COMPRENSIÓN LECTORA
-Leer primero las preguntas.
-Leer el texto dos veces como mínimo; la segunda, más lentamente que la primera. Marcar allí donde detectemos que hay una respuesta.
-No contestar ninguna pregunta de memoria. Ir siempre al texto a comprobar la contestación.
REDACCIÓN.
-Ajustarse al título.
-Escribir con un orden o siguiendo un esquema (es aconsejable aprovechar el espacio para borrador).
-Utilizar nexos y no componer frases muy cortas ni muy extensas.
-Usar un vocabulario variado.
-No cometer errores ortográficos.
-RELEER MÁS DE UNA VEZ LA REDACCIÓN CON LA INTENCIÓN DE MEJORARLA (buscar fallos, como si la hubiese escrito tu peor enemigo).
Los avances científicos. Oportunidades y riesgos.
La ciencia ha acompañado a la humanidad desde las primeras civilizaciones; a medida que ha pasado el tiempo, también lo ha aumentado la calidad de de vida de la civilización, pero ¿somos conscientes de todo lo que este progreso puede comportar?
Por una parte, la ciencia ha mejorado notablemente las condiciones de vida de gran parte de los seres humanos, y es de esperar que lo siga haciendo. Es lógico que el futuro nos depare grandes avances científicos que repercutan en la vida cotidiana; entre ellos, la cura de algunas enfermedades que actualmente no tienen solución y la creación de nuevo artilugios tecnológicos que nos acompañarán en el día a día. Sin embargo, también es verdad que desconocemos el peligro de estos prodigios; quién sabe si el planeta podrá soportar una continua explotación, o si estaremos contaminándolo más de lo tolerable o alterando algunos elementos naturales como su clima.
En consecuencia, la capacidad de progresar en el conocimiento y en las aplicaciones de la ciencia es un gran logro. No obstante, se ha de procurar que una visión humanística gobierne estos avances, que podrían acarrear consecuencias negativas en el caso de ser implementados descontroladamente.