Pesquis y Baliga iban caminando y hablando hacía la isla Nimàlia. -Últimamente no nos hemos portado bien. – Dice Pesquis.
-¡Pero al final los padres nos han dejado ir a isla Nimàlia! – Dice Baliga.
Caminando se encuentran dos señales que indican dos caminos diferentes. Pesquis prefiere ir a la prehistoria y Baliga prefiere ir a ver los fósiles porque quiere emociones.
Al cabo de unos minutos…
– Espero que Baliga no se meta en lios de los suyos – Piensa Pesquis.
Pesquis camina despistado y no ve la señal ‘’Zona de robots. No entrar dentro del camino.’’
Pesquis pisa una cosa y se pregunta qué es eso. Mira hacía abajo y ve que es una semilla enorme, piensa que en la prehistoria no había semillas enormes.
De repente ve una hormiga gigante, grita y se asusta mucho.
Pesquis Girita pidiendo ayuda mientras la hormiga se lleva la pipa con él adentro. De pronto aparece una libélula que se lo lleva. Colgando la libélula de pronto lo suelta, y se cae además pierde el sombrero.
Cuando se cae aparece un gusano que se lo lleva a la salida mientras una mariquita lo ve y se enamora de él. El policía lo regaña porque se va con la mariquita, además aparece Baliga y se queja porque solo ha visto un hipopotamo bajo el agua y un rebaño de ovejas.
Monthly Archives: maig 2016
El coche viejo
Hay dos hombres mayores que van en un coche muy pequeño.Dice uno de ellos:
– ¿No te sabe mal vender este cochecito?
El hombre de al lado le responde:
– Es que conozco un sitio donde me darán mucho dinero.
Los dos hombres aparcan delante de una tienda de vehículos usados, bajan y entran. Llegan Pesquis y Baliga y al ver aquel coche Pesquis le dice a Baliga que el coche es viejo. Se acercan y el coche se mueve un poco. Pesquis dice:
– ¡Cuidado que se mueve!
– Esto es que no han puesto el freno de mano – responde Baliga.
Baliga mira al coche, encuentra un gancho con una cuerda.
– Lo atamos y ya está. – dice Baliga.
Pesquis dice que será mejor esperar a que venga el amo para avisarlo. Baliga ve un bar de refrescos y le dice a Pesquis que vayan a comprarse uno. Pesquis comenta:
-¿ Pero si el dueño vuelve antes?
Pesquis sujeta la cuerda a un poste…
Al mismo tiempo salen dos hombres de la tienda de coches usados.
– Quieren que se lo pongamos dentro del garaje. Se quedarán parados cuando vean como ronca – le dice un hombre al otro.
Los dos hombres suben al coche y lo arrancan. En aquel momento Pesquis y Baliga se dan cuenta de lo que pasa y les dicen que paren. No los escucha y el coche y las ruedas se separan. Los amos del coche se enfadan mucho.
En Pepmanetes vuelve a actuar.
Unos policías van corriendo hacia el despacho del comisario Morrofort.
¡Comisario Morrofort, Pepmanetes ha vuelto a actuar!¡Ha vaciado un banco! – Dicen los policías.
Unos policías van corriendo hacia el despacho del comisario Morrofort.
¡Comisario Morrofort, Pepmanetes ha vuelto a actuar!¡Ha vaciado un banco! – Dicen los policías.
Pepmanetes
He dado un buen golpe, y aquí no me buscará nadie. ¡Pero ahora se pone a nevar! – piensa Pepmanetes.
Ya me lo pensaba… !Atrapado¡ !Y viene gente¡
Me esconderé por si acaso y esperare a que se vayan – Piensa el ladrón.
Van un grupo de niños haciendo una excrsión por la montaña.
!Que lastima¡ Hemos de volver a casa. Si quien lo havia de decir que hoy tenia que nevar. – Dice otro del grupo de amigos.
!Tengo una idea¡ Bajaremos por esta pendiente – dice Baliga
Muy bien.
