Arxiu d'etiquetes: Francisco Franco

La utopía de Hitler: España como cuarta potencia del eje. Por Antoni-Guillem

A veces los hechos históricos, la historia misma, no es la que uno cree. La relación entre Franco y Hitler es un claro ejemplo. Aunque un alto porcentaje pueda creer que la relación entre la España franquista y la Alemania nazi fuera amistosa, cordial y estrecha, ese porcentaje estará equivocado. El grado de error cometido en esta creencia es grande, enorme. Pues el Führer acabó diseñando un plan para desalojar del poder al dictador español.

Todo empezó cuando ambos dictadores se reunieron en la estación de tren de la localidad francesa de Hendaya el 23 de octubre de 1940. Adolf Hitler, exigió en esa entrevista a Francisco Franco la absoluta participación en la Segunda Guerra Mundial posicionando a España en el bando de las Potencias del Eje. Hitler daba por hecho que Franco acabaría cediendo, sintiéndose obligado a ceder, debido a que Alemania lo había apoyado con el envío de la Legión Cóndor al finalizar la Guerra Civil.

A pesar de las exigencias por parte de Hitler, el dictador español no estaba dispuesto a entrar en el conflicto internacional y tan sólo se comprometió a enviar una unidad de voluntarios, la División Azul, y apoyar la invasión de Gibraltar que, finalmente, no se llegó a producir. La respuesta dada por Franco, nada clara y de total ambigüedad, sorprendió negativamente a Hitler.

A raíz de lo sucedido, Hitler comenzó a maquinar una estrategia firme y seria para derrocar a Franco y sustituirlo por alguien que fuera de su confianza: Agustín Muñoz Grandes. Grandes era un falangista que había ocupado el cargo de Ministro secretario general del Movimiento y que, en esos momentos, comandaba la División Azul.

Grandes y Hitler negociaron en 1941 el plan del Führer. Cartas sobre la mesa, el militar español veía con buenos ojos la propuesta ya que, él también consideraba que la implicación de España en la Segunda Guerra Mundial debía ser absoluta.

Sin embargo, Muñoz Grandes presentaba discrepancias acerca de derrocar a Franco ya que consideraba que tenía gran carisma. Su intención era convertirlo en un Jefe de Estado de paja y colocarse él mismo como Presidente del Gobierno para manejar el poder legislativo en función de Alemania.

No obstante, los rumores de este intento de casi golpe de Estado llegaron a los oídos de Franco. Como medida de prevención, hico regresar a Muñoz Grandes a Madrid, lejos de los nazis, fue ascendido a Teniente General a la vez que se lo designaba jefe de la Casa Militar de Franco además de una promesa de un alto cargo del ministerio.

La maniobra de Franco funcionó con éxito haciendo que Grandes jurara lealtad inquebrantable al Caudillo. Como consecuencia de esta decisión favorable a Franco, ocupó cargos como Ministro del Ejército o la vicepresidencia del Gobierno.

“Si no puedes con tu enemigo, únete a él”

Fuente: ABC

 

 

Francisco Franco vs Napoleón Bonaparte por Álvaro Martínez

Vamos a comparar a dos figuras muy importantes dela historia como fueron: Napoleón Bonaparte en Francia y Francisco Franco en España.

Es difícil darse cuenta de lo mucho que se parecen estos dos y por ello a continuación lo vamos a demostrar:

                        

            Francisco Franco

 

    Napoleón Bonaparte
                País                     España                      Francia
Edad con la que fueron general                     34                        26
Golpe de estado 17 Julio 1936 9 Noviembre 1799
Cargo Dictador, generalísimo o caudillo de España Primer Cónsul y Emperador de Francia
Fin mandato 20 Noviembre 1975 4 Abril 1814

Carmen Polo, la musa del tirano. Por Antoni-Guillem

Carmen Polo fue el nombre que todos los libros de historia olvidaron, el nombre del que nunca se habló ni tampoco se recordó. Quizás será porqué se mantuvo a la sombra del dictador, pero era tal la influencia de Polo, que llegó a doblegar la voluntad de Franco a la hora de tomar decisiones cruciales.

Persuasiva, provocadora y ambiciosa. La primera dama de Meirás, la esposa del Generalísimo, supo mover sus fichas, sabía pugnar al juego del poder. Era una jugadora nata. Carmen Polo hizo planes para convertir a su nieta, Carmen Martínez Bordiú, en princesa y futura reina de España, influenció en las decisiones políticas de su marido y se colocó a la vanguardia de un clan familiar parecido al de la Casa Real.

En el momento de nombrar al presidente del gobierno, Polo se encargó de persuadir a Franco para que Arias Navarro fuera el elegido. Cuando su nieta Carmen Martínez Bordiú volvió de su luna de miel, Carmen Polo la recibió en el aeropuerto con un “alteza”.

La figura de Polo destilaba poderío, pero no siempre fue así. El ascenso de Franco al poder hizo que Carmen pasara de ser una joven, sociable y abierta, asustada y siempre preocupada por su marido a una primera dama altiva, calculadora y fría. Cuando la pobreza y el hambre se extendió como la peste negra por España, la señora de Franco se creó su propia burbuja en El Prado con su propia gente que la admiraba y halagaba, dónde se hacían fiestas y meriendas de alta clase.

Con la muerte de su marido y la caída de un imperio dictatorial, la dama de Meirás aceptó con resignación y amargura la caída del régimen.

Si hay algo que, tanto los detractores de Carmen como sus defensores, están de acuerdo es en su afición a la joyería hasta el punto de convertirse en algo enfermizo. Su obsesión se intensificó, sobretodo, tras la muerte de su marido. No sólo las coleccionaba sino que lo adornaba todo con ellas, se emperifollaba hasta llegar a un punto barroco y recargado. Además de esta afición, otra cosa que la caracterizó fue su afición a ir a misa, era una beata del cristianismo.

Sin embargo, la estirpe de la que fue una de las familias más influyentes de la España de segunda mitad de siglo XX se ha consumado, se ha reducido a cenizas y escombros. Todo al ahínco y esfuerzo que depositó Carmen, su devoción por su familia, ha dado como resultado unos frutos podridos. Sus nietos han hecho todo lo contrario a lo que el franquismo promulgaba, uno de ellos ha reconocido su adicción a las drogas, otros se han divorciado y, lo peor de todo, ninguno de ellos ha admitido, siquiera indirectamente, el carácter dictatorial del régimen de su abuelo, Francisco Franco.

El 6 de febrero de 1988, la dama de Meirás falleció de una bronconeumonía. Enterrada en un panteón ubicado en el Cementerio de Mingorrubio (El Prado), el declive del imperio llegaba a su último estadio: la desintegración de la gran estirpe.

http://www.generalisimofranco.com/Album/carmen1/006a.jpg