Una comèdia sobre alienígenes
[youtube]https://www.youtube.com/watch?v=ei3smeqNoFo[/youtube]
El grup Balañà aposta moltes vegades a la seva sala del teatre Borràs per comèdies hilarants. Aquesta temporada aposta per un dramaturg nou, Fernando Trías de Bes que es presenta una història extraordinària: El tràmit. Fernando Trias de Bes és un conegut novel·lista amb títols com Tinta, La història que me escribe o Palabras bajo el mar, El coleccionista de sonidos o Relatos absurdos. Ara ens sorprèn amb El Tràmit, una comèdia marciana.
L’autor, economista, ens sedueix amb el seu plantejament dramatúrgic i el fons seriós que s’amaga darrere d’aquesta comèdia: la reflexió sobre els diners, les partides de fons reservats, la transparència democràtica de les estructures de l’estat. Corrupció i el quart mil·lenni es donen la mà a El Tràmit un comèdia sobre un sonat o un extraterrestre?
La comèdia parteix de la pregunta que es fa la humanitat des de fa molts anys: hi ha més vida intel·ligent a l’univers? Tres científics van a unes instal·lacions secretes de la unitat d’intel·ligència de l’estat amb l’objectiu de determinar si és o no és un alienígena un individu que es fa passar per extraterrestre en aquest cas Saturnino interpretat per David Bagés. Un home el cos del qual ha estat posseït per un alienígena que té la facultat de saber tot el que ha passat a la vida de l’ésser que toca o posseeix.
El cinema i la televisió ens han donat una gran galeria d’extraterrestres: marcians de Mars Attacks, Paul, Alf, Spock, Chewbacca, Yoda, Alien, els critters, humanoide, la cosa, Kan, Kodos, Avatar, Lila de futurama o Superman. Saturnino se suma a la nòmina. En aquesta comèdia marciana tres vells amics tenen un objectiu comú: els diners. El professor Ribes (Xavier Serrano), el doctor Sancho (Àlex Casanovas) i la doctora Sala (Mònica Glaenzel) realitzaran un treball encarregat per Susqueda (Manel Mas) i per Paquita (Susana Garachana). Tots ells són els personatges d’una comèdia marciana plena de sarcasme i humor negre amb un rerefons social. Dirigida per Martí Torra gradua el temps en què els espectadors van descobrint que res és el que sembla. L’escenografia ajuda a situar l’espectador en un espai dominat per les tecnologies amb una porta intel·ligent.
El dramaturg sembla dir-nos que tot, en la societat actual, se sustenta en la corrupció sistèmica. Els diners ens fan superar les pors a allò desconegut, es barreja el terror, la fugida de l’exploració de la realitat personal, ciència ficció, suspens i comèdia. Saturnino és un provocador que emet uns sorollets molt curiosos, sinistres, pertorbadors i grotescos. Saturnino es deixa peritar amb entusiasme. Sens dubte meritori el treball de David Bagés en aquest vampir del coneixement aliè. Una barreja entre ET, Alien i Matrix. Els elements esperpèntics de la comèdia ens recorda cap al final de la peça a Dario Fo i les seves comèdies de denúncia.
El Tràmit és un debut càusticament inventiu d’hora i mitja de rialles. Sens dubte com està el pati, els riures són altament recomanables.
- A. Aguado
Miquel Gorriz
Santiago Moncada (1927), el autor de Violines y trompetas, la estrenó en el teatro Infanta Isabel de Madrid en 1977. En su primera interpretación los actores fueron: Jesús Puente, Juanjo Menéndez, Pilar Bardem y Violeta Cela. Tuvo un gran éxito y se representó de forma ininterrumpida y simultánea, en Madrid y Barcelona, durante cuatro años. La obra nos plantea un trío amoroso tratado con una elegancia y “savoir faire” impropios de una época de transición democrática; unos personajes, próximos pero extraños, delirantes, (son músicos, artistas) que rompen el esquema burgués de los condicionamientos sociales. Es una amistad sincera entre dos hombres, parecida a la unión entre el tonto y el listo del circo, que perdura a pesar de las trastadas que se dan mutuamente, mantenida a base de una comprensión absoluta. Es más difícil encontrar una amistad absolutamente sincera que un amor. En mi obra no hay implicaciones políticas ni sociales, es más de estudio sicológico y de caracteres, que pueden interesar a un público, apoyándome en los sentimientos. La obra tuvo su adaptación al cine de la mano de Rafael Romero y la interpretaron: Jesús Puente, José Luis López Vázquez, Yolanda Farr y Sonia Martínez.
