VisualThinking_Unidad5_Aprender_Cooperar_y_EvaluarVisualmente

Unidad 5

Aprender, cooperar y evaluar visualmente

Reto Unidad 5:

 En este reto, nos han hecho realizar un muro visual que resuma las actividades que hemos estado realizando durante el curso.

La verdad, es que me han quedado dos tareas por hacer, por una parte, el time lapse, y por la otra el bullet journal, que haré en breve.

Para mí, que el dibujo me cuesta, me ha parecido por una parte enriquecedor, aunque tengo que mejorar mucho mis habilidades artísticas.

 Bullet Journal

 En construcción.

Objetivos

 

Objetivos

Para cualquier docente, los aspectos relacionados con la gestión del aprendizaje son tan importantes o más que la comprensión y desarrollo de los contenidos curriculares. Aspectos relacionados con la planificación y regulación de los procesos de aprendizaje, la colaboración entre iguales y la supervisión y la reflexión sobre lo aprendido son pilares de la competencia de aprender a aprender. El uso del visual thinking en en el aula puede convertirse en un recurso fundamental para el desarrollo de actividades que tengan incidencia en estos aspectos.

En la última unidad del MOOC Visual Thinking en Educación, los objetivos que te proponemos son los siguientes:

  • Trabajar la competencia aprender a aprender utilizando el visual thinking para ordenar y gestionar el proceso de aprendizaje.
  • Explorar las posibilidades del visual thinking para fomentar el aprendizaje cooperativo.
  • Utilizar el visual thinking como herramienta con la que hacer visibles los procesos de evaluación.
Ideas clave

La competencia aprender a aprender y el visual thinking

Hacer posible que los estudiantes sigan aprendiendo implica que se haya trabajado con ellos la capacidad de planificar de forma autónoma su aprendizaje. Esto implica que los estudiantes serán capaces de:

  • Detectar oportunidades de aprendizaje.
  • Definir qué recursos son necesarios para lograr sus objetivos.
  • Idear cuál es el proceso que deben seguir hasta conseguirlo.
  • Superar los obstáculos que se encuentren en el camino.

La competencia aprender a aprender significa que los estudiantes pueden construir sus conocimientos y habilidades a partir de sus experiencias previas, reutilizándolas en nuevas situaciones y contextos.

El acercamiento a la competencia aprender a aprender implica el desarrollo de una doble dimensión basada en aspectos tanto cognitivos como emocionales. Por un lado, los estudiantes han de adquirir unas habilidades metacognitivas que les permitan descubrir y regular su propia manera de aprender. Por otro, es fundamental que desarrollen unas habilidades emocionales que les permitan desarrollar una autoestima sólidamente fundamentada en la capacidad de entender el error como una oportunidad para el crecimiento y en la tolerancia a la tensión que supone la perseverancia.

El visual thinking es una herramienta que nos permite entender los patrones o ideas que subyacen en el fondo de un discurso y organizarlos en una representación con la que nos acercamos al mismo de una forma global, de un solo vistazo. Así, las imágenes sencillas nos pueden ayudar a hacer visibles los procesos de aprendizaje, ya que nos permiten representar mentalmente procesos complejos que, al ser dibujados, se pueden interiorizar y consolidar.

La alianza entre la competencia aprender a aprender y el visual thinking puede verse beneficiada por el hecho de que, al contrario de lo que sucede con los procesos lineales de escritura, a la hora de cartografiar un proceso de aprendizaje, la estructura se ha de crear a partir de la nada, por lo que puede adaptarse a las circunstancias propias de cada alumno y a su manera particular de observar, recordar y razonar o, lo que es lo mismo, de aprender.

Aprender a aprender por medio del bullet journal

En el camino hacia el aprendizaje autónomo que desarrolla la competencia de aprender a aprender, son fundamentales aquellos aspectos organizativos y de gestión que nos permiten hacer un seguimiento eficaz de nuestro aprendizaje. Para ello os proponemos utilizar un bullet journal, que organiza y gestiona de manera eficaz la información a través de claves visuales que permiten un acceso directo y, por tanto, eficiente, de lo que se debe llevar a cabo.

