En el octavo episodio de la segunda temporada de Castle, el capitán Montgomery barrunta que el candidato al Senado con quien departe está a punto de exigirle una condición a cambio de su colaboración en la investigación de un caso en el que se halla involucrado:
—Y supongo que ahora viene un pero.
—Un pero, no; un sin embargo.
¿Tiene sentido el matiz diferencial que intenta establecer el candidato en su respuesta al capitán?
Se trata de unidades léxicas distintas: pero es una palabra, mientras que sin embargo es una locución. Funcionalmente, la primera es una conjunción coordinante, obligada a aparecer entre dos periodos oracionales adversativos, mientras que la segunda es de carácter adverbial y puede aparecer en cualquier posición. Esta diferencia funcional es la que permite la coaparición de ambos elementos en un mismo enunciado.
Ahora bien, el uso de la conjunción adversativa pero junto a locuciones adverbiales que hacen las veces de conectores discursivos contraargumentativos como sin embargo (u otros como no obstante o en cambio) resulta pleonástico o, como mucho, enfático. Así pues, entre ellos, no hay matiz diferencial que justifique la aclaración que hace el candidato al capitán de la policía.