Acusa al padre del primer bebé probeta de abrir la puerta a la ‘compra-venta’ de seres humanos.
El Vaticano criticó la concesión del premio Nobel de Medicina al británico Robert G. Edwards por sus investigaciones sobre la fecundación in vitro al expresar su “perplejidad” el presidente de la Pontificia Academia para la Vida, el español Ignacio Carrasco de Paula.
“¿Perplejidad? Mucha. Sin Edwards no existiría el mercado de los ovocitos. Sin Edwards no habría congeladores llenos de embriones a la espera de ser transferidos a un útero, o más probablemente para ser utilizados para la investigación, o bien para morir abandonados y olvidados por todos”, manifestó Carrasco de Paula, en declaraciones remitidas a Efe.