Concurs d’assaig. Art i mercat. Autoria: Groguenc.

Creo que la cuestión no es si una obra vale el dinero que valga, sino cómo se llega a ese precio. Teniendo en cuenta que hay obras de valor incalculable (literalmente, un ejemplo es “La Gioconda”), ya que no hay nada que tenga el mismo valor que la obra para comparar y poner un precio. Además, muchas obras son del Estado, (el “Guernica”, una vez fue recuperado por el Estado Español ya muerto Franco, no se ha movido del Reina Sofía) por lo tanto, éstas son igualmente de un valor incalculable, se han hecho reproducciones para exponerlas en otros lugares de España, pero nunca ha salido del museo.

Sabiendo esto, llego a la siguiente conclusión: una obra de arte equivale al nivel de riqueza de una entidad (el Estado, un museo, una persona…), pero a la vez, la obra tiene un valor estético, histórico, sentimental, o ideológico. Ahora, la pregunta es: ¿Quién querría pagar tanto dinero por una obra de otra persona, si no dirige un museo?

La respuesta es obvia, las personas con mucho dinero.

Ahora voy a hablar del rol del artista, el artista es una persona que utiliza su intelecto, creatividad, y técnica para crear una obra de arte donde se vean reflejados sus pensamientos. En este caso podríamos decir que una obra es como un billete de metro, personal e intransferible. ¿Por qué importarían a alguien los pensamientos de, en este caso, Goya, que murió hace 300 años?

Goya es uno de los artistas más destacados de España, y poseer un cuadro suyo es símbolo de riqueza, pero es su obra, sus pensamientos, y, en mi opinión, una persona que quiera aprovecharse de los pensamientos de otra persona para enaltecer la suya es un ladrón, y una mente simple que no sabe pensar por sí misma teniéndose que apoyar en el artista.

Si viviésemos en una utopía, todo el mundo viviría según su ideal, y los artistas no tendrían que rebajarse a tener que contentar a un público que se aprovecha de ellos. Pero la cruda realidad es que tienen que ganar dinero para vivir, y una vez más, la clase alta somete a los demás por el simple hecho de tener más dinero, y se aprovecha de su mayor capacidad intelectual.

Sant Jordi 2020: convocatòria i bases

Bon dia a tothom, ja ha arribat el moment de convocar un concurs d’articles d’opinió sobre una sèrie de temes. Jo proposo tres temes, si vols fer un article sobre un tema que no estigui aquí recollit, consulta-m’ho i en parlem:.

  • La cultura de l’esforç: valor o mite? Sovint sentim l’expressió “s’ha de recuperar la cultura de l’esforç” a l’àmbit educatiu en referència als alumnes. Està clar que esforçar-se és necessari per assolir un objectiu pel qual estem motivats, però valorar l’esforç com un valor per si mateix… no és una trampa metafísica? No hem invertit milers d’anys d’esforços científics i tecnològics per tal de no haver de fer esforços inútils?
  • Els mitjans de comunicació: informació o intoxicació? Segons l’Organització Mundial de la Salut (OMS), el còlera afecta entre tres i cinc milions de persones l’any i provoca entre 100.000 i 120.000 defuncions. Però tots els mitjans ens informen fins a l’esgotament sobre el Covid-19… Serà que el còlera no afecta de forma important a Europa?
  • Art i mercat: quan val una obra? demà, 5 de març, es subhastarà a Madrid un quadre atribuït a Goya amb una valoració d’entre 800.000 i 1000.000 €. Les seves mides són 28,8 cm. per 15,5 cm; per tant, el cm²  surt a 23.148,148€, aproximadament. Com ho veieu?

1- Pot participar qualsevol alumne de Batxillerat i de 4t d’ESO de l’Institut  Maria Aurèlia Capmany.

2- Per concursar cal presentar un article d’opinió escrit a doble espai, amb una extensió màxima de dues cares, en català o castellà. Els treballs s’han de lliurar a Jesús Gómez per mitjà del correu electrònic (jesus@institutcapmany.cat)

3- Els treballs s’han de signar amb nom i cognoms (que només coneixerà l’administrador del bloc) i seran publicats al bloc (sota pseudònim) tot identificant-los com a treballs de concurs.

