación y la producción energética contaminante, entre otras prácticas que, a la larga, acabarán perjudicando a la humanidad, más de lo que lo están haciendo ahora.

Obviamente es importante que la gente tenga una vida cómoda y feliz, pero estas condiciones jamás deben interferir con ninguna de las normas anteriores. Por lo tanto, tener una camiseta por 4 euros a costa de que los trabajadores de países en vías de desarrollo tengan una calidad de vida miserable, es un acto condenable, pero no lo es tanto como el matar a gran parte de ellos. Y el matar a gran parte de ellos no es tan malo como el matarlos a todos, o el contaminar su zona para perjudicar a las futuras generaciones, porque esto acabaría con la sociedad, al menos en Bangladesh

Por lo tanto, según mi teoría ética, ser animalista, es lo más estúpido por lo que puedes optar, porque es mucho mas importante velar por la raza humana. En cambio, ser ecologista equivale a la mejor opción, porque garantiza que la raza humana siga pudiendo vivir en la tierra, y por lo tanto perdure.

La última norma está introducida para solucionar algunos problemas éticos muy específicos, pero no voy a profundizar en ella a no ser, que me planteéis una de estas.

El cómo implantar un gobierno basado en esta ética, corresponde a un régimen político un poco radical, que prefiero no explicar, pero que no sería necesario implantar si la gente se concienciase de lo que tiene que hacer, y actuase según una ética racional común, en concreto esta.

Si no habéis entendido bien alguna parte de mi teoría, me gustaría que me lo hicieseis saber, para daros una explicación en caso de que sea necesario. También os agradecería si me comentáis algunos de esos dilemas éticos que, como a todos, os quitan el sueño.

También os invito a intentar crear vuestra propia teoría ética y luego discutir al respecto.

Sin más, también os agradecería que me dierais vuestra opinión.

Saludos, humanidad.

 

 

Les aparences no enganyen. Autor: Jesús Gómez.

Com veieu, la imatge de la capçalera del bloc ha estat substituida per un muntatge realitzat per Javier Álvarez de 2n A. La idea va sorgir a partir d’un acudit de baixíssima qualitat que se’m va caure de la boca a classe (o treballeu més o les notes del proper examen seran un “de Sartre”) i a partir d’aquí, la tarda abans de l’examen de Plató, el Javi va decidir que era millor fer un muntatge que estudiar.

Mentre estava maldant per penjar la imatge, vaig pensar que seria una bona idea penjar muntatges, fotografies, dibuixos… fets pels alumnes, sempre i quan tinguin temàtica filosòfica i, de cara a St. Jordi demanar que un jurat decideixi quina és la millor i premiar a l’autora o autor.

El premi consistirà en el que la direcció del centre decideixi i un aplaudiment públic durant la cerimònia de St. Jordi. A més de l’honor d’aparèixer a un dels blocs menys reputats i visitats de la xarxa. Intentarem afegir un premi en forma de pujadeta de nota a tots els participants.

Per tal de no complicar gaire la tasca de penjar-ho i no haver de reduir gaire ni la imatge ni la qualitat, recomano que seguiu les següents indicacions:

Mida màxima del fitxer a penjar: 2 MB. Dimensions recomanades de la imatge:1000 × 288.Les imatges no poden ser més grans de 2 MB. Amplada recomanada: 1024px.

Les imatges s’han d’enviar al meu correu: jesus@institutcapmany.cat

Sant Jordi 2018. Agraïments, comentaris i altres coses.

Primer de tot, vull agrair la participació de tots aquells que han escrit un article per a aquest concurs; ja sé que hi ha una bonificació però el cas és que aquesta no és motivació suficient per tenir opinió pròpia i exposar-la públicament. Si no hi hagués una reflexió prèvia, per molts punts que us donés no sortiria res d’una certa qualitat.

Tanmateix vull agrair als membres voluntaris del jurat (Macario Bandrés, Estela Salvador, Mario Durán, Josep Presas, Jose Calaza i Lluís Nicolau) per l’esforç, no gratificat materialment, de llegir i valorar els treballs. El fet que hi hagi aquest tribunal dota d’una objectivitat als premis que jo sol no podria assolir mai. Gràcies, companys.

Ara m’agradaria comentar els articles premiats i opinar jo també una mica. Seguiré un ordre temàtic, ja que d’aquesta manera el comentari serà més coherent.

