Hoy toca un clásico del cine de terror. En esta película se nos explica la historia de un especialista en exorcismos que intenta espantar al demonio que se ha instalado en el cuerpo de una niña.
En el video os presento una escena en la que el exorcista habla con el demonio, que se acerca a él utilizando lógicamente la lengua de la iglesia. Empieza con “Mirabile dictu” (“si lo explicas parece increíble”), y después, con ironía, “Ego te absolvo”.
El exorcista trata entonces de iniciar un diálogo serio en latín y le pregunta “Quam nomen mihi est?”. Al darse cuenta de que se ha equivocado insiste, pero ahora de manera correcta: “Quod nomen mihi est?”. Sin embargo la conversación en este idioma se acaba aquí…