4- La data límit per al lliurament dels treballs és divendres 27 de març de 2020L’administrador es reserva el dret de publicar o no qualsevol treball lliurat fora de termini.

5- Tots els alumnes podran puntuar tots els treballs presentats excepte el propi. Les puntuacions s’efectuaran com a comentaris als articles publicats i seran publicades anònimament. El jurat tindrà en compte les puntuacions dels alumnes.

6- El jurat valorarà la coherència, originalitat i correcció de les argumentacions, així com la riquesa lèxica i la correcció tant en la redacció com en l’ortografia. S’aplicaran els mateixos criteris de censura als treballs de concurs que a la resta d’articles i comentaris del bloc.

7- S’atorgarà un primer i un segon premi, el valor del qual serà idèntic a la resta de premis atorgats als diferents concursos literaris de la diada. El jurat es reserva el dret de declarar desert el premi.

8- Els premis es lliuraran al llarg de les celebracions de la diada de Sant Jordi.

Meta arte. Autor: Iván Otero.

En mi opinión, el único arte verdadero es el de cada artista para él sólo. ¿Por qué?

Si definimos el arte como un lenguaje mundial, singular, por lo tanto, personal, en el cual los artistas tienen la capacidad de  transmitir sentimientos propios y distintos de una manera clara a través de sus obras, ¿cómo puede ser arte la obra de una persona alejada de nuestro ser?

El concepto de individualidad ya se exploraba en las vanguardias, y estas significaron un punto y aparte entre la modernidad y la postmodernidad. ¿Cómo podría algo tan importante en la historia del arte no ser el concepto que más define a un artista? En la contemporaneidad, el mundo del arte está evolucionando hacia la conceptualización, ¿y de dónde proviene lo conceptual si no es del pensamiento propio?, contrario a lo que era el arte desde un punto de vista más clásico, donde se utilizaban alegorías, que provienen del pensamiento global.

Por lo tanto, ¿quién debería pagar algo por el pensamiento de otra persona, y además alardear de la posesión de su obra? Las personas simples, personas sin capacidad de pensamiento propio real que se escudan en imaginaciones ajenas. Pero la única manera de cultivar un lenguaje propio es a través del aprendizaje de los maestros artistas, por lo tanto, el cometido de un aspirante a artista es formarse aprendiendo de las eminencias de nuestra época y no de las del pasado, y éste debe cultivar este pensamiento y hacerlo evolucionar. Porque ya nada importa el pensamiento de alguien muerto más que el de formar a nuestros maestros.

En el fondo, el talento vive en todos los humanos y es indispensable para nuestra vida, y su función es tan simple como ser capaz de fijarse en el mundo que te rodea, adquirir la capacidad de hacer arte, no sólo arte pictórico, escultórico… sino cualquier tipo de expresión verdadera, ya que es una necesidad humana y lo único a lo que se le puede llamar “arte”.

¿Ser víctima de bullying es bueno? Autor: David Germán

Para empezar quiero decir que, como en todo artículo de opinión, el tema es subjetivo, y cada uno tiene su posición, y en temas como este, es todo muy debatible.

Para aclarar, en ningún momento voy a posicionarme a favor del bullying.

Ser víctima de bullying puede ser bueno, en la mayoría de casos, ya que te ayuda a ser más fuerte y crecer como persona al cabo del tiempo, pero no todo el mundo puede soportarlo. Cada persona tiene un nivel distinto de sensibilidad y resistencia, y a esto se le tiene que sumar el hecho de tener apoyo fuera de la situación de bullying, ya sea apoyo familiar, de amistades o bien profesional.

En mi caso, en 1º de la ESO, repetí curso debido al acoso constante, lleno de agresiones verbales y físicas, y sí que es cierto que lo pasé muy mal, pero eso me hizo aprender a valerme por mí mismo (ya que no tenía amigos), a tener una personalidad propia y fuerte (y no caer en las influencias de las acciones de los demás), y a saber valorarme un poco más.

Está claro que podría haber acabado todo en tragedia, por eso hay que tener muy claro que nunca hay que perder la esperanza, saber que no estás solo, y que todo mejora.

Se pasa muy mal, y por eso es importante tener a alguien, ya sea un amigo, un familiar o incluso una mascota, que aunque suene ridículo esto último, realmente funciona.

