Ayer, hablando con mi abuela, me dijo una frase que me llamó la atención especialmente: no tengo una perra, refiriéndose a que no tiene dinero.
Muchas veces lo había oído, pero nunca me había interesado por su significado. A sí que como me encontraba en una comida familiar aburrida, por curiosidad me puse a buscar y encontré que tiene que ver con el siglo que justamente nos hemos examinado.
Su significado es el siguiente:
Su origen está en el 1868 con la creación de una nueva moneda oficial por el gobierno provisional, liderado por Serrano. Desde el reinado de Fernando VII había un déficit crónico de la hacienda pública y además también había intenciones de unificar la moneda. Esta era la peseta.
Ambas monedas, las de 10 y las de 5 céntimos son a las que se debe el famoso dicho. Ambas llevaban grabadas en la cara un león rampante que sostenía un escudo de España(como se puede ver claramente en la foto), como la población de entonces no lo llego a entender asociaron este felino con un perro grande. A si la moneda de valor mayor(10 céntimos) la llamaron la perra gorda y por contraposición a la menor(5 céntimos), la perra chica