Cicatrices

Le dije una vez que no

a la segunda ya no pude negarme,

tenía la palma de su mano

marcada en mi cuerpo.

En lágrimas acabé,

con los ojos ensangrentados

y mi cara marcada,

como manchas de amor

Me veía débil

pero pensé que él no era así.

Creía que eran cosas de amor

y le eché coraje.

Acabé cogiendo las riendas,

con valentía.

Afronté mi realidad

el amor no és dolor

y no debes de consentir,

que nadie te golpee.

Pseudònim: Dalorca

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