Esta noche cuando tengan
muchas ganas de dormir,
revisen en el ropero,
yo puedo andar por ahí.
Y cuando cierren los ojos,
tal vez los haga soñar
con espantos y fantasmas
y escobas para volar.
Verán mi nariz de bruja
y una lechuza pintada.
Si acaso quieren gritar,
¡sólo oirán mi carcajada!
También vendrá un gato negro
entre esqueletos deshechos.
Cuando estén muy asustados,
mi trabajo estará hecho.
María Alicia Esain
Il.lustració David Galchutt
Vigileu amb les tietes
que us ofereixen confits.
No heu vist una rialleta
mentre us llepàveu els dits?
Jo dic que la meva és bruixa
i no es pas per la verruga.
Quan vinc sempre és a la cuina
d’allà ja no es belluga.
M’ofereix dolços,pastissos,
que en costa molt rebutjar.
Caramels,confits i anissos,
cada dia per berenar.
Però la bruixa no m’enganya,
quan fa un sonrís al seu gat…
Ja no té dents a la boca!
No acabaré desdentat.
Núria Albertí
Il.lustració Mónica Carretero
El fantasma Pepillo
(no tenía nombre de fantasma,
pero lo era).
El fantasma Pepillo,
no tenía sábana,
no tenía castillo.
Vivía en una casa vieja,
tan vieja,
que no tenía una teja.
Pepillo el fantasma,
no tenía sábana,
se embadurnaba de harina,
y dormía en la cocina.
Cuando llovía,
se mojaba,
cuando había tormenta,
se alegraba.
Como no tenía sábana,
cuando se iba a aparecer,
tocaba una campana.
Cansado de no asustar,
el fantasma Pepillo,
se compró un traje de pana,
se puso flequillo,
y se fue al parque,
a jugar con los chiquillos.
Gloria Fuertes
Il.lustració Jon klassen
T’escric amb la tinta
d’ombres encobertes
pels cossos volàtils
de fantasmes nus.
Brunzeixen, esquerps,
clarobscurs de lletres,
tritlleigs de paraules
i buidors en vers.
Murmuren a cau
d’orella, i esquiven
camins esventats
pel zèfir del temps.
I m’omplen la taula
de muses dansaires;
fantasmes que fugen
com fulles, al vent.
Vicenç Ambrós i Besa
Il.lustració Kim
Berga,l 1982. El 2003 va publicar el seu primer llibre, un poemari titulat “Del Lluçanès, del pas del temps i personals”. “Foc entre dos blaus”, va ser guanyador del Premi Carme Guasch de Poesia 2005. Ha publicat relats i poemes en el marc de diverses antologies o mitjans de comunicació.
La tropa de zombis
Treinta zombis en hilera
horripilan a cualquiera.
Caminan juntos, y el caso
es que nadie pierde paso.
Si el primer zombi vacila,
vacila toda la fila.
Si va bailando al compás,
bailan los demás detrás.
Si se da con un obstáculo,
comienza el gran espectáculo,
porque cada zombi errante
se da con el de delante.
Una noche de febrero
el zombi que iba el primero
se puso a mirar la luna
y se cayó en la laguna.
¡Vaya enfado el de la tropa,
que terminó hecha una sopa
y estornudando un montón
por culpa del remojón!
Si el zombi que va en cabeza
bosteza y se despereza,
hay veintinueve bostezos
entre traspiés y tropiezos.
Si el que dirige se pierde,
el resto lo pone verde,
pues todos ─¡qué sofocón!─
dan vueltas sin ton ni son.
Esta tropa atolondrada
no asusta nada de nada
y es que allá por donde pisa,
más que dar miedo, da risa.
Carmen Gil
Il.lustració Ale Giorgini