¿Has atado bien la cuerda? – dice Pesquis.
¡Y tanto! ¡Podemos bajar sin miedo! – dice Baliga.
Va ahora, te toca a tí. – dice Baliga a un niño que pesa mucho.
la cuerda se rompe. – Y se caen todos.
La cuerda que estaba atada al coche del ladrón arranca la puerta y se ve dinero.
Baliga se sorprendre al ver el dinero.
Pepmanetes se queda super enfadado porque los niños se llevan el dinero robado.
¡A bajo seguro que alguien los encuentrael el dinero falta! – dice Pesquis
Las Castañas
Pesquis y Baliga pasean por las calles del pueblo y Pesquis dice:
-Se acerca el dia de la Castañada y debemos montar una parada. Vamos a comprar un saco de castañas. –
Un niño estaba escuchando la conversación de Pesquis y Baliga y pensó que : era verdad, que él también quería vender castañas. Pero que tenía que intentar acer“negocio” …He,he…
El niño se va a buscar un amigo para que vaya a buscar un saco de castañes.
-Ei, ¡Mussol! ¡ Consigueme un saco de castañas!
– ¿Y tú qué me darás? – Respondió el niño.
– Ehem… Te daré un CD del grupo Trash Tokat.
– Mh…. Saldría ganando. – pensó el niño
– ¡De Acuerdo! ¿Porque eres mi amigo, he? Al fin
El Mussol se encuentra con otro niño y le dice:
¡Tu! ¡Consigueme una bolsa de castañas! Te daré el cómic de “Gárgoles Fosques”… –
El niño al oír eso se dijo:
Calla, que ésto me irá bien. – Pensó el niño.
Bien, si insistes. – Le respondió.
El niño se cruzó con una chica y le dijo:
¡Ep! Consigueme una cucurado de castañas y te regalaré un poster de “ Transformers 4 ”. –
La chica al oír esto pensó.
Me saldrá a cuenta.
Va, porquè eres tú… – Le respondió.
La chica se acercó a una tienda de frutas y pensó:
Aquí deben tener castañas, pero cuántas castañas tendré por 20 céntimos… –
Sale de la tienda con una cucurando lleno
Me les han dado gratis. ¡Que bien!
Despues de un rato se encuentran los dos primeros niños
Venga, dame el CD
Pero si había dicho una bolsa, no una paperina… – Reclama el primer niño.
¡AG! ¡ ¡Además tienen gusanos!
¡Este disco está rayado!
¡Estafador!
¡Liante!
¡Trampos! ¡Este poster está roto!
¡Ladron! ¡Este cómic está arrugado!
Todos los niños se pelean.
Pesquis y Baliga llegan con una bolsa gigante de castañas delante del grupo de estafadores y Pesquis dice:
¡Ya tenemos una buena bolsa de castañes auténticas!
Y Baliga responde:
¡Dulces y bueníssimas!
El grupo que querían engañar y estafar está muy furiosos y gruñe.
El barco de los piratas
Pesquis y Baliga han encontrado un barco en el fondo del mar. Es un galeón antiguo.
Una chica se les acerca y dice:
Hola, me llamo Mar Abisal. Tengo un sumergible y me dedico a rescatar tesoros hundidos. ¿Donde se encuentra el galeón?
Y Baliga le responde:
Te lo diremos solo si nos dejas venir contigo.
Vale Venga. – Responde Mar
Uau – Dicen los dos, al subir al submarino.
Pesquis y Baliga estaban con Mar en su sumergible y Baliga guiando a Mar dice:
Es allí.
Mar le contesta que ya lo ve. Que arà el trabajo. Que empezarà a desmontar el barco y lo venderà todo a trocitos.
Allí mismo empieza una discusión, Baliga dice que no tiene ningún derecho a tocar el barco, porque es una pieza de museo y no le pertenece. Mar Abisal està muy enfadada y le responde:
¿Qué?
