¿Qué me dices?: Especial Isabel II por Mar Parejo y Mireia Marquínez B21

Isabel nació el diez de octubre de 1830 en Madrid. Su padre era Fernando VII y su madre María Cristina de Borbón-Dos Sicilias, que era la cuarta esposa del rey y que además era su sobrina carnal. En sus tres anteriores matrimonios no habían dado descendencia a Fernando VII. Después de tener a Isabel II tuvo otra hija, la infanta Luisa Fernanda que nació en 1832.
Sé que os estaréis preguntando qué tiene de interesante la vida de esta reina en comparación a las demás. De momento solo añadiré que una de las razones por las que fue echada del trono era que, aparte de ser una pésima reina, aireaba todos sus amantes sin disimularlo, la cual cosa era una vergüenza por aquel entonces. Aunque no adelantemos acontecimientos, empecemos por el principio.
Isabel fue obligada a casarse con Francisco de Asís, hijo del Infante Francisco de Paula y de Luisa Carlota, que era además primo hermano de la reina. Francisco de Asís era conocido por su fama de homosexual, incluso una copla popular decía de éste:
Gran problema es en las Cortes
Averiguar si el consorte
Cuando acude al excusado
Mea de pie o mea sentado

Su noche de boda fue un fracaso. Es conocido el comentario que hace Isabel II al diplomático León y Castillo “que voy a decir de un hombre que en la noche de bodas llevaba en su camisa más bordados que yo en la mía”.
La vida de Isabel II se basa en una fiesta continua. Se acostaba a las cinco de la mañana y se levantaba a las tres de la tarde. Este modo de vida levantaba fuertes críticas en la sociedad española. Tuvo 14 amantes reconocidos, el primero de ellos fue el general Serrano y producía un auténtico escándalo porque la reina lo perseguía por todos los cuarteles de Madrid. Llegó a tal nivel el escándalo, que el ejército decidió trasladarlo fuera de la capital. Entre los demás destacan el capitán José María Arana y el general O’Donnell. En la primera relación hay una anécdota que su marido Francisco de Asís, un día le dijo a la reina que tuviera cuidado con José María Arana, que le estaba poniendo los cuernos. También hay que destacar la anécdota de que en el año 1860, O´Donnell va a despedirse de Isabel II antes de iniciar una nueva guerra en Marruecos, la reina le dice cariñosamente que si ella fuera hombre iría con él. Francisco de Asís que estaba presente, añadió “lo mismo te digo O´Donnell, lo mismo te digo”.

Mientras todo esto sucedía, Francisco de Asís y Borbón tuvo un amigo, Antonio Ramón Meneses, con el que convivió toda su vida. Ante los continuos amantes de Isabel II, los asumió con naturalidad. Por el reconocimiento de la paternidad de los hijos de Isabel II recibía a cambio un millón de reales por hacer la presentación de cada uno de ellos.
Acabamos diciendo que Isabel fue una mujer sin gran personalidad y con total falta de libertad siempre siendo juguete de los intereses políticos, religiosos y que su única expansión fueron sus amantes los cuales la utilizaron para conseguir sus propios fines.