Seguint la línia, en quan a la forma, dels altres llibres editats per en Jaume Soler i M. Mercè Conangla, avui us presento Ámame para que me pueda ir. En ell, els autors ens plantegen els seus punts de vista respecte molts temes relacionats amb l’educació dels fills i el rol de pares i mares. Llibre planer i clar respecte al què i com educar, aquesta bonica i gens fàcil tasca de fer de pares i mares.
A continuació podreu llegir la definició que els mateixos autors han fet del seu llibre.
“Estos son malos tiempos. Los hijos han dejado de obe-decer a sus padres y todo el mundo escribe libros”. Con esta frase de Cicerón se inicia el libro “Ámame para que me pueda ir” en el que, acompañados con cuentos y anécdotas que lo amenizan e ilustran, los autores hacen una seria reflexión sobre lo que supone ser padre y ser hijo y los vínculos de relación que se establecen.
– ¿Queremos niños seguros de si mismos, valientes, ex-ploradores, curiosos, con afán de aprender, respetuosos y que valoren la vida?
– ¿Queremos niños ansiosos, dependientes, con miedo a equivocarse, sin iniciativa, que busquen entornos seguros y cómodos por encima de todo?
– ¿Queremos hijos voluntariosos, luchadores ante las dificultades, que buscan otros caminos alternativos cuando uno se cierra?
– ¿Queremos hijos incapaces de perseverar cuando aparecen las primeras dificultades, que se rinden o resignan enseguida?
¿Hijos egoístas y agresivos o generosos i equilibrados?
Desde la perspectiva de la ecologia emocional, Ámame para que me pueda ir aborda la principal responsabilidad de los padres en la educación de sus hijos: acompañarlos en el proceso de convertirse en personas adultas emocionalmente equilibradas, autodependientes, amorosas, creativas y pacíficas. Sólo si amamos bien a nuestros hijos, ellos serán capaces de terner el coraje de alejarse de nosotros y vivir su propia vida con amor y responsabilidad”