De verdad que todo mejora, y más en los días que corren. Hay muchas plataformas anti-bullying, y en muchos colegios empieza a haber tolerancia cero ante el acoso (aunque muchos otros hacen la vista gorda ante casos así), y hay muchísima más información y ayuda de la que había antes, e incluso hay leyes (que aunque a veces no se cumplan) que nos protegen, pero el punto de este artículo es demostrar mi opinión sobre que el bullying acaba siendo, a la larga, algo bueno para la víctima. El hecho de que te llamen gorda, o maricón o friki acaba causando muchísimo dolor, e incluso rechazo a la persona en sí misma, pero con algo de ayuda e información consigues transformar eso en algo positivo, y consigues por tanto hacer de ti una persona más carismática, valiente, fuerte y admirable, siempre que puedas y sepas manejar la carga emocional que el bullying supone.

Som esclaus de les nostre paraules. Autor: Jesús Gómez.

L’evolució de les espècies ha provocat que l’ésser humà estigui dotat de la capacitat de fer ús del llenguatge: tenim un aparell fonador capaç de generar un llenguatge articulat i una capacitat cerebral que ens permet pensar en el què direm. Malauradament, l’ús mecànic del llenguatge és més ràpid que la reflexió racional sobre el què direm i això provoca que sovint parlem o escrivim sense reflexionar suficientment sobre el sentit o el significat de les paraules que fem servir.

Quan parlem o escrivim, com tantes altres accions a les que ens hem acostumat des de la infància, no reflexionem de forma absolutament conscient sobre allò que direm sinó que utilitzem expressions que sovint hem automatitzat en funció de la nostra adaptació al medi social. Això és el que explica que, en funció de l’ambient en el que ens trobem, fem servir un registre o un altre.

D’altra banda l’evolució de la societat ens pressiona, de manera que tendim a fer servir un registre del qual foragitem termes que puguin resultar ofensius en funció de la nostra ideologia o de les nostres ganes d’adaptar-nos a la ideologia predominant: ja no diem “moro”, sinó “magrebí” de la mateixa manera que hem desterrat el “sudaca” en favor del “llatinoamericà”; tanmateix, “homosexual” ha substituït a “marieta” i anem incorporant totes les variants pel que fa a la sexualitat i al gènere en funció de l’evolució del nostre pensament pel que fa al reconeixement del dret a ser com a cadascú, i cadascuna, li plagui ésser… I aquesta evolució és bona, correcta i desitjable per què promou la igualtat, el respecte i la tolerància a la nostra societat.

Però… no sempre les convencions del nostre llenguatge segueixen el camí de l’apertura i la tolerància. Sovint les convencions responen a usos que reflecteixen el costat més obscurantista de la ment humana. Encara que estiguem al segle XXI i visquem a una societat presumptament aconfessional o, en tot cas, tolerant amb totes les confessions que s’hi practiquen, el nostre llenguatge continua sotmetent-se al catolicisme i parlem de les “vacances de Nadal” tot i que, en general, trobem improbable el naixement d’una criatura gestada a una dona verge per la intervenció d’un esperit sant, així com fem vacances de “Setmana santa” tot i que ens costa d’admetre la possibilitat de la resurrecció d’un cos mort de fa tres dies…

Bé, siguem raonables: el catolicisme, tot i que ha deixat de formar part del nostre món conceptual, continua formant part del nostre llenguatge de la mateixa manera que forma part del nostre sistema fiscal i és evident que el poder sempre va acompanyat d’una fiscalitat que el beneficia.

Però… aquesta setmana he trobat al nostre centre diverses expressions que m’han preocupat: dos dies consecutius, dues persones que treballen al centre han considerat oportú celebrar el seu aniversari convidant a la resta dels treballadors del centre a galetes i bombons… i, fins aquí, tot és joia i agraïment.

Però… el problema és el llenguatge: aquestes dues persones han considerat oportú referir-se a la seva data de naixement en funció del signe zodiacal corresponent.

On és el problema? És una qüestió de context: tothom és lliure de creure que la Terra és el centre de l’univers i que les constel·lacions que dominaven el zenit del cel en el moment del seu naixement marquen de forma indefugible tant el seu caràcter com el seu destí. Però, en el context d’un centre d’ensenyament, resulta que des del segle XVI admetem que la Terra no ocupa el centre de l’univers i que les constel·lacions que donen nom als signes del zodíac no existeixen com a tals sinó que són el resultat d’un efecte òptic.

