Políticos , nos fastidiáis la vida un montón, nos queréis hacer creer que os importa nuestro bien pero eso no es así pues cada vez más, llegamos menos a fin de mes, y el paro no para de crecer , a ver si eso lo arregláis pues la cosa esta muy mal.
Políticos, nos fastidiáis la vida un montón, nos ponéis la zona azul, la zona verde también, a impuestos nos moléis y vosotros vivís muy bien, y lo demás os da igual, pues solo hacéis el papel, a ver si eso lo arregláis, pues la cosa esta muy mal.
La justicia esta fatal y hacienda no para de embargar. La seguridad social cada vez esta peor.
Políticos, nos fastidiáis la vida un montón, en vez de al pobre ayudar cada vez le hundís mas, al rico mas le ayudáis, en vez de hacerlo al revés que es lo que deberíais hacer apoyar al trabajador, a ver si eso lo arregláis pues la cosa esta muy mal.
A ver si algún político me hace caso y empieza a arreglar las cosas que están mal. Saludos
Post data: por culpa de la maestra la letra ha sido censurada 😉 y ésta es parte de la canción compuesta por mí. Hasta pronto
Navegando un día por los mares de la red encontré esta página que, al principio creía que era un blog más de los millones que existen en la actualidad.
Buscaba documentación para un pequeño proyecto, que día a día crece y se transmuta en una pequeña posibilidad real. Lo cierto es que buscaba referencias de un libro titulado Narcolepsia.
Trataba de conocer y documentarme sobre el mundo de la delincuencia y los motivos para llegar a ella. La idea era entresacar de ese entorno delictivo a algún individuo que me sirviera como paradigma –y protagonista- de la idea globalizada que se tiene sobre las personas que viven –y sobreviven- en un mundo poco conocido por el resto de la sociedad, salvo por las manidas películas de gangsters.
Encontré la página del autor, Jordi Ledesma, y me sorprendió el blog “Un rato en el trullo”. Debo confesar que en ese momento me llené de envidia porque él había podido hablar con todos mis potenciales “protagonistas”.
“Pinché” el enlace hacia el Pau Casals y no sé qué me ha pasado desde entonces que me he quedado hipnotizada con todo lo que allí se dice y se hace.
Creo que he leído el “bloc” entero: artículos, tertulias, poesías… ¡Y todo es de los internos!
De esta lectura, la impresión que saco es que hay un grupo de personas con un catálogo de errores cometidos en el pasado (algunos terribles) que tratan de sobrevivir a las circunstancias de su internamiento, poniendo de manifiesto (incluso expresando poéticamente) la parte de su “yo” que quedó intacta en el momento de la comisión de su delito y que no es otra que la de su maltratada humanidad.
El bloc del “Pau” rebosa de buenos sentimientos y también de mucha tristeza. Perder la libertad por un imperativo legal debe ser de las cosas más amargas (las hay muchísimo más amargas) que les puede pasar a las personas. Creo que es aquí, cuando el interno interioriza su culpa y comprende que está devolviendo a la sociedad lo que en algún momento arrebató, el momento en que el delincuente se empieza a transformar en una nueva persona (¿quizás mejor?)…
Me gustaría que mi protagonista fuese del tipo de personas que escriben en el blog y ¿por qué no?, que además se enamorara (las historias de amor me fascinan).
Casi sois mis amigos y a los amigos se les ayuda, ojalá que podamos seguir intercambiando ideas, pero sobre todo, ánimo para que cuando caigas te levantes con más fuerza.
Sé que por mucho que trate de empatizar con vosotros nunca veré las cosas “desde el mismo ángulo” (bueno, nunca se puede decir de esta agua no beberé), pero siento que en ese centro hay mucho amor y eso es un buen principio para comenzar de nuevo (en la vida nos tenemos que “resetear” algunas veces).
P.D.1: Todavía queda mucho delincuente suelto, que se gasta trajes de Armani y sale en la TV sin el menor pudor, a por ellos también hay que ir, porque estoy segura de que directa o indirectamente también son corresponsables, en ciertos casos, de que estéis ahí.
P.D.2: Mikemetal, tienes que preguntar a tus profesoras el porqué la censura tiene su parte positiva, estoy segura que te hablarán de cómo los artistas en general, la sorteaban en el franquismo y cómo esto hacía que sus obras se enriquecieran con giros inesperados, nuevas palabras (La colmena), signicados y significantes confusos, que a la postre lo que hacían era volver loco al censor de turno.