¿Qué es un bullet journal?

El bullet journal es un sistema visual de organización personal creado por Ryder Carroll (enlace en inglés) que se basa en el empleo de un cuaderno en el que se anotan todas las tareas que se han de realizar. El método se puede entender a partir de cuatro puntos:

  1. El principio central del sistema es el registro rápido que, a partir del uso de símbolos o viñetas (bullets), proporciona una manera de identificar de forma rápida las tareas importantes. Así, se propone utilizar elementos visuales, como son las casillas (checkbox) para las tareas, los círculos para las citas o eventos y los puntos para tomar notas.
  2. En la primera página del cuaderno, el índice se configura como la columna vertebral del bullet journal y se va actualizando a medida que se avanza en el uso de la libreta.
  3. El calendario de eventos preestablecidos se realiza al empezar cada mes, en una nueva hoja de la libreta, con una línea por cada día.
  4. Por último, la parte central del método es la lista de tareas, donde también se apuntan las ideas, citas o eventos, notas, etc. y que se puede hacer para el mes, la semana o el día, dependiendo de la necesidades. Este formato flexible evita que se desperdicien páginas, adaptando las listas de tareas a las necesidades de cada quien de forma que, al final del periodo establecido, se marca lo que está hecho, se tacha lo irrelevante y se migra lo que queda por hacer copiándolo a la siguiente lista y poniendo una flecha en la casilla correspondiente que significa “migrado”.

Os proponemos crear, en clave de visual thinking, un modelo de bullet journal en formato apaisado que contenga:

  • Un índice.
  • Una página.
  • Un calendario.

Puedes explorar cómo hacer esta tarea con este recurso de bullet journal.

Una vez que lo hayas diseñado, inclúyelo en tu diario de aprendizaje acompañado de una reflexión en la que comentes las posibilidades que ves para su uso en el aula.

El aprendizaje cooperativo y el visual thinking

El aprendizaje cooperativo constituye uno de los pilares de la competencia aprender a aprender, ya que el trabajo con otras personas puede ser de utilidad a la hora de tomar conciencia sobre los procesos cognitivos y emocionales que se desarrollan en uno mismo. La cooperación en las actividades de aprendizaje nos obliga a llegar a acuerdos sobre los objetivos, a idear de forma conjunta el proceso que se debe seguir, a detectar errores propios y ajenos, a explicarnos y hacernos entender, a negociar soluciones compartidas y a pensar por qué esa es la solución correcta.

El empleo de la herramienta del visual thinking en las dinámicas de aprendizaje cooperativo nos ayuda a generar conciencia colectiva sobre los procesos de aprendizaje que se están desarrollando en el equipo, permitiendo:

  • La interacción social a través del dibujo.
  • La interdependencia positiva entre personas que participan de un mismo imaginario visual.
  • La construcción colectiva de conocimiento por medio de mapas visuales generados a partir de los aportes de todos los miembros del equipo.
  • La mejora del flujo comunicativo que ha de desarrollarse a lo largo de todo el proceso de trabajo.

El mapa visual de empatía para las dinámicas cooperativas

El mapa de empatía es una herramienta creada por la consultoría de negocios XPlane (en inglés) que ayuda a las empresas a entender mejor a su cliente buscando un conocimiento más profundo del mismo, su entorno y visión del mundo, para tratar de adaptarse a sus necesidades. Esta herramienta, que lleva tiempo utilizándose en el design thinking (pensamiento de diseño), también es aplicada al mundo educativo con el objetivo de conocer y entender más y mejor a los alumnos, detectando sus necesidades concretas, y saber qué les preocupa, cuáles son sus motivaciones y principales deseos.

