LEE MUCHO Y (NO) ESCRIBIRÁS MEJOR – Janett Uriol E41

Esta mañana he entrado en mi correo electrónico y he visto que Jordi nos había enviado un e-mail sobre un artículo que ha encontrado en la prensa digital y ha decido comentar en el blog Debats Sert. Me ha parecido muy interesante, de manera que lo he leído y me ha gustado mucho. Pero esta entrada no está dedicada a dicho artículo, que tengo la intención de comentar en el otro blog cuando pueda ver el vídeo de la conferencia TED y así estar mejor informada, sino para hablar sobre otro artículo que estaba adjunto en la entrada que ha hecho Jordi. No está muy relacionado con historia, pero va sobre temas que me encantan y de los cuales casi nadie se había dado cuenta. De manera que he pensado que estaría bien dedicarle un tiempo y escribir una entrada sobre él.  Se trata de este artículo:

Se basa en que durante muchos años el mito de ”Si lees, escribirás mejor” se ha ido profanando generaciones tras generaciones y hoy podemos demostrar que no es así.

”A escribir se aprende escribiendo”, dice una frase del filólogo Américo Castro, con la cual estoy totalmente de acuerdo. Nos dicen que si leemos mucho, sabremos escribir mejor o que leer nos animará a querer escribir nuestras propias historias, pero ¿cómo vamos a sentirnos seguros de nuestros textos si no nos enseñan más que análisis sintáctico y ortografía? Pienso que es importante, por supuesto, pero un buen texto no se basa solo en las subordinadas que utilices ni en el vocabulario técnico. Si hay jóvenes que dudan en si han escrito bien o si están bien construidas las redacciones que nos piden para clase, ya ni hablemos de los que se deciden por escribir narrativa. Además, la mayoría de estos adolescentes que se lanzan a escribir sus propias historias, tienden a imitar el estilo de obras que leemos para lectura obligatoria en el Instituto, que como bien dice el artículo, gran parte de ellas se corresponden al barroco.

Cito textualmente: “Los jóvenes tratan de escribir barroco porque es el estilo que se les enseñan en el instituto con los autores del Siglo de Oro”, dice Janer.

Pienso que si queremos difundir la lectura y la escritura creativa, se debe empezar desde la escuela. Está bien que leamos literatura clásica, pero no es un género que enganche a los jóvenes a seguir leyendo, ya que su estilo es complicado y la mayoría de ellos no entienden ni la trama de la historia. Así bien, pienso que si leemos tres libros cada curso, al menos una de esas lecturas debería ser actual, de literatura juvenil, pero que no se base solo en el romance o el misterio, sino que indirectamente también exprese nuevos valores a los jóvenes y se enriquezcan con la lectura.

Finalmente, me gustaría que retrocediéramos al principio de mi entrada, exactamente al título, porque quiero justificar mi opinión respecto a la frase ”Lee mucho y escribirás mejor”. No estoy de acuerdo con ella porque tal vez leeremos muchas historias, pero no nos fijaremos en el estilo del autor y qué técnicas usa para captar nuestra atención con sus palabras. Leeremos el libro del tirón y nos quedaremos con la trama, eso probablemente hará que nuestra imaginación se desarrolle más, pero nuestra escritura no mejorará. Pienso que para escribir buenos textos hace falta practicar y ser corregido muchas veces y eso es algo que en el colegio no nos enseñan. Es decir, hoy en día nos mandan escribir tres o cuatro redacciones durante todo el curso sobre textos argumentativos o jurídico-administrativos, pero no pequeños relatos que desarrollarían nuestra creatividad, así como la mejora al mismo tiempo del vocabulario y la gramática.

Janett Uriol, E-41.