¿Cuántos kilómetros recorre la leche antes de llegar a la mesa del consumidor? En los supermercados franceses se pueden encontrar hoy tetra briks con un llamativo mensaje: J’aime le lait d’ici (Me gusta la leche de aquí). Es la marca “militante” creada hace ahora un año por la principal comercializadora de este producto en Francia, Orlait, para fomentar el consumo de leche de ganaderos del país. Según la costosa campaña de publicidad puesta en marcha para su lanzamiento, se trata de leche para gente responsable y preocupada por el medio ambiente, pues se diferencia de otras por la proximidad de las vacas a los consumidores.
El consumo de productos locales suele tener un impacto menor que el de aquellos que realizan largos viajes, aunque esto no es siempre así (como cuando lo que se mide es la huella hídrica). En el caso de la marca J’aime le lait d’ici, llama la atención que la distancia entre la explotación ganadera y el comprador fijada para estos cartones de leche sea de menos de 330 kilómetros, de media. Claro que, aquí, obviamente, la ecología es más bien una excusa. En verdad, la nueva marca forma parte de la respuesta de los ganaderos franceses a la entrada cada vez mayor de leche de otros países, especialmente, de Alemania.
La leche es un producto particular. Se trata de una materia prima de origen animal, muy regulada y muy sensible a los precios internacionales. Tiene un impacto especial en emisiones de efecto invernadero y en huella hídrica: producir un litro de leche requiere unos 1.000 litros de agua
(llegeix més…)