El mapa de la empatía es una dinámica de trabajo cooperativo que se realiza en un formato visual, igual que todas aquellas que proponen algún tipo de generación de idea, y en la que imagen es definitiva para participar activamente, interpretar las necesidades de cada individuo en su rol dentro del grupo y actuar en consecuencia de una manera eficiente para el correcto desarrollo del trabajo.

Una de las propuestas más habituales es emplearlo para generar los roles que definirán la cooperación del grupo en una actividad. La finalidad de realizarlo en un equipo de trabajo cooperativo en el aula será comprender mejor los objetivos que cada miembro se plantea ante el reto de llevar adelante un proyecto; por ejemplo, el interlocutor, el secretario, etc.

Para realizar el mapa de empatía de un equipo cooperativo, se proponen una serie de preguntas abiertas que busquen una respuesta a cómo ese alumno, con un rol concreto, interactúa dentro del grupo: ¿qué piensa y qué siente?, ¿qué dice y hace?, ¿qué ve?, ¿qué escucha?, ¿qué le frustra? y ¿qué le motiva?

Las respuestas a estas preguntas nos permitirán saber cuáles son las verdaderas preocupaciones de cada alumno y así podremos valorar su presencia, su modo de comportarse, averiguar cuál es el entorno en el que se mueve, conocer qué personas son las que ejercen una mayor influencia en él, descubrir a qué le tiene miedo y detectar qué objetivos, necesidades y deseos le mueven.

Al combinar el mapa de empatía con una herramienta como el visual thinking, la potencia de ambos instrumentos se multiplica por dos, ya que, por un lado, ofrecemos a los alumnos la posibilidad de expresarse por medio de dibujos sencillos distribuidos en el espacio del mapa y, al mismo tiempo, les permite acercarse a una representación visual de sus compañeros de equipo de forma mucho más inmediata y certera que si tuvieran que hacerlo por medio de un texto escrito. Por otro lado, el diseño de estos mapas es, para los docentes, una guía visual en la que pueden quedar reflejadas muchas de esas preocupaciones o intereses que tienen los alumnos y que, de otra forma, puede ser dificultoso conocer.

La evaluación formativa y el visual thinking

A la hora de desarrollar la competencia de aprender a aprender, es necesario que los docentes acompañemos a los alumnos en sus procesos de autorregulación del aprendizaje. Para ello, debemos enseñar a los estudiantes a identificar cuándo y cómo aprenden, de forma que sean capaces de identificar aquello que les ayuda a aprender.

En cualquier proceso de aprendizaje, la evaluación formativa es una actividad fundamental que permite constatar que los objetivos marcados se han cumplido, además de posibilitar la detección de aquellos aspectos que son mejorables.

La autoevaluación y la coevaluación por medio de listas de control, rúbricas y dianas de evaluación son procedimientos muy útiles a la hora de desarrollar una evaluación formativa que abunde y consolide los procesos metacognitivos, fomentando la autonomía y la formación integral del alumnado.

El empleo del lenguaje visual, a la hora de proponer instrumentos de evaluación, enriquece las posibilidades que este proceso fundamental para el desarrollo de la competencia de aprender a aprender ofrece a los alumnos. Así, el visual thinking abre la posibilidad de gamificar el proceso de evaluación, utilizando diferentes herramientas, como son:

  • Insignias (signos gráficos) para ofrecer retroalimentación, bonificaciones o barras de control que hagan visible el progreso.
  • Mapas de recorridos de aprendizaje. Un ejemplo es Mapping the Spectrum (en inglés).
  • Organizadores gráficos, como este canvas que aglutina todos los elementos que considerar, facilitando el aprendizaje.

En definitiva, el potencial comunicativo del visual thinking simplifica los procesos de aprendizaje y, acompañado de elementos de juego, forma con estos un tándem perfecto.

Reto

Muro visual de recuerdos

Un diario de aprendizaje es un documento que muestra el aprendizaje adquirido durante un proceso, a través de sus productos finales, y que incluye un proceso reflexivo sobre los propios aprendizajes, alcanzando la metacognición de todos ellos. Permite evaluar y autoevaluar tanto el proceso como los resultados.