Començaré per l’article de la Laura sobre els límits del consumisme. Aquest tema me’l va suggerir un alumne, que després no ha participat al concurs, i el vaig incloure per què penso que hi hauríem de reflexionar més sovint: és paradoxal que anem a manifestacions, fem accions solidàries, participem de projectes a ONG’s o apadrinem un nen al tercer món i tot això amb un Iphone a la butxaca o unes sabatilles Nike o Adidas als peus. El paradoxal és que difícilment trobaríem una acció per millorar la justícia al planeta més senzilla que deixar de consumir determinades marques que no preserven el medi ambient, que produeixen sense respectar els drets laborals o, fins i tot, es nodreixen de l’explotació infantil, o, més greu encara, directament es beneficien de conflictes bèl·lics.

L’article de la Laura té la virtut de plantejar aquests temes no només com un al·legat, sinó fent una descripció de la vida quotidiana de qualsevol de nosaltres. Vull destacar també la qualitat literària de l’article: la correcció argumentativa no ens ha de fer oblidar que també cal que sigui agradable de llegir. Aquest article presenta uns arguments formalment correctes i, a més, la seva lectura produeix plaer.

Continuaré comentant els dos articles sobre la legitimitat de la desobediència civil.

Aquest tema me’l va proposar l’actualitat, de fet, estic per dir que me’l va imposar l’actualitat. Fa mesos que em ve a la memòria que quan jo estudiava batxillerat es va començar a discutir sobre si era convenient o no que Espanya entrés a formar part de l’OTAN, recordo que els meus professors van organitzar un debat públic on es van contrastar els arguments en un i altre sentit i, amb tota la normalitat del món, els alumnes vam tenir al nostre abast raons per poder prendre una decisió de forma autònoma al referèndum que es va convocar uns anys més tard.

Quan vaig plantejar els temes per a aquest concurs vaig pensar en la situació política actual i en l’autocensura que molts docents ens hem imposat a les aules per por de les famoses acusacions d’adoctrinament o ,senzillament, per no provocar malentesos o no discutir amb els nostres companys… que senzillament és impensable que s’organitzi un debat públic a l’Institut sobre la situació política actual, tot plegat em va portar a proposar aquest tema i, afortunadament, s’ha produït el debat.

La Oumaima ha defensat el dret a la desobediència civil. La seva exposició és correcta des d’un punt de vista formal i demostra una bona capacitat a l’anàlisi i la síntesi de les raons que la porten a la seva posició. Al final, seguint les argumentacions clàssiques del liberalisme, reforça la seva tesi apel·lant a l’existència de drets inalienables… Drets inalienables? Per què? Per la voluntat de Déu? Per una llei natural?

Aquesta possible apel·lació a una justificació metafísica es pot considerar el punt fluix de l’article de la Oumaima i és, precisament, el que considero més interessant de l’article del Luis: la llei és legitima per la voluntat dels ciutadans i, per tant, no es pot apel·lar a una instància superior a aquesta voluntat. Aquest article no té la correcció formal de l’anterior, és més dispers, però és més incisiu a l’hora de defensar la seva posició. També té la virtut d’examinar els possibles posicionaments abans de prendre partit.

La meva opinió, ara sí, és favorable a la desobediència civil. En la situació actual i sense sortir dels esquemes del liberalisme clàssic, hi ha, com a mínim els següents motius que legitimen la desobediència:

  • L’estat actual no és legítim pel que fa a la seva fundació: la Constitució de 1978 va ser aprovada en un clima d’amenaça militar, amb grups extremistes armats i actuant (ETA i GRAPO però també la Triple A o els Guerrilleros de Cristo Rey) i amb seriosos dubtes sobre la fiabilitat de les dades del cens electoral. És fàcil concloure que no es donaven les condicions òptimes per al consens i que, per tant, caldria dur a terme una revisió del text i sotmetre’l de nou a la seva aprovació.
  • L’estat actual és un dels estats europeus en els que els diferents partits polítics i altres estaments, que inclouen la família reial, acumulen més cassos de corrupció (més de 900) i, per tant, és legítim el dubte respecte a les intencions dels partits en el poder.
  • L’estat actual presenta símptomes d’una molt baixa qualitat pel que fa a la separació de poders, especialment pel que fa a la independència del poder judicial respecte a l’executiu, molt especialment pel que fa als membres dels tribunals més alts (suprem, constitucional…).