I, de la mateixa manera que no admetem la teoria creacionista, ni donem crèdit a les teories que justifiquen la superioritat de la raça ària per sobre de les altres, ni admetem la superioritat de cap mena de l’home per sobre de la dona, ni defensem que una forma de viure la pròpia sexualitat sigui millor que una altra, ni que les diferenciacions lingüístiques de gènere hagin de reproduir una diferenciació entre les persones, a un centre d’ensenyament del segle XXI no creiem que la manera correcta de referir-se a la data de naixement hagi de fer servir una terminologia obsoleta des del segle XVI.

I els motius per a totes aquestes qüestions són sempre els mateixos: de la mateixa manera que honorem la memòria de les persones que van patir qualsevol mena de discriminació per la seva defensa de valors en contra del racisme o el masclisme, hem d’honorar els noms dels científics que van patir persecució o, fins i tot, van morir per defensar que el cel dels astròlegs no té cap sentit.

I així, de la mateixa manera que honorem a Martin Luther King i, per tant, no fem servir expressions racistes; hauríem d’honorar a Nicolau Copèrnic, Giordano Bruno, Miguel Servet, Tycho Brahe, Johannes Kepler o Galileu Galilei, que van ser perseguits per mostrar-nos les veritables lleis de l’astronomia, i hauríem d’evitar, a un centre d’ensenyament, utilitzar termes que impliquin l’acceptació d’una doctrina desfasada i que insulta la dignitat humana com és l’astrologia.

Com dèiem a l’inici: tenir la capacitat de fer servir el llenguatge no garanteix que aquest ús sigui correcte o acceptable. Hi ha persones que poden creure, i tenen dret, en l’astrologia de la mateixa manera que poden defensar el creacionisme o el racisme.

Senzillament demano que a l’institut no es faci servir una terminologia que, no només es fonamenta en teories desfasades, sinó que atempta contra la dignitat humana: és contradictori defensar la predeterminació astrològica i que la conducta humana tingui la seva arrel en la llibertat. Si neguem la llibertat, neguem tota possibilitat de dignitat en les nostres accions… i, això, és el contrari del que defensem al MAC.

Sobre els valors. Autor: Jesús Gómez

L’altre dia es va celebrar una reunió del claustre de professors en la qual la direcció ens va indicar la necessitat de ser més exigents en diferents aspectes de les normes del centre, concretament pel que fa a la neteja de les aules. Per emfatitzar aquesta necessitat, el cap d’estudis va remarcar que era la nostra obligació ja que una de les nostres tasques és la de transmetre valors. Jo vaig contestar, entre d’altres coses, que per transmetre valors cal tenir-los i que això era quelcom del que jo dubtava en base a l’escassa capacitat reivindicativa del professorat. El cap d’estudis em va mostrar el seu desacord pel que fa a la relació entre els dos fets. És per això que he pensat desenvolupar millor els meus arguments i publicar-ho aquí, ja que el tema té unes claríssimes connotacions filosòfiques.

Això dels valors és quelcom que m’afecta personalment, ja que crec que es tracta d’un terme que es fa servir massa a la lleugera i des de fa massa temps. El pitjor és que ja fa anys va passar a formar part del llenguatge propi del món educatiu i ningú no s’ha molestat a definir-ho amb un cert rigor ni, el que és pitjor, amb una perspectiva contemporània.

Comencem doncs: els valors, com a entitats en si mateixes (siguin absolutes o relatives) que serveixen per a guiar la nostra conducta… NO EXISTEIXEN. L’anterior era una definició d’arrel platònica, en la qual el cristianisme va fonamentar la seva lamentable moral que, per suposat, és obsoleta i està superada.