A lo largo de este MOOC, has ido recogiendo las evidencias de aprendizaje en un diario que ha ido creciendo y enriqueciéndose con los diferentes documentos visuales que has ido creando. El diario generado tiene un formato de bitácora, lo que nos obliga a realizar una lectura secuencial de los aprendizajes.

Para concluir esta unidad, te proponemos realizar una “traducción” de tu diario a un muro visual de aprendizajes en el que, en una sola representación, recojas el tránsito que has realizado por las tareas y retos que te hemos ido proponiendo.

Las ventajas de este muro visual interactivo es que te permitirá ser autónomo en la inclusión de aquellas evidencias que creas han contribuido a tu aprendizaje dentro del MOOC, facilitando el conocimiento del antes y del después, ahora de un modo directo, y accediendo fácilmente al recorrido que ha supuesto para ti el utilizar el visual thinking como estrategia de aprendizaje. Esto reforzará tu autonomía y tu competencia de aprender a aprender y se convertirá en una memoria histórica de tu paso por #VisualMooc.

En la pestaña “Recursos de ayuda”, encontrarás información que te ayudará en la realización de esta última tarea del curso.

Recursos de ayuda

Para realizar tu muro visual interactivo, presta atención a los pasos que debes seguir:

  • Dibuja cada uno de los apartados desarrollados en el MOOC de manera analógica, interpretando el conjunto de aprendizajes de cada unidad.
  • Selecciona una herramienta digital que te permita crear una imagen interactiva del tipo de Genially Thinglink.
  • Digitaliza tus imágenes, súbelas a esa plataforma y enlaza cada uno de los apartados con las URL donde las has desarrollado en tu diario de aprendizaje. Añade una breve reflexión del proceso visual que has seguido para interpretarla en clave de visual thinking.

Actividad de autoevaluación

Al igual que en la unidad 3, esta actividad requiere de un proceso de autoevaluación, por lo que no dejes de revisar la rúbrica visual que te permitirá autoevaluar tu trabajo.

La evaluación del propio trabajo tiene como intención el ofrecer un feedback constructivo que te permita mejorar tu práctica educativa. La rúbrica que encontraréis en la plataforma, escrita y visual, os permitirá valorar el trabajo y comentar las áreas que, en función de los descriptores indicados, puedan mejorarse.

Rúbrica de evaluación entre pares

VisualThinking_Unidad4_Lovisualenlacompetenciadigital

Unidad 4

Lo visual en la competencia digital

Reto Unidad 4:

 En construcción del time lapse; me está siendo difícil grabar mientras dibujo. Entre otras cosas, no dispongo de trípode.

Objetivos

Objetivos

La imparable introducción de internet en nuestras vidas conlleva un incesante aumento tanto del consumo como de la producción de objetos audiovisuales por parte de los más jóvenes. Estamos rodeados de plataformas digitales que buscan captar la atención del consumidor hasta tal punto que muchas empresas se han lanzado a la aventura de crear contenidos audiovisuales que luego tratan de viralizar en la red.

El visual thinking se presenta como una alternativa más en la creación de ese tipo de contenidos audiovisuales por su facilidad de implementación, por el alcance y atractivo de su formato y por estar basado en un lenguaje universal: el dibujo. La apuesta por el uso del formato audiovisual para el aprendizaje nos lleva a la necesidad de superar la identificación que se ha ido creando entre el audiovisual y el tiempo de ocio. Tenemos que asumir nuestra responsabilidad y acompañar al alumnado en la adquisición de las competencias necesarias para compartir información que atienda los requisitos legales y que tenga un fin útil y práctico.

