Hay un bosque frondoso con un río que pasa por el medio. Allí la luz penetra poco a poco, porqué los árboles juegan a no dejarla pasar. Los pinos son muy altos. Sus copas están tan erguidas que parecen los sombreros de las brujas. El rio es ancho y profundo. Sus aguas están tan tranquilas que parecen el sueño de un bebé. El propio bosque se refleja en sus aguas como si fuera un espejo gigante.


Que bonic!