El jueves 30 de octubre celebramos la fiesta del terror.
La clase 4 daba miedo porque estaba toda oscura. La clase se convirtió en un museo del horror. El Guillem se disfrazo de fantasma y estaba debajo de una caja escondido. La Mini se disfrazo de calabaza con una bolsa de plástico de color naranja. Encima de la mesa había calabazas y una bruja.
Los visitantes del museo se paraban a cada niño, se asustaban y se iban corriendo de la clase.
Me lo pase muy bien. 😆
María José Florensa Moyano