Los objetivos de esta unidad están directamente relacionados con:

  • Desarrollar la competencia digital utilizando tecnologías para crear nuevos alfabetos mediante el visual thinking.
  • Experimentar nuevas vías de expresión y comunicación multimedia asociadas al visual thinking.
  • Explorar la creatividad en clave visual thinking.
Ideas clave
 

Ideas Clave

El mundo digital nos ofrece múltiples herramientas para enriquecer nuestras creaciones de visual thinking y hace que nos adentremos en un mundo lleno de posibilidades de aprendizaje. Pero el cambio de la versión analógica a la digital conlleva nuevas responsabilidades y entrenamientos que requieren del desarrollo de la competencia digital para adecuarla a los requerimientos del Marco Común de Competencia Digital Docente. En este documento se recogen las cinco áreas competenciales con las que las personas que se dedican a la formación pueden analizar su competencia: la información y alfabetización informacional, la comunicación y colaboración, la creación de contenidos digitales, la seguridad y la resolución de problemas.

Las áreas competenciales nos aportan elementos diferentes con los que trabajar. En esta unidad exploraremos las posibilidades que nos ofrece el uso del visual thinking para desarrollar los diferentes aspectos que se contemplan en cada una de estas áreas.

Búsqueda y curación de contenidos

En un mundo en el que la sobrecarga informativa puede llevarnos a la superficialidad en la lectura de contenidos, la búsqueda y la curación de la información son habilidades imprescindibles para poder enfrentar el trabajo de organización de cualquier tema en un mapa visual. Identificar, localizar, obtener, almacenar, organizar y analizar son los verbos que sostienen esta competencia y que, combinados con el visual thinking, se pueden concretar en herramientas digitales, como la red social Pinterest, una plataforma para almacenar colecciones de imágenes en tableros personales temáticos.

Las posibilidades de búsqueda, filtrado y almacenaje de imágenes que nos ofrece Pinterest hacen que sea un espacio sumamente práctico para gestionar la información visual, por lo que existe un gran número de tableros dedicados al visual thinking.

Otras herramientas que nos permiten gestionar la información visual de manera eficaz son:

Si prefieres el formato visual de organización, en el siguiente artículo “20 alternativas a Pinterest” encontrarás gran variedad de servicios de marcadores con diseños centrados en lo visual.

 

La creación y la comunicación con Visual Thinking

Si nos preguntamos por la utilidad del visual thinking en una educación forjada en un siglo donde lo digital es clave, podemos hacerlo desde la revisión de las habilidades relacionadas con la generación de conocimiento que, desde la Asociación para las habilidades del siglo XXI (en inglés), han venido a denominar como las 4 Cs: pensamiento crítico, comunicación, creatividad y colaboración.

Analicemos cada una de ellas y veamos su relación con el visual thinking y las diferentes áreas o dimensiones de la competencia digital.

Comenzamos con la confluencia entre el pensamiento crítico y la primera área competencial, la información y alfabetización informacional. La búsqueda y el filtrado de la información digital para su posterior sintetización y organización en mapas en formato visual thinking favorecen el desarrollo de una serie de mecánicas que fortalecen el pensamiento crítico y la toma de decisiones a la hora de consumir las producciones digitales que se publican en internet.

Seguimos con la creatividad, una habilidad que, en lo digital, se relaciona con el área competencial de la creación de objetos multimedia nuevos. El espacio de confluencia entre la creación digital y el visual thinking nos permite experimentar con códigos visuales para la búsqueda de analogías inusuales y creación de nuevas metáforas con las que proporcionar soluciones innovadoras a los problemas. En el área competencial de la creación digital, el visual thinking se ha convertido en una popular herramienta que, en el mundo educativo, tiene una de sus manifestaciones más conocidas en el vídeo: Cambiando paradigmas (en inglés) del experto en educación Sir Ken Robinson.

A la hora de crear cualquier contenido nuevo, un aspecto que no podemos dejar de lado es el tema de las licencias y derechos de autor. La publicación de cualquier producción digital realizada en clave visual thinking nos obliga a acercarnos a este tema para conocer las diferentes posibilidades que nos ofrece la red y, en especial, las particularidades de las conocidas como licencias Creative Commons.