Així, segons els teòrics del liberalisme, aquests serien motius per la dissolució de l’estat i la seva refundació. En cas de no apartar-se del poder, es podria considerar que els poders executiu i legislatiu estarien incomplint el pacte de fundació i ens eximiria d’obediència.

He remarcat que aquest posicionament partiria dels supòsits de la teoria liberal pel senzill motiu que aquesta és la teoria bàsica que vertebra les diferents ideologies dels partits més conservadors de l’arc parlamentari. De fet, jo no comparteixo completament el plantejament liberal (és una teoria del segle XVII) i, òbviament, des de plantejaments més contemporanis la desobediència civil encara està més justificada… però aquest no era el tema del concurs i això sí que podria ser delicte.

Sant Jordi 2018, Accèssit: És legítim desobeir una llei injusta? Autoria: Luis A. Andaluz

El motivo de debate, el cual hoy nos trae aquí, no es otro que afirmar o negar la legitimidad en la desobediencia de una ley calificada como injusta. No nos precipitemos en la resolución de esta cuestión ya que de manera superficial podría parecer simple de ser respondida, es decir, en apariencia cualquiera podría decir si o no amparándose en la moralidad y/o en la concepción de justicia en la cual hayamos sido educados , que por otra parte es distinta en cada tipo de sociedad, cultura e individuo. Lo que quiero decir es que en el fondo de esta pregunta de lo que estamos hablando es si hay algo por encima de las leyes que nos permitan dictaminar si esta es justa o injusta, si existe una moralidad y/o razón  capaz de calificar objetivamente algo como justo o injusto, y en el caso de hallarse, si esta seria capaz de darnos la legitimidad necesaria para desobedecer la ley.

Encuentro  dos puntos claves en esta encrucijada, por una parte la existencia de la legitimidad   para   desobedecer  y  como segundo punto pero igual de importante, el como y por que le ponernos la etiqueta de justo o su contrario a algo. Es decir, realmente seriamos capaces de encontrar una definición dela idea de justicia, teniendo en cuenta que esta también sirva como algo por encima de la legalidad,  que sea totalmente objetiva y sin lugar a la duda, que no  nos lleve a un debate y compartamos dándola por verdad universal.

Siguiendo la estructura de la pregunta empecemos  por el primer concepto.  A  mi parecer la desobediencia civil si es legitima, ya que vivimos en una estructura social en la que los que tienen el poder  son los representantes previamente elegidos por el pueblo, y este ultimo es el que predomina en numero. Por lo tanto el gobierno ha de respetar los intereses de los civiles ya que es gracias a ellos que están donde están (intereses que hay que tener claro que no serán compartidos por todos pero, al menos habrían de ser los de la gran mayoría, que por otra parte como vemos hoy día parece ser que no se cumple y tan solo se tienen en cuenta los de aquellos capaces de comprar a los elegidos representantes, es decir una minoría influyente). Dicho esto, veo que la desobediencia es totalmente legitima, ya que si tu delegado pretende haceros llevar una indumentaria que a la clase no le convence, no acabarías por  desobedecer? Ya que el esta ahí por decisión vuestra y del mismo modo que se le ha dado el poder para representaros, se lo podéis quitar. Como observamos el delegado pretendía imponer sus intereses creando una regla que, pasado al tema referente de la pregunta correspondería una ley, y al no respetar vuestros intereses habrías desobedecido.

Pero como estoy diciendo son intereses y  en ningún momento hablamos de una moral que nos parezca justo o injusto. Y es que aquellos que se amparan en una falsa moralidad para desobedecer no son mas que hipócritas que no son capaces de asumir que lo que pretenden es defender sus intereses y lo ocultan detrás del concepto ‘’justo’’ como algo superior a ellos mismos y la ley.

Lo que nos lleva al siguiente punto. Podemos referirnos a justicia como las leyes que rigen una sociedad y por otra parte el concepto justo o injusto referido mas bien a una moral colectiva, que puede o no coincidir con la legalidad. Lo segundo acaba siendo una convicción social.