Y tanto – añade Pesquis dando la razón a Baliga.
¡Ni lo toques!- dice Baliga.
Vosotros no sois nadie para decirme lo que tengo que hacer – responde Mar.
!Dejad de discutir, por favor! – añade Pesquis.
En un momento Mar arranca un trozo del barco y los dos niños gritan a la vez:
– ¡Oh no!
Mar los lleva a la playa.- Ya os lo podéis quedar este trozo, no vale nadá.
-¡Que caradura! lo llevaremos al museo de torrecorcada.
– Mira, Baliga.
Hay un escrito grabado a propia mano de un pirata! – Dice Pesquis.
– ¡Ala! – Baliga empieza a leer-” Yo, el pirata Barbarroja he navegado en este barco año 1645”.
Perdidos en la montaña
Pesquis y Baliga estan bajando por una montaña nevada con su trineo llamado ” pez hervido” y en Pesquis le dice a Baliga:
-Oriol y Martina ya deben estar abajo esperandonos.
-Pero el ”pez hervido” es muy rapido. -Contesta Baliga con cara de alegria.
De pronto el trineo choca contra una piedra, se rompe y Perquis y Baliga salen rodando por la nieve. Al final de la bajada no sabían donde estaban y Pesquis creía que era imposible volver hacía arriba, pero Baliga vió una via de tren con una vagoneta abandonada. Pasaba por un túnel en el que no paraban de caer gotas de hollín:
-Creo que por aquí llegaremos a algun lugar- Dijo Baliga.
-¡La salida! ¡Viva! -Dijo Baliga.
A Pesquis baliga le caían gotas de hollín en la cabeza. Mientras tanto Oriol y Martina estavan esperandolos.- Dice Oriol.
-¿Sabes que a eso lo llaman la torre de los demonios?
Martina se asusta y le dice a Oriol:
-Demonios no… pero si que he visto algún zombi… he,he,he.
De repente aparecen Pesquis y Baliga, van sucios. Oriol se espanta mucho y sale corriendo. La Martina sabe que son ellos porque dicen.
-¡Ei, que somos nosotros!
Un dia en la playa
Pesquis y Baliga caminan por la playa, están muy contentos.
– Ya volvemos a estar en Torrecorcada. -Dice Pesquis.
– Viva! -Baliga le responde:
Caminando por la arena se encuentran unas rocas en las que no había nadie y Baliga dice que allí estarán bien.
Cuando están sentados en las rocas Baliga coge una red de pescar y Pesquis coge su libro de la mochila.
– Como me gusta este libro de Julio Verne, también salen monstruos marinos que viven en las profundidades. -Dice Pesquis.
Luego Baliga caminando por las rocas con su red de pescar dice:
– He oído hablar de unos calamares que hacen más de 10 metros de largo…
Pesquis está leyendo su libro sentado en las rocas y dice:
– ¡Vamos, Baliga, no me hagas cosquillas!
– ¡Qué dices Pesquis, si estoy aquí! – le responde Baliga.
Pesquis se gira aterrorizado al ver un calamar gigante en el mar, mientras Baliga dice:
– Cuando veas las conchas que he recogido, te quedarás de piedra.
¡QUÉ DESPISTADO!
Pesquis sale de su casa pensando que ha llegado el gran dia de comenzar la escuela. Después Pesquis se dirige a la casa de Baliga. El espera que Baliga esté preparada para ir a clase, pero Baliga va en pijama.
– ¿Aún estás así? Venga, que hoy comienza la escuela – Dice Pesquis.
– ¡Hol… Auuuuuh! – Le responde Baliga bostezando.
Al cabo de un rato salen a la calle dirigiéndose al colegio. Pesquis abre el paraguas y dice que se tienen que dar prisa porque si no se mojaran porque está lloviendo muchísimo.
Cuando están a medio camino Pesquis añade:
– Este verano no hemos cogido ni un libro. Con la historia del galeón… ¡Vamos peces, nunca mejor dicho!
