¡No hay modo de adivinar
que rumbo van a tomar!
¡Imposible averiguar
dónde nos van a llevar
o el río a desembocar!
¡Ni una luz se ve brillar
el peligro va a llegar!
Los remeros a remar
no se dedican a cesar.
Y, por cierto, sin mostrar
signos de querer olvidar…
Maria Salse