Desengañémonos, en ser verdad que algo puede ser justo de manera como pretenden aquellos que dicen de algo ser injusto, seria algo de lo que no podríamos debatir ya que daríamos, con lógica, como cierto, de la misma manera como  aceptamos que 1+1 da como resultado 2. Encontramos que este concepto no es absoluto y esta sujeto a interpretaciones personales dando como resultado un concepto relativo. Seria muy engañoso enmascarar la legitimidad de desobediencia a un concepto que nos pretenden pintar como absoluto y que acaba siendo una mera opinión personal. Si este fuera el caso, a  un personaje que le parezca injusto no poder matar lo acabaría   haciendo por desobedecer  lo que le  parece injusto.  Tal como he dicho a esa persona eso le parece injusto,  que no es lo mismo que eso sea injusto.  Como vemos no tenemos nada que nos permita dictaminar con lógica aque algo sea justo o no.

 Por lo tanto aquellos que aseguran que es legitimo desobedecer cuando la ley es injusta,  yo les respondería que no son mas que  hipócritas que intentan otorgar la legitimidad de desobediencia a un concepto por encima de la legalidad que para nada es racional, cuando en realidad no son capaces de aceptar que pretenden imponer sus intereses. Estos tanto da que beneficien el conjunto social o no, acaban siendo intereses. Así que no seamos como ellos y  aceptemos que la legitimidad de este acto recae en el caso que la ley no beneficia, respeta o agrede los intereses del conjunto social mayoritario.

Sant Jordi 2018, 1r premi: És legítim desobeir una llei injusta? Autoria: Oumaima Seddik

Per saber si la desobediéncia és o no legítima, hem de conèixer què és el que hem d’obeir, si es que realment hem d’obeir alguna cosa.

Obeim alló que comporta una instància superior a nosaltres. En una societat com la nostra, “democràtica”, l’única cosa que crec que pot trobar-se per sobre d’un individu (en termes no religiosos) és la llei. La llei recull tots els drets, deures i llibertats dels qui conviuen en una mateixa regió. Podem dir que es troba per sobre de l’ésser humà perquè es la única que dicta de manera clara i, per què no dir-ho, lògica, tot i que no necessàriament justa, el que es pot o no fer. Amb això, em sorgeix una nova pregunta:

Perquè no podem fer segons quines coses, si se suposa que som uns ésser lliures, i sobretot en democràcia? Doncs perquè afortunadament no vivim sols en el món. Hi ha d’altres individus que, al igual que nosaltres, precisen del respecte pels seus drets, que es troben per sobre de les nostres llibertats. És a dir, si volem ser lliures hem d’acceptar que no som els únics que ho volen, i que si la resta no té llibertats, tenint en compte que tots els éssers humans som iguals, nosaltres tampoc tenim dret a tenir-ne.

Amb això estem afirmant que la limitació de les nostres llibertats és beneficiosa per tothom, fins i tot per a nosaltres mateixos. Llavors, es pot considerar correcte que hi hagi una moral dictada que les limiti, però no de manera indefinida.

El més important a l’hora de promulgar una llei o de votar-hi a favor és que garantitzi la protecció dels nostres drets, com ara ho són les llibertats d’expressió, ideológiques, de protesta, etc. Amb això vull dir que hi ha drets que es troben per sobre de la llei. En el moment que aquesta atempti contra ells, la desobediència serà legítima.

Si observem els fets més destacats de la historia, ens trobem amb les revolucions, que són moviment en massa de desobediéncia civil. La gent que hi participà es manifestà en contra d’una legislació que consideraven injusta (i avui dia pocs en dirien el contrari). Per tant, gràcies a aquest moviment d’oposició a les normes avui vivim en millors condicions.

I si ens centrem en l’actualitat, també trobem actes de desobediéncia civil (o com a mínim és el que se’ns fa entendre), justament al nostre territori. Les accions dutes a terme pels grups independentistes mesos enrere constitueixen per alguns un atemptat contra la justícia (o més ben dit, la constitució, que podria debatir-se si es tracta o no del mateix concepte), l’única instància que determina el que està bé o malament.

Però per d’altres (i m’hi incloc) és totalment legítim saltar-se aquesta justícia si es considera injusta, per dues raons; la primera, potser més insignificant, és que s’ha d’acceptar que la nostra constitució no és perfecta, per les condicions en la que s’ha redactat (el règim de procedència dels seus redactors, per exemple, avui dia no es considera precisament just). La segona i última, però més important és, com hem dit abans, que la societat té un conjunt de drets inalienables, entre els que es comprèn el dret a decidir sobre el seu propi futur.