En Barcelona los papeles masculinos principales estuvieron a cargo de Paco Morán y de Fernando Guillén en el desaparecido Teatro Talía del Paralelo. Treinta y cinco años después y en homenaje a Paco Morán la obra se vuelve a representar en el teatro Borrás con dirección de Miquel Gorriz (Terrassa 1963) y el reparto Joan Pera, Lloll Bertran, Ferran Rañé y Anna Gras.
Se trata de una comedia que trata sobre el valor de la amistad entre dos hombres, por encima de todo, de las mujeres, de aventuras sexuales e infidelidades. Está servida con gotas de erotismo y cinismo, ingeniosa frescura y soltura en los diálogos, con un humor desbordante, que se mantiene durante toda la obra. La dirección de Miquel Gorriz hace que no se note el paso del tiempo, junto con el trabajo de cuatro actores acostumbrados a la comedia ligera.
Cuando se estrenó “Violines y trompetas” pretendía divertir al espectador, ese objetivo sigue cumpliéndolo la obra, ha perdido el carácter de cosa nueva o escandalosa, para conservar la esencia del teatro. El teatro es diversión. El espectador pide reírse, despreocuparse de los problemas de la economía y los recortes económicos en sanidad, cultura, educación, etc…etc.
Miquel Górriz sabe mucho de música, aunque esto no es una ópera, los violines hacen alusión al cuerpo de la mujer y las trompetas tiene que ver más con la condición masculina, el cuarteto suena bien en manos de su director.
J. A. Aguado
De los guionistas de “7 vidas” y “Aída”
Uno de los primeros teatros en abrir puertas en Barcelona ha sido el Teatro del Grupo Balaña Borrás con una comedia que viene de Madrid: “La vida resuelta”. Un retrato de una generación de treinta y tantos años, un grupo de personas que han llegado a un punto en su vida en la que no terminan de estar satisfechos consigo mismos y mucho menos ser felices. Cada uno de ellos, a su manera, han buscado el éxito, pero la frustración preside el salón de sus casas. Todos se encuentran en una guardería de mucho prestigio para conseguir la única plaza libre que queda para sus respectivos hijos. Lo de menos es quien lo consiga, objetivo que parecía al principio de la obra mover las acciones de la comedia, pero poco a poco se van presentando los personajes, verdaderos protagonista de lo que se quiere contar.
La obra ha sido escrita por Marta Sánchez y David S. Olivas, dos dramaturgos que vienen de escribir guiones para comedias de éxito de la tele. Los dos han escrito esta pieza como quien se saca una foto, sin respirar, sin pararse a tomar aliento. Buscando la risa desde el primer segundo.
“La vida resuelta” que podría parecer al inicio que se trata de una competición por conseguir en puesto en una guardería se convierte en la exploración a fondo de la ternura y crueldad de unos personajes superficiales. Personajes que son como un agujero negro que atrapa, aspira al espectador. Adriana Torrebejano, que hemos visto en “Tierra de lobos” y “Hospital Central” interpreta a una joven llamada Lluvia un personaje que provoca la risa y la ternura a un tiempo. La superficialidad de Lluvia es una de las fuentes de malos entendidos que hacen que el público conecte, y cierra de forma agridulce la comedia. A Carlos Santos lo descubrimos en “Los hombres de Paco”, interpreta al periodista en paro que vive de su mujer y que monta toda su vida en una novela que está escribiendo y que nunca escribe, por medio hay una infidelidad que parece que le costará cara. Berta Hernández que hemos visto en “Tierra de Lobos” interpreta a Laura una ejecutiva dominante que nunca está en casa y que deja la educación de su hijo a su marido. Javier Mora a quien hemos visto en una multitud de series desde “Hospital Central” a “Aquí no hay quien viva” pasando por “El síndrome de Ulises” es el típico madurito que se conserva muy bien y que está enganchado de su ex y vive con una jovencita, la diferencia de años y la obsesión con su ex generan todo tipo de situaciones cómicas. Para hacer la vida imposible al pobre Luis, Carlos Santos, aparece Raquel embarazada, Cristina Alcaraz a quien habíamos descubierto en “Física y Química” o “Los Serrano”.