En tercer lugar, tenemos la colaboración que, en lo digital, tiene relación con la dimensión competencial de la comunicación. El desarrollo de la competencia digital en un entorno digital refleja lo que conseguimos al colaborar: aunar conocimientos, esfuerzos y desarrollar sinergias que amplían nuestra inteligencia colectiva. El visual thinking facilita esa adaptación a esa realidad, utilizando símbolos, etiquetas y palabras clave que se comprenden a primera vista y forman parte de un código universal, el dibujo, que facilita la colaboración.

La comunicación es una destreza estrechamente relacionada con el área competencial del mismo nombre. La necesidad de integrar el formato digital en nuestras vidas hace de la comunicación un elemento clave en el aprendizaje, imprescindible para facilitar la autonomía. El visual thinking permite la exploración de las posibilidades comunicativas del entorno digital y favorece que la asimilación del contenido sea más motivadora y eficaz, acercando el contenido y fomentando una mayor implicación en el contacto con su propia realidad.

Para terminar con este recorrido, tenemos que mencionar las dos últimas dimensiones de la competencia digital. Por un lado tenemos la seguridad, cuarta área de la competencia digital centrada en una gestión adecuada de la identidad en internet, que nos veremos obligados a realizar en el momento en el que publiquemos los primeros contenidos en la Red. Por el otro, tenemos el área de la resolución de problemas que pueden surgir en el proceso de creación de cualquier producción multimedia en clave visual thinking en la que se han de integrar lenguajes tan diferentes como el texto, la imágenes, el audio y el vídeo.

Tratamiento digital de una imagen realizada en clave visual thinking

A la hora de compartir nuestras imágenes, tendremos en cuenta:

Si has optado por el formato digital, sólo tendrás que guardar la imagen en un formato .jpg o .png  para incrustarla y compartirla en tu portfolio.

Si has realizado el dibujo a mano, antes de compartirla, tendrás que realizar la captura digital de la imagen. Para realizar esta operación, tienes varias opciones:

      • La toma de una fotografía; para ello, coloca el mapa sobre un fondo blanco en un lugar bien iluminado, preferentemente con luz natural. El trípode es una herramienta muy útil para este tipo de tareas, ya que sostiene la cámara de fotos o el móvil y los mantiene inmóviles.
      • El escaneo con un móvil o tableta, para lo cual necesitas tener instalada una aplicación en el dispositivo. En el siguiente artículo 6 aplicaciones para escanear documentos con tu móvilpuedes encontrar información sobre cómo utilizar la cámara de tu smartphone o tableta como escáner para digitalizar los dibujos.
      • El empleo del escáner de escritorio, que ofrece una mayor calidad en el resultado. En el siguiente tutorial se explica, de forma sencilla, cómo pasar al ordenador los dibujos realizados a mano en un cuaderno de dibujo.

Una vez digitalizada la imagen, es importante realizar un mínimo tratamiento a la misma, modificando en ajustes el brillo y el contraste con el objetivo de que se vea más limpia. Este tratamiento de la imagen se puede realizar en cualquiera de los editores gratuitos que encontramos en la red, por ejemplo Sumo Paint o Pixrl.

Otra forma de tratar la imagen nos la proporcionan aplicaciones como Prisma, que ofrece una gran cantidad de filtros que pueden enriquecer y hacer nuestra imagen más atractiva. Algunas alternativas para escritorio podemos encontrarlas en el siguiente artículo Cómo aplicar los filtros de la app prisma en tu PC.

