
Hay besos de caramelo,
dulces como una sonrisa.
Y están los besos con prisa,
que hay que cogerlos al vuelo.
rozándote las mejillas
¡pueden hacerte cosquillas!
y son de color de rosa.
tan calentito y tan tierno
como una manta en invierno,
¡es un beso de algodón!
que te pilla de sorpresa,
y, además, el que te besa
puede estar en cualquier lado?
Carmen Gil