Yo creo que mis relaciones sociales durante el confinamiento no han cambiado mucho ya que me suelo comunicar bastante tanto por el móvil como por el ordenador. Evidentemente, en persona también, y eso lo extraño mucho. Lo que echo más de menos es ver a mis amigos, a mi familia, el poder dar y recibir abrazos, besos…

Por otro lado, lo que he aprendido gracias a esta cuarentena es que hay que disfrutar de las pequeñas cosas que pasan porque no sabes cuándo se pueden ir vamos a estar mucho tiempo sin ellas.

Para concluir, seguramente lo primero que haga cuando acabe esto será quedar con mis amigos e ir a la pista donde siempre íbamos a jugar a fútbol o a baloncesto, me da igual lo que sea, solo con verlos ya seré feliz.