Yo tenía un año y medio.
Mis padres querían que aprendiera a decir papá y mamá, con lo cual no paraban de repetírmelo. Yo no entendía nada.
Pero un día, se me ocurrió la magnífica idea de imitar sus palabras para divertirme, supongo.
Dije esas extrañas palabras que constantemente oía, y…
¡madre mía! Se pusieron todos tan contentos que parecía que nos hubiera tocado la lotería.
Yo desde entonces, cada vez que veía pasar a mi padre o a mi madre se lo decía.
Pero la lástima es que ya no tenía esa misma gracia que cuando lo dije por primera vez.
Verónica Arjona
Mbb vero! pero tio,, te podias aver lucio un poko mas! k la as exo cortiy eh! jaja
wenu, esta mb x eso te felicito ombre!jaja
PDTA 1: mbmbmbmbmbmb
PDTA 2: Ana! sorry, ya no podia mas y e tenio k scribirlo asi…borralo si kieres jja