“La vida resuelta” es un ejemplo de cómo los actores de televisión pueden pisar los escenarios teatrales para hacer disfrutar a los espectadores con una comedia de resultado imprevisible. Una exhibición de cómo debemos buscar el lado bueno de la vida.
J. A. Aguado
La pareja o la ampliación del campo de batalla
Las relaciones hombre “versus” mujer se convierten en ocasione sen un cuento moral, moderno y cruel. Cada palabra parece ampliada con lupa. Hay detalles de las relaciones de pareja que dejan sin aliento, de una exactitud increíble. En ocasione una pieza teatral nos informa mejor sobre nuestros hábitos que muchos artículos periodístico de fondo y tesis universitarias. El actor y director teatral Paco Mir vuelve a dirigir una comedia tras cosechar éxitos de taquilla y crítica con montajes como “Pel davant i pel darrera”, “Políticament incorrecte” o “El sopar dels idiotes”. Ahora nos presenta “Vides privades”, una de esas sátira de las relaciones de pareja del dramaturgo anglosajón Noël Coward (1889-1973) que ponen sobre la mesas muchos de los complicados entramados sentimentales del alma humana. En su época fue calificada de inmoral y sus presentaciones estuvieron marcadas por el escándalo; hoy los tiempos han cambiado tanto que resulta una comedia ligera. El elenco catalán escogido por Paco Mir para esta nueva adaptación está integrado por Francesc Albiol (interpretación maravillosamente divertida y sutil), Lluïsa Mallol (en un personaje conmovedor), Pep Ferrer y Mireia Aixalà dan la réplica a la pareja frívola, inteligente y entretenida. La peripecia nos habla de una pareja de divorciados que coinciden con sus nuevos cónyuges en un mismo hotel de la costa francesa durante sus respectivas lunas de miel, que se convertirán en lunas de hiel.
¿Qué sucede cuando uno de los más imprevisibles e ingeniosos directores contemporáneos vuelve a tomar a una autor clásico de la comedia? La química obra su efecto y se encuentran en un proceso de versatilidad. El espectáculo está lleno de frivolidad, sátira e ingenio. Cuando era un niño, le preguntaron a Neël Coward qué quería ser cuando creciera. Se metió las manos en los bolsillos de sus pantalones cortos y contestó: “un éxito”. Ese es el tipo de historias divertidas que se esperan oír de un autor de comedias, de un director de comedias. Entre las décadas de los años veinte y los cincuenta, el inglés Noël Coward tuvo el estruendoso éxito que intuyó para sí mismo en su infancia: dramaturgo, actor, compositor, cantor, hombre de cine, novelista, cuentista, showman y hasta espía para su país durante la segunda Guerra Mundial. Pero nadie como Noël Coward ha saboreado tantas resurrecciones, tanto en vida como después de su muerte. La de este otoño en el teatro Borràs nos aporta una visión irónica, despiadada y compasiva a un tiempo, resplandeciente y con tantas facetas como un diamante, de los usos y costumbres sociales, sexuales, verbales y amorosos de dos parejas encantadoras. Y para que todo resulte con una elegante precisión, Paco Mir ha optado en su versión por mantener la ambientación original de la comedia, los años treinta. Dos son los escenarios donde transcurre la acción: el balcón de un hotel y un apartamento en París con piano incluido. No es fácil, en ocasiones, para el espectador entender las ironías de Noël Coward, porque se pierde el contexto sociocultural, para eso, necesitaría conocer sus obras, oír sus discos y, claro, saber situarlo en el espíritu de una época. Pero Paco Mir con su fascinante versatilidad nos ofrece una adaptación modelo de elegancia y precisión, y utiliza su habilidad para seducir y entretener al espectador como vehículo de complejas y resonantes ideas sobre la pareja.
J. A. Aguado
Dels guionistes de “7 vides” i “Aída”
Un dels primers teatres a obrir portes a Barcelona ha estat el Teatre Borràs, del Grup Balaña, amb una comèdia sobre el matrimoni i els fills: “La vida resuelta”. Un retrat d’una generació de trenta i tants anys, un grup de persones que han arribat a un punt en la seva vida en què no acaben d’estar satisfets amb ells mateixos i molt menys ser feliços després de tenir un fill. Cadascun d’ells, a la seva manera, han buscat l’èxit i la paternitat, però la frustració presideix el saló de casa seva i de les seves relacions emocionals. Tots es troben en una guarderia de molt prestigi per aconseguir l’única plaça lliure que queda per als seus respectius fills. El de menys és qui ho aconsegueixi, objectiu que semblava al principi de l’obra aconsegir la plaça desigada, es torna un element secundari de l´acció de la comèdia. Poc a poc es van presentant els personatges, veritables protagonista del que es vol explicar.
