LA TERTÚLIA DEL QUART PIS

El 25 de este mes ya hará 9 meses que estoy con Dan, no creo que os interese este tema, pero como me toca escribir algo aquí, prefiero que sea sobre él.

No sé si a muchos os parecerá que nueve meses son demasiado tiempo con la misma persona, pero para mi, se han pasado volando.

No hay un solo día que no piense en él, y creo que no hay nada malo en eso. Ahora es la época de salir de fiesta por ahí, y tal, pero si os soy sincera prefiero mil veces estarme en casa mirando una película con Dan, o ir a cenar a algún lado, que no ir una discoteca con tíos pesados, olores desagradables, gente borracha o que se lo hace para ir de guay y todas esas cosas. No creo que me esté perdiendo nada interesante.

Si la adolescencia pensáis que es solo juerga y juerga, estáis equivocados, es un tiempo de cambios y de conocimiento de uno mismo, y yo ya me he conocido lo suficiente como para saber que lo que quiero es estar con él lo máximo posible.

Puede que de aquí a unos años ya no estemos juntos y que me arrepienta de todo lo que estoy diciendo, pero ahora tengo fe en mis palabras.

Dicho esto, os explicare nuestra historia: nos conocimos en la feria, cabe decir que nuestra primera conversación fue algo estúpida:

Dan: -Hola, quieres piruletas?

Cris: -No, engordan y salen caries.

Dan: -Estas son especiales, llevan en mi bolsillo mucho tiempo.

A simple vista parecía un chico corriente, de esos adictos al skate, y de largas cabelleras sucias, eso sí, tenia los ojos más bonitos que había visto nunca, y no se por qué, pero me gustó.

Nos fuimos conociendo más y más, y vimos que teníamos muchísimas cosas en común, hasta que un día me dijo que había tenido un accidente de moto y que estaba en el hospital. Ahí fue cuando me di cuenta de que era mi mundo. Desde aquel momento hice todo lo posible para que estuviéramos juntos, y al final así fue.

Siempre he estado a su lado, y él al mio. Hemos tenido muchos problemas para poder llegar a ser lo que somos ahora, pero al final, cuando lo veo sonreír cada vez que me ve, y que a cada beso me demuestra lo mucho que quiere, sé que todo ha valido la pena.

Mañana martes comeré con él, y le contaré que he escrito en el blog del instituto sobre nosotros, seguro que se pondrá muy contento, verlo sonreír es lo que más me gusta, sobretodo cuando sé que la razón de su sonrisa soy yo.

Teiubesc Danuts.

Suntem unu.

Cristina