
Imagen utilizada en Twitter por @Subversivos y en Facebook, por la revista literaria "La Noche de las Letras"
Cientos de artistas y otros simples curiosos han creado arte a partir de la inspiración dada por el libro El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha, escrito por Miguel de Cervantes Saavedra. Este cúmulo de obras se halla en cualquier parte y así es como, por casualidad, sin buscarla, encontré esta imagen de don Quijote y Sancho Panza en Twitter.
Me decanté principalmente por esta imagen porque me impactó la frase que lleva representada: “Cambiar el mundo, amigo Sancho, que no es locura ni utopía, sino justicia.” Con solo leerla me vinieron a la mente una serie de ideas y pensamientos en relación con el mundo actual y pensé que si una frase que inicialmente habla de un hombre del siglo XVII podía ser también aplicada hoy en día, merecía la pena hablar de ello. Creo firmemente en el primer pensamiento que me vino a raíz de la imagen, y es que la locura que desate la razón de algunos humanos será la única capaz de salvarnos.
Piti (B1B) redactó el siguiente comentario, desconocedora de que la imagen ya había sido adjudicada a Patricia para esta entrada:
En esta imagen hay escrita una frase que le dijo don Quijote a su amigo Sancho, y, justo debajo a la derecha, un dibujo a base de garabatos que representa a don Quijote montado en su caballo y a Sancho en su jumento. Me gusta mucho esta imagen, ya que es una representación muy simple, pero muy clara a la vez de lo que representa don Quijote. Dice mucho con muy poco.
No deja de ser curioso que lo que te atraiga de una imagen sea la letra que la acompaña, la cual, por cierto es apócrifa. En el Quijote no aparece ni una sola vez la palabra utopía. Ello resulta lógico si se sabe que, en nuestro idioma, este cultismo no aparece documentado hasta mediados del siglo XIX, a pesar de que fue inventado por Tomás Moro en 1516 para intitular uno de sus libros. Con todo, he de reconocer que, como lema inconformista, posee fuerza.
Patricia, no acabo de entender bien la firme creencia con que rematas tu escrito. En parte, porque no sé si la locura desata a la razón o es la razón la que desata a la locura, y, en parte también, porque no desarrollas la idea de salvación: ¿de qué hemos de ser salvados?, ¿cómo hemos de ser salvados?…