L’obra ha estat escrita per Marta Sánchez i David S. Olives, dos dramaturgs que vénen d’escriure guions per a comèdies d’èxit de la tele: “7 vidas” i “Aída”. Tots dos han escrit aquesta peça com qui es treu una foto, sense respirar, sense parar-se a prendre alè sobre la paternitat. Buscant el riure des del primer segon.
“La vida resuelta” que podria semblar a l’inici que es tracta d’una competició per aconseguir en posat en una guarderia es converteix en l’exploració a fons de la tendresa i crueltat d’uns personatges divertits. Personatges que són com un forat negre que atrapa, aspira a l’espectador. Adriana Torrebejano, que hem vist en “Terra de llops” i “Hospital Central”, interpreta una jove anomenada “Lluvia” un personatge que provoca el riure i la tendresa alhora. La superficialitat de Lluvia, el simplícimus de les comèdies clásicas, és una de les fonts de malentesos que fan que el públic connecti, i tanca de forma agredolça la comèdia. A Carlos Santos el vam descobrir a “Los hombres de Paco”, interpreta el periodista a l’atur que viu de la seva dona i que munta tota la seva vida en una novel·la que està escrivint i que mai escriu, per mig hi ha una infidelitat que sembla que li costarà cara. Berta Hernández que hem vist en “Terra de Lobos” interpreta Laura una executiva dominant que mai està a casa i que deixa l’educació del seu fill al seu marit. Javier Mora a qui hem vist en una multitud de sèries des de “Hospital Central” a “Aquí no hay quien viva” passant per “La síndrome de Ulises” és el típic maduret que es conserva molt bé i que està enganxat del seu ex i per companya sentimental una joveneta, la diferència d’anys i l’obsessió amb la seva ex generen tot tipus de situacions còmiques. Per fer la vida impossible al pobre Luis, Carlos Santos, apareix Raquel embarassada, Cristina Alcaraz a qui havíem descobert a “Física i Química” o “Los Serrano”.
“La vida resolta” és un exemple de com els actors de televisió poden trepitjar els escenaris teatrals per fer gaudir als espectadors amb una comèdia de resultat imprevisible. Una exhibició de com hem de buscar el costat bo de la vida, el matrimoni, la paternitat i l´amor.
J. A. Aguado
Dels guionistes de “7 vides” i “Aída”
Un dels primers teatres a obrir portes a Barcelona ha estat el Teatre Borràs, del Grup Balaña, amb una comèdia sobre el matrimoni i els fills: “La vida resuelta”. Un retrat d’una generació de trenta i tants anys, un grup de persones que han arribat a un punt en la seva vida en què no acaben d’estar satisfets amb ells mateixos i molt menys ser feliços després de tenir un fill. Cadascun d’ells, a la seva manera, han buscat l’èxit i la paternitat, però la frustració presideix el saló de casa seva i de les seves relacions emocionals. Tots es troben en una guarderia de molt prestigi per aconseguir l’única plaça lliure que queda per als seus respectius fills. El de menys és qui ho aconsegueixi, objectiu que semblava al principi de l’obra el més important, però que es va tornant en un element secundari de l´acció en el transcurs de la comèdia. Poc a poc es van presentant els personatges, veritables protagonista del que es vol explicar.
L’obra ha estat escrita per Marta Sánchez i David S. Olives, dos dramaturgs que vénen d’escriure guions per a comèdies d’èxit de la tele: “7 vidas” i “Aída”. Tots dos han escrit aquesta peça com qui es treu una foto, sense respirar, sense parar-se a prendre alè sobre la paternitat. Buscant el riure des del primer segon.
