Me llamo Aboubaker. Ahora vivo en Cornellá y estoy estudiando en un instituto.. Ahora voy a hablaros de un niño que era muy malo jugando a fútbol. Era muy malo chutando y muy malo parando. Parando la pelota, quiero decir..
Este niño, empezó a entrenarse cada día.. Cada día se entrenaba, cada día jugaba y fué mejorando su forma de jugar..
Un día jugó contra sus compañeros. Todos contra el niño. Y el niño ganó. Todos los que lo veían jugar decían lo mismo: “Este niño es un jugador magnífico!”. “Muy bueno!”….