Des d’una perspectiva contemporània, podríem que això que anomenem valors són un conjunt de patrons de conducta, que són acceptats com a vàlids per determinats grups socials i en els que intentem educar a les noves generacions. Aquesta educació es produeix a dos nivells: un de conscient, a través de les normes que verbalitzem, i un de parcialment inconscient a través dels models que oferim. Remarco que quan jo ofereixo un model de conducta no en soc completament conscient de tota la informació que transmeto, la qual cosa provoca que sovint ofereixi models contradictoris: professors que parlen a classe sobre la necessitat de preservar el medi ambient i mai fan ús del transport públic o  que pronuncien abrandats discursos en favor de la igualtat de gènere però aplaudeixen amb entusiasme el brutal sexisme cosificant del reggaeton a les festes de l’institut; tot plegat posa de manifest que una cosa és el que diem i, una de molt diferent, el que fem i, no ens enganyem, l’important és allò que fem.

Les contradiccions són pròpies de la nostra espècie i tenen el seu origen en la falta de control conscient de tota la nostra conducta; sigui dit de pas, aquest problema justifica per si sol l’existència de la filosofia com a eina d’anàlisi que ens permet prendre consciència de les incoherències i, si pot ser, provocar la seva superació.

Per tant, transmetem models de conducta a molts nivells que no controlem.

Un dels valors més importants per a qualsevol persona és la seva consciència de classe: som treballadors, no membres d’una associació benèfica, i les nostres conductes tenen una naturalesa laboral: cobrem un sou i, a canvi, fem uns horaris regulats per uns convenis. En aquest sentit, el model de conducta que transmetem (allò que en dèiem valors) és també un model de conducta laboral i, la conducta laboral, no només té a veure amb ser millor o pitjor professionals, també té a veure amb el tipus de relació que establim amb els que ens manen. Aquí era on jo volia anar a parar: si ens comportem de forma submisa, un dels valors que estem transmetent és el de la submissió. Si no efectuem accions reivindicatives cada cop que la patronal ens maltracta (i això passa cada cop que, per desídia del departament, no funciona la Wi-fi, que no funciona l’Esfera, que no se’ns restitueixen els drets que vam perdre amb les retallades…) estem transmetent als nostres alumnes que, si el patró fa malament la seva feina, el correcte és que el servidor hagi de fer més feina (no remunerada) per tal de salvar el cul al patró. Estem educant als nostres alumnes en el valor del submís, del  dòcil, del mesell… i ja havíem quedat que la moral cristiana havia de ser superada.

Si tenim en compte la situació socioeconòmica de la majoria dels nostres alumnes, transmetre aquests valors és moralment incorrecte ja que els desarma davant la injustícia política, social o familiar.

De vegades hi ha companys que em diuen que tinc raó, que ells pensen com jo; si tinc humor els contesto que el que val no és com es pensa sinó com s’actua. D’altres pensen que aquestes afirmacions les faig amb intenció humorística i ho troben divertit; és veritat que molt sovint utilitzo l’humor com a mitjà d’expressió però això no vol dir que el que dic no sigui seriós i que només riure, però no actuar, no sigui trist. Per tal de no generar aquesta trista confusió, no he fet cap ús de la ironia en aquest article.

Espero que aquest article desperti interès per obrir un debat sobre el tema. Podeu deixar aquí mateix els vostres comentaris i els publicaré amb gran plaer.

La belleza. Autora: Gabriela Patrascu.

Una parte imprescindible de la humanidad son los prejuicios y hoy en día, los intentos de luchar contra ellos.
Me gustaría hablar de los prejuicios que tenemos sobre las características físicas de las personas y en especial, las ideas sobre la belleza actual.

Diría que la belleza es un tipo de arte, pero un arte difícilmente entendido por muchos de nosotros. La belleza de los movimientos, la manera de hablar, la risa y las sonrisas, la belleza de las imperfecciones, de los chistes malos y las historias  de la infancia, un tipo de mirada especial que hace que sientas afección o atracción por la persona.
Evidentemente no niego la existencia de una belleza física, la estética del cuerpo y los rastros de la cara, también la importancia de cuidarse, pero aun así, repetiré la famosa idea sobre la belleza espiritual, que no debe ser despreciada. Ya que no apreciamos las personas por la forma de sus labios, la longitud del pelo o el peso que tienen. Normalmente sentimos aprecio por el cariño que provoca las sonrisas compartidas, los abrazos y los recuerdos.
De eso ya se ha hablado mucho y se sigue hablando continuamente hoy en día. Pero creo que hay un problema, que es la nuestra actitud cara a la belleza y a la fealdad. Si el término belleza lo tenemos más o menos claro, hablando de la fealdad acabamos algo perdidos. Todo lo desconocido, lo que no entendemos y lo que a lo mejor nos parece inmoral o estéticamente nuevo, suele acabar siendo considerado asqueroso o feo. Pero los que no pertenecen a los cánones de belleza actual o simplemente no son considerados bellos, muchas veces no han tenido la posibilidad de escoger su físico. Pues porque pensamos que tenemos el derecho de juzgar a aquellos que ni siquiera han tenido elección. Pero supongamos que algunos cambian su imagen a propósito y escogen ser diferentes, pues porque podemos nosotros criticar a los que no tienen miedo a ser ellos mismos.
Los “feos”, los “frikis” de hoy en día no son escuchados, no se les hace caso. ¿Es eso correcto? Creo que muchos de nosotros se olvidaron de una libertad de debemos tener. La libertad de ser nosotros mismos.

