En la playa, dibujo sobre el lienzo de la desgracia el rostro de la felicidad, oculto mi cabeza, quiero ahogarme en mi pena. No hay peor dolor que tenerte tan cerca y no poder alcanzarte. Todo lo que quiero en el mundo es tan solo seguir hablando contigo. Quiero saber cómo es tu día, dónde te apetece comer… Quiero discutir contigo y quiero oír todas tus teorías, incluso aquellas que estén completamente equivocadas. Quiero que sepas que, si eres de las que creen en el destino, el nuestro está escrito; si eres más de las que creen en las coincidencias, te diré que eres la casualidad más hermosa que he podido tener. Parece ilógico que las personas que más amamos sean las más capaces de herirnos profundamente, que la única forma que puede hacernos sentir verdaderamente vivos sea darle a otra persona el poder de destruirnos. He estado enamorado de ti como lo sigo estando, y es un dolor que no le deseo a nadie. Lo que me rompió el corazón no fueron todas las discusiones que tuvimos, sino el adiós. No hay nada más triste , un hasta nunca tiene su límite en la negación , pero a un adiós lo define su indefinición. ¿Ha de existir un hasta cuando… o un hasta que…? Sin ti, nada es igual; pero, contigo, nada sería lo mismo tampoco. Acaso estar juntos fue un error, pero separarnos es la mayor de las equivocaciones. Puede que suene masoquista, pero no me importaría sufrir para tenerte de vuelta.
Pongo punto final a la carta esperando que no sea el punto final de todo. Levanto la mirada hacia el mar, tan tranquilo que hace pensar que todo alrededor está bien, aunque el mundo se esté derrumbando. Supongo que es lo que tiene Lloret de Mar, hace que te distraigas, aunque solo sea un instante.
Hi havia una vegada un pescador que es va casar amb la dona més maca de la costa mediterrània. El seu amor era més fort que mil tempestes. Però amb el pas del temps el seu amor, tan gran es va anar deteriorant a mesura que passava el temps per culpa de la temptació.
Náufrago yo soy,