“La vida resuelta” que podria semblar a l’inici que es tracta d’una competició per aconseguir una plaça en una guarderia es converteix en l’exploració a fons de la tendresa i crueltat d’uns personatges divertits. Personatges que són com un forat negre que atrapa, aspira a l’espectador. Adriana Torrebejano, que hem vist en “Tierra de lobos” i “Hospital Central”, interpreta una jove anomenada “Lluvia” un personatge que provoca el riure i la tendresa alhora. La superficialitat de Lluvia, el simplícimus de les comèdies clàssiques, és una de les fonts de malentesos que fan que el públic connecti, i tanca de forma agredolça la comèdia. A Carlos Santos el vam descobrir a “Los hombres de Paco”, interpreta el periodista a l’atur que viu de la seva dona i que munta tota la seva vida en una novel·la que està escrivint i que mai escriu, pel mig hi ha una infidelitat que sembla que li costarà cara. Berta Hernández que hem vist en “Tierra de Lobos” interpreta Laura una executiva dominant que mai està a casa i que deixa l’educació del seu fill al seu marit. Javier Mora a qui hem vist en una multitud de sèries des de “Hospital Central” a “Aquí no hay quien viva” passant per “La síndrome de Ulises” és el típic maduret que es conserva molt bé i que està enganxat de la seva ex i per companya sentimental una joveneta, la diferència d’anys i l’obsessió amb la seva ex generen tot tipus de situacions còmiques. Per fer la vida impossible al pobre Luis, Carlos Santos, apareix Raquel embarassada, Cristina Alcaraz a qui havíem descobert a “Física i Química” o “Los Serrano”.
“La vida resolta” és un exemple de com els actors de televisió poden trepitjar els escenaris teatrals per fer gaudir als espectadors amb una comèdia de resultat imprevisible. Una exhibició de com hem de buscar el costat bo de la vida, el matrimoni, la paternitat i l´amor.
La professora i l’alumne
El Teatre Borràs acull-del 4 de juny al 31 de juliol-“Madame Melville”, del dramaturg nord-americà Richard Nelson (Chicago, 1950) que va veure la llum el 2002. El polifacètic Àngel Llàcer es fa càrrec de la direcció d’aquest muntatge, protagonitzat per Clara Segura, Carlos Cuevas i Montse Vellvehí. Cap amant ha pensat en la seva estimada amb tanta tendresa com ho fa Carles Cuvas, que ha deixat molt enrera el Personatge de Biel, el nen de la sèrie de TV3 “Ventdeplà”, per ficar-se en la pell d’un adolescent, Carl, que s’enamora de la seva professora. L’obra trenca amb la moral i planteja un amor impossible, una relació basada en “l’amour fou”.
L’espectador a ritme de comèdia i de música adequades per a cada situació es troba amb una dona de quaranta i un adolescent de quinze anys que viuen 24 hores fora de tota lògica establerta per les lleis de la família, fora del control del seus pares. La tragicomèdia es presta a diferents interpretacions depenent del punt de vista: el de la professora, el de l’adolescent, el de la veïna violinista, el del pare de l’adolescent, el de la mare de l’adolescent i el del propi espectador.
La descripció d’un quadre on una dona en una cambra de bany recolza la cama dreta sobre un tamboret amb una banyera al fons serveix com a punt de reflexió sobre els prismes de la realitat, veritable objectiu de la peça. L’obra no és en absolut pornogràfica. És un divertidíssim esperpent en el sentit vallinclanesc del terme.
L’obra se situa a París l’any 1966, amb el teló de fons d’una societat prèvia al maig del 68 en la qual l’educació i les relacions amb l’art busquen l’experimentació d’un canvi. En aquest context, una relació d’amor entre una professora i el seu alumne, despulla emocionalment a dos personatges que, en un moment donat de les seves vides es necessiten. Ella, a punt de complir quaranta anys, necessita l’energia perduda que encara predomina en el noi. El noi innocent i ingenu, en alguns temes, necessita l’experiència de la seva professora i el seu coratge. Una relació d’amor que no pot arribar a bon port de cap de les maneres, però que els farà sentir-se vius. Dos personatges que comparteixen les seves il·lusions, les seves pors, els seus sentiments més íntims i els seus sexes. En realitat, es tracta de dues persones que representen o simbolitzen el germen del canvi que tindrà lloc en poc temps dins d’aquesta societat hipòcrita, encallada i allunyada de l’essència humana.
El muntatge de Llàcer no furga en l’aspecte sòrdid i traumàtic d’una relació desigual entre un món expert i un altre virginal, l’autor no ha volgut introduir-se en el melodrama dels abusos a menors, molt al contrari busca el costat divertit, l’obra té nombrós picades d’ullet i referències culturals, gairebé sempre en clau sentimental o paròdica, en una exhibició enlluernadora d’intel·ligència i humor a càrrec d’un dramaturg que li hagués encantat prendre el te amb Oscar Wilde.