El gato Botas
10 maig 2011Había una vez un gato que se llamaba Botas. Era un gato abandonado. La dueña lo abandonó porque le dañaba las cosas que compraba.
Todos los días el gato andaba por la ciudad hambriento. Soñaba con una niña que le cuidara. Era un gato con mucho valor. Era de color blanco con manchas negras. Cuando lo acariciaban era muy cariñoso con todos y muy amable con los gatos del callejón. El resto de gatos se reían de él porque lo habían abandonado.
El gato les decía:
-¿Por qué os reís?
Y los gatos contestaban:
– Porque a nosotros no nos han abandonado nuestros dueños. Nosotros nacimos en la calle, este es nuestro hogar.
-¿Por qué te abandonaron?- le preguntaron.
– Porque dañaba las cosas de mi dueña. A mi madre también la abandonaron pero no por el mismo motivo.
Al cabo de unos días una niña paseaba y se acercó a Botas.
– ¡Qué gato más sucio! Me lo llevaré a casa para lavarlo un poco.