La cabana de l’oncle MAC. Autor: Jesús Gómez

L’oncle MAC era una vella fotocopiadora instal·lada al passadís on es trobaven els despatxos dels departaments didàctics d’un ignot centre de secundària.

MAC era una bona fotocopiadora: dia rere dia reproduïa exercicis, exàmens i material didàctic de tota mena sense confondre les cares del document i era capaç de llegir un document i enviar-ne una còpia en PDF a tots els alumnes sense trabucar les adreces electròniques. Certament tenia les seves limitacions: no era capaç de canviar-se tot sol el tòner ni de carregar-se de paper. Però, en justícia, hem de dir que la majoria dels problemes que se li podien atribuir eren causats per la imperícia digital dels seus usuaris.

El seu tarannà era el d’una màquina tranquil·la però no per això passiva. Com que era observador i reflexiu, a les llargues hores d’inactivitat de les que gaudia, analitzava els fets que es produïen al llarg de la seva jornada laboral i n’extreia conclusions sobre la condició humana en general i els seus usuaris en particular. El seu bonhomiós caràcter li havia portat a establir una bona relació amb el jove tècnic que habitualment li feia les revisions periòdiques.

El jove operari, jove però no mancat d’enginy, havia copsat a la primera revisió que aquella màquina era un pou de saviesa i, àvid d’aquesta saviesa, mantenia llargues converses amb l’oncle MAC sobre la condició dels seus usuaris, un cop li havia canviat el tòner, li havia greixat els engranatges o li havia fet un massatge relaxant als lectors òptics. Vet aquí la més notable d’aquestes converses:

-Diguem, Oncle MAC, com definiries de forma sintètica la naturalesa dels usuaris que en fan ús de les teves capacitats reprogràfiques?

-T’he de dir, jove tècnic, que el primer que em cridà l’atenció d’aquests humans és la seva religiositat, si és que no hem de parlar de conductes clarament supersticioses…

-Però, què dius, oncle MAC? Potser ignores que treballes a un centre educatiu i que, en conseqüència, la ciència i la raó són les úniques guies de la conducta dels teus usuaris?

-Jo també ho pensava al principi, jove operari. Però quan no reprodueixo el que volen (pel senzill motiu que no m’ho han indicat correctament), m’atribueixen sovint una mala voluntat que és clarament contradictòria amb la meva mecànica condició i que posa de manifest un pensament màgic carregat de superstició… Però no és això el pitjor: he observat que, després d’uns rituals (als que anomenen “reunions”) manifesten sovint que no saben per a què servia la reunió i, en el paroxisme de la manca de lògica, sovint es mostren preocupats per unes xifres a les que anomenen “indicadors” i “competències”, de les quals manifesten desconeixer el seu origen i la manera en que s’han fet els càlculs per arribar a aquestes xifres màgiques…

-Però, oncle MAC, per què penses que es tracta d’una conducta religiosa?

-Oblides, jove mecànic, que la religió és caracteritza per la fe? I, què és la fe sinó la confiança en allò que no podem comprendre? Si realitzen rituals dels que ignoren la utilitat i guien la seva conducta per xifres màgiques que els han estat revelades per éssers superiors, però a les que ells per si sols, amb les seves facultats naturals, no hi saben arribar… no veus, jove i hàbil subaltern, que es tracta de sacerdots d’uns rituals mistèrics que els no iniciats no podem comprendre?

