El héroe de Dodcat
9 maig 2011En un planeta llamado Tierra había una ciudad enorme dónde solamente vivían los animales y se llamaba Dodcat. Me preguntaréis dónde están las personas… Pues se extinguieron a causa de un rayo de luz que salió del cielo.
Un día yo iba paseando cuando de repente mi amigo Pedro me dijo:
– ¿Has visto eso? Hay un señor que busca a alguien para ser un superhéroe.
– ¿Y qué pasa? -contesté yo.
Mi amigo me seguía insistiendo y al final nos fuimos para verlo. Seguro que fue porque una vez le dije que quería ser un famoso.
Había una cola enorme. Cuando nos tocó nos preguntaron un montón de cosas, pero alguna de ellas era extraña. Me eligió a mí. Ahora siendo un superhéroe conquistaría a Litzy, la hermana de Pedro, pensaba yo…
Primero ese señor se me presentó. Se llamaba señor Raiton. Después me dio un traje un poco raro y me dijo:
– Quiero que lleves esto -lo dijo sonriendo y dándome una pulsera un poco rara. Era plateada y tenía un símbolo como un monstruo o algo parecido.
Más tarde escuché de lejos que alguien pedía ayuda y fui tan rápido como pude. No me di cuenta que salté de la ventana. De repente podía volar! Sí, sí, podía volar. Cuando llegué había toda la prensa. Rescaté a esa persona y comenzaron a hacernos fotos. Me sentía como otra persona.
Lo que más me preocupaba era que al ser superhéroe me alejaría de mi amigo. Cada vez había más gente en peligro. Pasó algo extraño: un día mi manager, el señor Raiton, hablaba por teléfono y oí que decía:
– Te toca pagar. Mi superhéroe te ha salvado… ¡Tienes que pagarme! -yo me sorprendí, no dije nada y pensé que yo también tenia dinero pero en realidad me estaba comportando como un tonto.
Hasta que un día vino Litzy muy enfadada y me dijo:
– ¡Basta ya! Tú o tu manager roba dinero a la gente.
– ¿De qué hablas? – disimulé yo.
– No puedes seguir así –contestó y de repente me empujó y sin querer me rompió la pulsera
Yo como tonto le grite:
– ¡¡¡Qué has hecho!!! ¡¿Estás tonta o qué?! ¡Vete! -ella se me quedó mirando y se fue.
Pocos minutos después comencé a llorar. Me preguntaba que había hecho, me lo repetía una vez tras otra.
Cuando vino el señor Raiton miró la pulsera y me chilló:
– Aaaaaaaaa, qué has hecho! – yo le miré y le contesté- sólo me utilizabas para tener dinero, para llenarte los bolsillos -renunció y me fui todo enfadado.
Más tarde me fui a la casa de Pedro para pedirle perdón. Cuando piqué a la puerta Pedro salió y me dijo todo asustado:
– Ven, tienes que ayudarme. -me hizo pasar y me dijo- Litzy ha desaparecido. Un rayo de luz le pasó por encima y ya no estaba.
– ¿Pero cómo? -contesté yo. Fui a su habitación y había quemaduras. Muy enfadado quise investigar lo que paso allí.
Fui a ver a la biblioteca videos de rayos y encontré uno interesante. En él salían personas que decían que los extraterrestres estaban de camino y recomendaban que quien pudiera se salvara.
– ¡¡Sálvese quien pueda!! –gritaban. De repente me di cuenta de que esto se trataba de extraterrestres. Luego alquilé un cohete y me fui con Pedro. No sabia que tocaba y en ese momento el cohete fue a toda máquina. De golpe chocamos con una nave el triple de grande que nuestro cohete.
Entramos y vimos que Litzy estaba amarrada. Le dije a Pedro que la desatara. Yo tenía que vigilar a un extraterrestre que estaba dormido. No sé cómo, se levantó y comenzó a decir:
– Aaa! Eres tú el que me robó mi pulsera! Bueno eso ya no me importa porque os vamos a eliminar.
– Yo no te he quitado nada – y le tiré la pulsera.
Comenzamos a luchar y mientras Pedro desató a su hermana e iban hacia la nave. Litzy estaba tocando unos botones. Cuando yo terminé de pelear nos subimos a la nave. Entonces se escuchó una explosión, era una bomba. El ruido venía de la nave. Miré a Litzy.
Yo le pedí perdón y nos olvidamos de lo que pasó.
Ringgggggggg, ringggggggggggg… me desperté. Estaba en la cama y mi dueño me traía mi comida.
Aventurera