Cuando están a pocos metros de sus amigos Pesquis está bastante preocupado porqué tendrán que hacer las pruebas iniciales. Pero Baliga no está nada preocupada. Ella comienza a saludar a sus amigos.
Cuando están dentro del colegio todos los niños empiezan a explicar sus vacaciones, si han crecido, si uno es más alto que el otro… Cuando entran dentro de clase el profesor les dice:
– ¡Vamos! Pero ya sabéis que de entrada no os tenéis que preocupar demasiado.
– ¡HI, HI, HI! ¡HA, HA, HA!
Todos los niños se reían de Pesquis cuando el profesor dijo:
– ¡Venga Pesquis, que aquí dentro no llueve!
– ¿EH…? ¿QUE? -se sorprende Pesquis al ver que todos se reían de él.
El caso es que Pesquis aún llevaba el paraguas abierto.
El abuelo que dice la verdad
Pesquis y Baliga van paseando por la calle y ven a un abuelo.
Ui, este señor es un trotamundos que siempre va diciendo cosas a la gente – dice Pesquis.
¿Da miedo, verdad? – responde Baliga.
El señor, que daba miedo y caminaba de cara, les dice a los niños que después se encontrarán a un señor que saldra de una cueva y que les indicará el camino para lllegar al ojo que todo lo ve. Debajo habrá un ser de color verde y él les enseñará la oscuridad y os dirá el tiempo que les queda.
Cuando el abuelo se va Pesquis y Baliga se ponen a temblar de miedo y se preguntan qué pasará.
Al cabo de poco de poco tiempo se encuentran a un hombre saliendo de las alcantarillas, lleva un chaleco verde.
Id con cuidado. Pasad por detrás de la valla – les dice el hombre.
Mira el hombre de la cueva – dice Baliga.
Y este es el ojo que todo lo ve – dice Pesquis indicando el cartel de una óptica.
¡Si! – responde Baliga-Aquí tenemos el ser de color verde.
¡Hola niños! – Dice el ser de color verde.
El ser de color verde es una señora que pronociona gafas de sol y les dice que la vista se tiene que proteger todo el año. En ese momento Pesquis se da cuenta, al ponerse las gafas, que ha llegado la oscuridad.
Pesquis i Baliga con sus gafas empiezan a caminar.
Las podéis enseñar a vuestros padres. Teneis una hora para probarlas. – Dice la señora vestida.
El tiempo que nos queda – Le responde Pesquis.
¡Aquel trotamundos es genial! – Dice Baliga.
LA PLANTA CARNÍVORA COMEBOCADILLO
Pesquis y Baliga decidieron ir al Parque Nimalia a pasar las vacaciones de verano.
– ¿Vamos a hacer un bocadillo? – Pregunta Baliga
– Mira una planta carnívora – le dice Pesquis.
Baliga quiere un bocadillo de longaniza seca y Pesquis también.
Cuando Pesquis pasa por el lado de la planta carnívora, la planta se come su bocadillo, Pesquis se asusta y dice:
– Nunca me había imaginado que las plantas carnívoras se comían los bocadillos de longaniza seca.
Baliga dice:
– Creo que esto es una engañifa para dar de comer a la planta, ahora verá.
Baliga se va hacia el vendedor y dice:
– ¿No le molesta, verdad, si me pongo sal y pimienta?
– ¡No, y ahora! ¿Te gusta muy fuerte, eh? – Responde el camarero.
Ella se acerca hacia la planta.
– Para ti bonita, toma – dice Baliga a la planta.
La planta se lo come y empieza a ponerse roja y le sale humo por la boca.
La planta ve la limonada del vendedor y se pone a beberla.
– ¡Ei! ¡QUe se me bebe la limonada! – dice el vendedor.
Baliga ve un cartel en el que dice que no se puede dar de comer a los animales y ella añade con un rotulador y a las plantas tampoco.
– Mira – dice ella.
Pesquis se ríe a carcajadas.