El análisis de los datos reunidos por la sonda Messenger en su último vuelo alrededor de Mercurio han revelado que en el planeta más próximo al Sol hay muestras de actividad volcánica explosiva intensa a lo largo de su historia, así como de tormentas magnéticas muy potentes.
Así lo revelan tres estudios publicados hoy en la revista Science. “Estamos aprendiendo que Mercurio es un planeta extremadamente dinámico, y que lo ha sido siempre”, explica el investigador Sean Solomon, que espera encontrar nuevas “sorpresas” cuando la sonda sobrevuele el planeta el próximo año, en el mes de marzo.
El último vuelo de la sonda también ha proporcionado información sobre las subtormentas magnéticas en el planeta vecino. Estas se producen de forma intermitente en la Tierra, por lo general varias veces al día, duran de una a tres horas y están acompañadas de fenómenos como las bellas auroras boreales que aparecen en los cielos del Ártico y la Antártida. En Mercurio, según ha podido medir el magnetómetro de la Messenger, los aumentos de energía magnética durante una de estas subtormetas son hasta diez veces mayores que en la Tierra, y las subtormentas hasta cincuenta veces más rápidas.