El video scribing y la clase invertida

En el mundo del visual thinking, el paso de la imagen estática a la imagen en movimiento tiene un referente muy conocido en el video scribing, término que hace referencia a la grabación de un audiovisual corto en el que, por medio de elementos visuales dibujados a tiempo real, organizados lógicamente y apoyados por la locución de un texto, se transmite una idea o un contenido. El objetivo de este tipo de vídeos es generar mayor atención y mejor asimilación por parte del espectador, por lo que se utilizan garabatos o dibujos que sintetizan un concepto. El uso de pocas palabras y la organización de los conceptos en un mapa visual que va conformándose facilitan la comprensión del mensaje.

Para realizar este tipo de vídeos existen varias alternativas:

  • Realizar el dibujo a mano sobre un papel o pizarra y grabar todo el proceso utilizando la técnica del time lapse. Para ello, se graba todo el proceso y, posteriormente, se manipula el vídeo modificando la velocidad con un editor. Hoy en día existe la posibilidad de grabar este tipo de vídeos con aplicaciones que, de forma automática, aumentan la velocidad de la grabación. El efecto visual que se logra consiste en que todo lo que se haya capturado se mueva muy rápidamente.
  • Usar aplicaciones que convierten la tableta o el smartphone en una pizarra virtual con grabación de voz, vídeo y escritura, de forma que el proceso va siendo grabado a medida que se va realizando. En estos casos, para modificar la velocidad de reproducción, es necesario editar posteriormente el vídeo.
  • Usar aplicaciones que disponen de una biblioteca de imágenes cuyo tamaño y color podemos modificar y que, una vez insertadas en la presentación, podremos girar y voltear. Estas aplicaciones también nos permiten la creación de texto, incorporar efectos como el de una mano que dibuja y realizar diversos zooms.

Lo interesante de estos audiovisuales es que permiten al docente su empleo en lo que se conoce como la clase invertida o the flipped classroom. En este modelo pedagógico, los vídeos facilitan la autonomía en el aprendizaje, permitiendo a los alumnos gestionar su tiempo fuera del aula para explorar contenidos, potenciando dentro del aula los procesos de adquisición y práctica de conocimientos.

El visual thinking puede convertirse en un gran aliado de este modelo educativo, ya que la animación de los mapas visuales convierte el contenido curricular en algo dinámico y atractivo, coherente y actualizado y proporciona al alumnado la posibilidad de volver a acceder a los mejores contenidos generados o facilitados por sus profesores. Además, el uso del modelo de la clase invertida aumenta el tiempo que los docentes pueden dedicar en el aula a atender las necesidades de cada alumno.

Un ejemplo de cómo la clase invertida puede aprovechar los beneficios del visual thinking lo vemos en la página de Academia Play.

Draw Your Life

Entre los audiovisuales realizados en video scribing, podemos encontrar los vídeos Draw You Life, muy conocidos en el mundo Youtuber, en los que una persona explica su vida de una forma amena a través de dibujos.

En la red existen una gran cantidad de ejemplos e incluso podemos encontrar el canal de Youtube Draw my life en español dedicado a este tipo de vídeos, en el que, entre otros muchos, podemos encontrar uno dedicado a la vida de Cervantes.

Este tipo de animaciones también puede ser utilizado como una herramienta de creación con la que proponer a los alumnos el acercamiento creativo a contenidos muy diversos.

Reto

Time lapse para animar un mapa visual

¿Qué es un time lapse? Se trata de una técnica de animación que muestra una secuencia de imágenes en movimiento a una velocidad mayor de la normal. Las grabaciones realizadas con la técnica del time lapse se desarrollan con un movimiento muy rápido y son muy populares en la red porque se utilizan para mostrar procesos largos como un amanecer o una puesta de sol, el crecimiento de alguna planta, etc.

El reto de esta cuarta unidad consiste en producir un vídeo time lapse en el que se refleje el proceso de dibujo de un mapa visual. Para realizar la animación, puedes crear un nuevo dibujo o reutilizar alguno que hayas realizado en las actividades previas. Recuerda que el objetivo es desarrollar tu competencia digital de una manera creativa y comunicando de forma efectiva.

