El mar

Necesito del mar porque me enseña:
no sé si aprendo música o conciencia:
no sé si es ola sola o ser profundo
o sólo ronca voz o deslumbrante
suposición de peces y navíos.

El hecho es que hasta cuando estoy dormido
de algún modo magnético circulo
en la universidad del oleaje.
No son sólo las conchas trituradas
como si algún planeta tembloroso
participara paulatina muerte,
no, del fragmento reconstruyo el día,
de una racha de sal la estalactita
y de una cucharada el dios inmenso.

Lo que antes me enseñó lo guardo! Es aire,
incesante viento, agua y arena.

Parece poco para el hombre joven
que aquí llegó a vivir con sus incendios,
y sin embargo el pulso que subía
y bajaba a su abismo,
el frío del azul que crepitaba,
el desmoronamiento de la estrella,
el tierno desplegarse de la ola
despilfarrando nieve con la espuma,
el poder quieto, allí, determinado
como un trono de piedra en lo profundo,
substituyó el recinto en que crecían
tristeza terca, amontonando olvido,
y cambió bruscamente mi existencia:
di mi adhesión al puro movimiento.

Pablo Neruda

Pablo Neruda ( Parral, Xile 1904 – Santiago de Xile 1973 ), pseudònim de Ricardo Eliezer Neftalí Reyes Basoalto, fou un poeta i diplomàtic xilè guardonat amb el Premi Nobel de Literatura l’any 1971.

Por qué esto ,es una redacción.
Tengo que escribir una redacción, no será como una película, no sonara la característica música de las películas , de Disney, ni se oyera caer a los personajes, ni la música de las estrellas. No abra un narrador que diga con voz grave pero simpática: -Existe un lugar distinto a cualquier otro.. lleno de maravillas, misterios y peligros. No vas a reconocer la voz del doblaje de ese actor, que hace unos años ni tan solo sabias quien era y que ahora sin poder-lo remediar te proporciona un extraño sentimiento de acercamiento, de confianza y de conocimiento. No veras ese trailer, con los mejores momentos de la película, con la mejor música, y no te dará esas ganas de ir a ver-la. No veras ese paisaje tan peculiar, que el director explícitamente ha pensado para aquella escena de amor, ni las luces, ni podrás sentir el olor a colonia de la chica, ni la humedad de los labios en el chico, no veras los colores estridentes, de esos globos elevar-se. No veras un chico volar por encima de la ciudad, en el primer plano de la cámara y por detrás todo Londres, mientras se apoya en el Big Bang. No podrás palpar la textura, de aquellas telarañas que desprende el superhéroe que intentan hacer ver a los chico , con él, que la bondad existe. No veras los diminutos granos de arena, en una tormenta perfecta en el desierto, ni sentirás lo que siente una persona al estar en esa terrible situación. No veras el típico gordote simpático con voz de chica grave. Ni sentirás el peso en la barriga de las tres hamburguesas que se come. No sentirás la espectacular música y el logo de la empresa que hace la película, al empezar-la. No vas a oír esa canción que de navidad, que casualmente queda tan bien con la nevada que cae, y los copos en forma de estrella, con las luces de colores borrosas al fondo. No te harán ver como los hombres odian el compromiso y las chicas les encanta el romanticismo(o quizás no). No veras el sarcasmo inculcado a los personajes, que les produce ese humor tan singular. No sentirás que vuelas. No veras esa actora de 26 años que le hacen pasar por una chica de 15, y que es un ídolo, para millones de niñas. No veras eso que parece empezar en una trilogía, y al ser un éxito en taquillas, hacen mas, mas y mas hasta aburrirte. Y al contrario. No veras esa película que prometía ser tan fantástica y no lo es, y no te va a decepcionar. No sentirás ese temblor en la barriga al ver que aquel actor que te gusta se declara, a la actriz. No veras las hojas caer al pasar ese hombre-mono por esa rama, ni sentirás como crujen a sus pies. No sentirás el viento golpearte en la cara, ni el pelo tirando para atrás al navegar en aquel barco. No podrás conocer esa canción, que te proporciona tan buenos, sentimientos, y te hace pensar en el momento que el le dice a ella- confía en mi. No sentirás la esperanza, al ver que la historia de aquel personaje tan singular, acaba lo mejor posible, aunque muera. No veras ese niño de 1 año con los mofletes rojos y seguramente gordos, y casi palpables. No sabrás jamás si esos ojos son realmente verdes pino, o verde césped. No podrás creer que algún día un chico te llenará la oficina de tulipanes (tus flores favoritas) tan solo para poder ver-te reír. No sentirás el dolor de esas personas torturadas psicológica i física mente. No veras pasar, como un chico pasa , en una canción, a ser un débil, a un genio como ninguno. No te sorprenderás con ese inesperado echo. No gritaras al aparecer la vieja sangrienta por detrás. No veras esas sombras e ilusiones de gente bailando en un salón que en la escena aparece destrozado. No verás el terrible monstruo que acecha el pequeño pueblo. No oirás la voz de ese pececillo tan simpático que pierde la memoria a los diez segundos. No veras como el héroe rescata su damisela en apuros. No viras historias, que jamás pensabas que vivirías, no conocelas ese mundo tan estúpidamente perfecto.
No crearas en la magia; No lloraras; No reirás…
-¿O sí?

Autor: Anónimo