Me gustaría compartir mi experiencia que tuve hace un par de años en un pueblo al noreste de Praga, concretamente en Terezin. Este lugar fue un campo de concentración y de exterminio por el cual pasaron millones de personas. El campo de concentración se divide en dos partes la fortaleza grande y la pequeña. La primera fue un ghetto judío por donde pasaron millones de ellos, la segunda fue el campo de concentración que se puede visitar. Este campo me causo una impresión increíble por el lugar tan vacio y la increíble sensación que da pasar por cada esquina del campo. Lo que más me llamo la atención fue un túnel subterráneo de más de un kilometro de largo y con un montón de pasillos pequeños y oscuros por los cuales me atrevería a decir que se escuchaban lamentos y que había algo más que oscuridad. Otro sitio del campo que me llamo la atención después de pasar por el túnel subterráneo es que directamente salías a otro túnel gigante lleno de escritos tallados en la misma piedra por los judíos que pasaron por allí, en esa pared se podía leer perfectamente lo que se les venía encima, pues nada más salir del túnel serian fusilados o colgados en la soga.
Creo que este tipo de visitas se tienen que hacer por lo menos una vez en la vida para poder entender una parte de la historia y sobre todo para no olvidar lo que paso allí ya que esa es la única manera para que no vuelva a ocurrir tal holocausto. Es un lugar que me hizo reflexionar, puesto a que no fue una excursión, es un sitio en el que hasta cierto punto llegue a pasar mal rato, pero es necesario saber lo que sucedió. Es un lugar que transmite mucha tristeza y angustia y en el que uno se plantea muchas cuestiones.