-Bé, oncle MAC, no t’excitis que després gastes més tòner del necessari… A part d’aquesta religiositat que els atribueixes, quina altra característica destacaries dels teus usuaris?

-Escolta’m bé, jove que tan hàbilment em lubriques i recargoles les peces més íntimes, el que et diré ara no s’explica si no és per la religiositat a la que em referia anteriorment. Aquests sacerdots són extraordinàriament submisos: accepten totes les disposicions dels seus càrrecs més alts sense protestar. Tan és que es tracti de decisions dels alts sacerdots que tenen al mateix temple (als que anomenen “direcció”), com si es tracta de les imposicions de les més altes instàncies (ells hi diuen “inspecció” o “departament”); tant és que els facin treballar més hores de les estipulades o que els rebaixin el sou: rondinen davant meu, es queixen a les seves cel·les (ells en diuen “departaments”), però no es manifesten ni als rituals interns (“reunions”) ni quan són convocats a queixes més generals (en diuen “vagues”) hi acudeixen per donar-ne suport; fins i tot n’hi ha que venen a treballar estant malalts, tot i tenir dret a uns rituals curatius anomenats “baixes”…. Alguns d’ells addueixen que la seva situació laboral no és prou estable i que tenen por de les represàlies de les altes instàncies, però molts tenen una cel·la pròpia dins del convent i, malgrat que ningú els pot arrabassar, mai han secundat una queixa.

-Però, oncle MAC, aquests sacerdots, com tu els hi dius, treballen a un barri força oprimit per les desigualtats econòmiques i socials. Si la seva conducta és tan submisa, hom podria pensar que estan contribuint a educar als seus alumnes en un conformisme que només els pot ser perjudicial. Seria molt greu que afirmessis, oncle MAC, que els sacerdots d’aquesta congregació treballen contra els interessos dels seus fidels. És com si em diguessis que treballen, no per educar als seus alumnes, sinó per fer que aquests esdevinguin treballadors submisos que no causin cap mena de problema al sistema…

-No t’excitis, jove de dits forts i rugosos que tan bon punt em calibren harmònicament les peces com em porten a un dolor que no sempre és desagradable, la naturalesa dels sacerdots no és maligna sinó inconscient, ja que, en el curs dels rituals als que han estat sotmesos, han perdut la consciència de classe, ja que han acabat creient que les xifres màgiques són més importants que l’educació dels seus fidels. Els seus alumnes aprenen a ser mesells i submisos de ben joves, però els sacerdots creuen que aquesta és la conducta correcta: com que no creuen que la societat es pugui millorar (no oblidis la seva naturalesa religiosa i, per tant, fatalista), pensen, de bona fe, que el millor és l’adaptació i obliden, alhora, les lliçons de la vostra Història..

-I, quines són aquestes lliçons, savi oncle MAC?

-És molt senzill, jove operari que tan bé saps com satisfer les meves mecàniques necessitats, la Història ens ha ensenyat que, si no us haguéssiu revoltat sovint, encara estaríeu arrossegant pedres per fer piràmides, temples, catedrals o qualsevol altre antre de superxeria, que no tindríeu drets laborals, que serieu segregats pel vostre gènere o pel color de la vostra pell i que seríeu esclaus de la voluntat dels nostres amos.

-Aleshores, oncle MAC, no hem de fer cas dels nostres professors?

-No siguis radical, jove que va fer un PCI per què era massa mandrós per treure’s l’ESO com Déu mana! Hem d’aprendre a triar els bens intel·lectuals que ens ofereix la naturalesa dels nostres sacerdots: podem acceptar totes les fruites que deriven de l’arbre de la seva ciència, ja que han estudiat al llarg de molts anys i són savis en les seves matèries, però hem de rebutjar el seu exemple personal, ja que no els porta a la millora de la seva condició sinó a la submissió i la humiliació de classe.

-Bé, oncle MAC, espero haver assimilat suficientment les teves lliçons: he d’aprendre del saber dels meus professors, però no els he de considerar com a model de conducta ja que han perdut la consciència de classe.

-Veig que ho has entès. Ara acosta’t de nou, jove treballador, que les meves velles peces necessiten que algú les acaroni amb l’energia de la joventut. T’he explicat com es canvia el tòner seguint el ritual tàntric?