Las personas que viven cerca de las instalaciones nucleares españolas han recibido una radiación estimada que está “muy por debajo de los niveles que podrían afectar a la salud”, y tampoco se ha detectado un aumento de la mortalidad por cáncer asociada al funcionamiento de estas instalaciones. Éstas son las conclusiones de un estudio epidemiológico presentado hoy en Madrid por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) y el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII).
“Las dosis estimadas acumuladas por la población que vive en el entorno de las instalaciones -como consecuencia de su funcionamiento- son muy reducidas, y desde luego están muy por debajo de los niveles que podrían considerarse que afectan a la salud de la personas”, ha destacado Juan Carlos Lentijo, director técnico de Protección Radiológica del CSN, durante la presentación hoy de un estudio epidemiológico elaborado por técnicos de esta institución y del ISCIII.
El informe refleja que no se ha detectado un incremento de la mortalidad por cáncer en los últimos años asociado a la operación de las centrales nucleares u otras instalaciones de este tipo, ni tampoco debido a la radiación natural.
M’agradaria saber qui, en el fons, ha pagat l’estudi, perquè ja sabem que hi ha moltes maneres “d’estudiar” els fets…