
Imagen de Free-Photos en Pixabay
Dame la mano y danzaremos;
 dame la mano y me amarás.
 Como una sola flor seremos,
 como una flor, y nada más…
El mismo verso cantaremos,
 al mismo paso bailarás.
 Como una espiga ondularemos,
 como una espiga, y nada más.
Te llamas Rosa y yo Esperanza;
 pero tu nombre olvidarás,
 porque seremos una danza
 en la colina y nada más…
