Dos, siempre dos. ¡Casi siempre!. En unos casos, vemos una cosa y su contraria. Vemos que la realidad es un conjunto de pares contrarios: La tesis y la antítesis, los antígenos y los anticuerpos, el nacionalismo de Vox y el nacionalismo de Puigdemont.

Unas veces vemos pares de contrarios y otras vemos simetría. Esa simetría tan abundante en la naturaleza, esa simetría de dos partes iguales que se podrían superponer, que significa salud, y belleza.

Seguramente, lo uno y lo otro, se pueden incluir en una explicación común. Seguramente.

Yo quería centrarme en Vox y Junts, dos partidos nacionalistas contrarios. El nacionalismo independentista catalán provocó el crecimiento del partido de Abascal. Y lo contrario: Vox en el gobierno, podría provocar el crecimiento del independentismo. Y quería centrarme también en los dos almas del primero y en las dos de segundo. Los moderados y los extremistas.

Los extremistas de VOX, seguramente dicen que, ella es tan culpable como Rubiales, y que el rescate de los migrantes que se lanzan al mar buscando nuestra costas, no les gusta. . Los extremistas de Puigdemont, seguramente aplauden el boicot a la vuelta ciclista y cualquier acción contra el estado español, del que no quieren formar parte.