Ficha Técnica
Dirigida por Nicholas Hytner y producida por Stephen Evans y David Parfitten en 1994, tiene una duración aproximada de 107 minutos. Procedente del Reino Unido y distribuida por la Samuel Goldwyn Company, cuenta con Nigel Hawthorne (rey Jorge), Helen Mirren (en el papel de la reina) y Ian Holm (el psiquiatra del rey Jorge) como protagonistas. La banda sonora es de George Fenton y Andrew Dunn es el director de fotografía.
Resumen
En 1788, Inglaterra vive bajo el reinado del rey Jorge III. Hombre de avanzada edad, su mente va dando tumbos entre la claridad y la confusión hasta que, finalmente, cae en la demencia. Con el rey sumido en la locura más absoluta, el príncipe de Gales, heredero del trono, idea una enrevesada maniobra política para conseguir que el parlamento apruebe una ley que le nombre regente argumentando que el rey ya no se encuentra en plena posesión de sus facultades y que no es apto para gobernar. Preocupado por salvaguardar su puesto y al propio gobierno, el primer ministro Pitt le encomienda a un prestigioso médico la ardua tarea de sacar al rey de la demencia en la que ha caído. Tras meses de una radical terapia, el rey acude al parlamento a tiempo para evitar el nombramiento de príncipe de Gales como regente, quien lo considera de nuevo apto para reinar. Finalmente, el rey le aclara a su hijo el heredero que el papel de la monarquía en Inglaterra es el de “saludar y sonreír” y que no es sino en el parlamento donde debe recaer la verdadera soberanía.
Comentario
Opino que La Locura del Rey Jorge es una interesante obra que refleja perfectamente las tramas políticas y personales de la época. Me parece realmente acertada la actuación del primer ministro Pitt y, sobre todo, ese reflejo de sus verdaderas intenciones que se entrevé cuando le encomienda al psiquiatra la tarea de curar al rey, preocupado más bien por asegurar su puesto en el gobierno que por el bienestar del propio rey. También es interesante la trama que se crea alrededor del matrimonio entre el príncipe de Gales y su esposa, María, y a la invalidez de éste al tratarse su mujer de una católica. Finalmente, creo que el papel de Helen Mirren como reina es sobre-actuado y poco convincente, sobre todo cuando se trata de las escenas más emotivas de su personaje, como la conversación que mantiene con el rey cuando éste sube al tejado creyendo que Londres es víctima de una inundación. Se aprecia una falta de realismo por su parte que rompe con la buena caracterización de los demás personajes (sobre todo el psiquiatra) y la magnífica ambientación de la película. En resumen, pese a tratarse de una película algo lenta para mi gusto, me ha gustado.