El equipo básico para realizar un time lapse

A la hora de realizar un audiovisual con la técnica del time lapse, el equipo básico que necesitarás será el siguiente:

  • Un espacio despejado, con una mesa sobre la que tendrás a mano todas las herramientas que utilizarás para dibujar el mapa.
  • Un dispositivo móvil (smartphone o tablet) y un trípode o pinza en el que sujetarlo.
  • Una o dos lámparas que te ayuden a conseguir una mejor Iluminación.
  • Alguna de las aplicaciones para grabar vídeo y audio instaladas en tu dispositivo.
  • Un programa de edición de vídeo con el que incluir la locución en el vídeo.

En esta unidad compartimos una serie de recursos, aplicaciones y algunos trucos que te pueden resultar de utilidad para realizar la animación. Revisa el apartado de recursos y experimenta con varios de ellos para encontrar la forma de trabajo que mejor se adapte a ti, con la que sientas que todo va más fluido, sin complicaciones.

El proceso de animación

La parte más complicada del proceso de animación de un mapa con la técnica del time lapse es el montaje del estudio. Tendrás que buscar un espacio en el que instalar la mesa sobre la que vas a dibujar y un trípode (o algún sistema de sujeción que haga una función similar).

Previo a la grabación, es interesante tener el mapa ya diseñado para poder utilizarlo como guía del trabajo. Algo que no debes perder de vista es que el formato de la imagen en vídeo tiene una proporción de 16:9, por lo que, si vas a utilizar un mapa ya realizado, deberás adaptar la proporción para que encaje en la pantalla.

Una vez tengamos listo el mapa guía y los materiales sobre la mesa, ajustaremos el dispositivo móvil (tableta o smartphone) al trípode para, a continuación, encuadrar la superficie sobre la que vamos a dibujar. Algunas personas utilizan una pared vertical sobre la que colocan su papel o pizarra blanca, pero resulta más cómodo hacerlo sobre una mesa horizontal.

Otro aspecto importante a la hora de realizar la grabación es la iluminación para lo que es interesante utilizar algunas lámparas (mejor si son de luz blanca) y jugar con ellas tratando de que las sombras que produce la mano al dibujar no sean muy oscuras. La norma general es utilizar tres focos: la luz más potente, de frente, tratando de colocarla en perpendicular al papel, y dos luces laterales, como se muestra en el siguiente vídeo.

Una vez preparado todo, para hacer un time lapse básico, solo es necesario encender el dispositivo móvil, encuadrar la imagen que queremos grabar y pulsar el botón de grabado de la aplicación que hayamos seleccionado. Para no cometer errores en este momento, es interesante utilizar una plantilla que nos dé seguridad a la hora de dibujar. Esto lo podemos hacer de tres maneras:

  • Colocando una copia del mapa debajo del papel para realizar el calco de la imagen mientras se realiza la grabación.
  • Creando una plantilla con la imagen del mapa dibujada con lápiz, cuidando que los trazos sean muy suaves y no sean visibles en la grabación.
  • Escaneando la imagen y modificando el contraste con un programa de edición de imágenes, de forma que podamos imprimir una plantilla en tonos grises muy claros que sirvan de guía para el dibujo, pero que sean prácticamente imperceptibles cuando realicemos la grabación.

Con el vídeo ya grabado, llega el momento de añadir la locución para lo cual es necesario tener en cuenta la duración de las escenas y tratar de sincronizar lo más posible voz e imagen. Para que el encaje audio-visual sea correcto, es interesante realizar algunos ensayos previos. Cuando consideres que has adquirido el ritmo y la entonación adecuados, realiza la grabación del audio y ya solo quedará incorporar la misma al vídeo.

Como última recomendación, antes de grabar el time lapse definitivo, es conveniente que realices alguna experiencia previa con el objetivo de familiarizarte con la técnica y depurar los errores que puedas cometer las primeras veces.

Recursos de ayuda

En esta sección os recomendamos algunas de las herramientas que podéis utilizar para realizar el reto de esta unidad.