El texto narrativo nos permite contar cosas. Cosas reales, que nos han ocurrido a nosotros o a otros; pero también cosas ficticias, extraídas de nuestra imaginación, historias hechas de palabra con las que pretendemos por encima de todo entretener nuestros ratos de ocio, y también enseñar con el ejemplo. Cuando presenciamos algo que ocurre en la calle, un accidente, un altercado, una manifestación, y lo contamos a otra persona, estamos narrando. Si lo que hacemos es hablar sobre un personaje que no existe y de sus peripecias en un mundo que tampoco existe, estamos narrando. La narración es parte fundamental de la comunicación, porque la usamos constantemente. Con todo, no cualquiera está capacitado para narrar bien una historia. Los hay que nacen con esa aptitud y acaban convirtiéndose en escritores o en excelentes narradores orales. Los más, sin embargo, tienen que hacer grandes esfuerzos para ordenar los hechos y contarlos de tal manera que no aburran al receptor de la histora. No es fácil contar bien. Intervienen muchos elementos en el texto narrativo. Elementos que debemos dominar si lo que deseamos es elaborar un buen texto. Para que podáis conocer esos elementos, ya trabajados en clase, tenéis a vuestra disposición una serie de enlaces agrupados bajo la etiqueta Llista de blocs, en los que hallaréis información sobre los tipos de texto, y también ejercicios que os ayudarán a asimilar mejor la terminología utilizada y el concepto que se esconde tras ella. Ánimo.
El texto narrativo
Leave a reply