Author Archives: jborja

Un día con mucho estrés

Hoy me he levantado temprano, para poder estar maquillada y peinada, porque a las 9 de la mañana tenía que estar en el centro comercial. Había quedado con las compañeras de clases de baile. Luego cogimos los coches y fuimos a Olesa de Montserrat. Cuando llegamos estaba lloviendo mucho y tuvimos que coger los paraguas para no mojarnos. Una vez  llegamos, fuimos a cambiarnos a una sala que había en la casa cultural y luego cuando nos tocaba bailar salimos al escenario. Era un poco pequeño para nuestro baile pero al final pudimos bailar bien. Fueron muchas horas de viaje para sólo bailar 5 minutos, pero al fin y al cabo, disfrutamos mucho bailando y viendo las otras actuaciones.

 ¡Espero veros en el próximo festival de danza, que haremos en Anglés!.

Nora.

UNA TARDE EN GIRONA

El sábado por la mañana me llamó mi amigo Adrià para decirme si quería ir con él y unos amigos a Gerona. Le dije que sí, que bajaba, pero que lo haría en moto y si quería que lo llevase; me dijo que sí.

Cuando comenzamos a bajar, a medio camino, se nos puso a llover.

Tuvimos que parar en Bonmatí para no mojarnos tanto.

Cuando ya había parado de llover continuamos bajando, y a la altura de Bescanó se puso a llover otra vez. Esta vez non nos paramos.

Seguimos bajando porque ya nos quedaba poco.

Cuando llegamos a Gerona ya no llovía, fuimos a casa de un amigo a cambiarnos de ropa. Nos dejó un pantalón a cada uno; después fuimos a dar una vuelta; nos encontramos con unos chicos con los que mis amigos no querrían ir y nos tuvimos que escondernos dentro de un portal para que no nos viesen. Después cogimos las motos y nos fuimos a la “plaza del porro”, que esta allí donde el hotel Carlemany. Tuvimos que hacer varios viajes porque no teníamos suficientes motos para ir todos.

Desde allí, yo y mi amigo Adrià, nos fuimos para Anglés, ya que era tarde.

DE QUÉ VOY HACER LA REDACIÓN?

Ahora estoy sentada delante el ordenador, pensado qué tema escoger para hacer la redacción, que tengo que entregar el próximo martes al profesor de lengua castellana.

Voy pensando en aventuras que he vivido, pero no sé cual contar, ya que algunas son muy tristes, otras son de terror, y luego hay aquellas que son aventuras muy largas… Las podría contar, pero como no tengo mucho tiempo, prefiero contarlas otro día, con mas tranquilidad, porque pienso que si una cosa se hace rápida no sale bien y luego se tiene que volver hacer.

Aún estoy pensando y no encuentro la redacción perfecta para poder escribir. ¿Porque cuesta tanto pensar en las cosas pasadas? ¿Lo sabe alguien?

Ahora se me esta ocurriendo un redacción de un tema bastante raro el titulo de la historia sería “¿Por qué los humanos nos hacemos tantas preguntas y no respondemos ninguna?” Pienso si podría quedar bien esta redacción, pero también que es bastante rara… así que me voy a quedar pensando más rato a ver qué se me ocurre para escribir. Pero como que hoy no tengo mucha inspiración, al final tendré que quedarme con un negativo por no haber entregado la redacción.

¡Otro día seguro que me ira mejor!

Nora.

*__ Sonia…*

*_ Sonia era una chica nueva en el cámping y nos había dicho que tenía 15 años . Ella era un poco chula y creída. Se cogía confianza muy deprisa, cosa que a mi no me gustaba . Nos estábamos preparando para irnos a la playa a cenar y ella nos dijo que a su madre no le gustaba que se pintara, pero ella lo hacía, y encima de rojo pasión . Su madre le dijo que no podía ir a la playa, así que la Yaiza y la Iraida fueron a hablar con ella para que le dejara ir . Fue cuando nos enteramos que sólo tenía 12 años.

Al día sigiente , como todo el mundo le preguntava si tenía 12 ó 15 años, y para no quedar mal, nos dijo que su mejor amigo se había muerto por la noche en un accidente de moto, pero que ella sólo lloró 5 minutos. Tampoco era verdad.

Tània

La felicidad!

Esta noche pasada no he podido dormir por culpa de los nervios que me dominan.

Me levantado y parecía que me acaba de acostar. Me he cambiado y me ido a desayunar dos tostadas acompañadas de tomate y aceite, con un trozo de queso, del que tanto me gusta. Luego ha venido mi amiga a buscarme para ir al instituto. A la primera hora de clase estaba aún un poco dormida; a la segunda estaba ya despierta del todo. En el patio estaba hablando con las compañeras de clase sobre los temas que nos importan, después nos tocaba lectura, así que me puesto a leer un libro que me había traído de casa. A la siguiente hora me tocaba catalán y hemos estado contestando las preguntas del libro que nos han hecho leer estas vacaciones de Semana Santa. A última hora nos tocaba “mates” en el aula, pero hemos ido a los ordenadores a hacer unas actividades de internet. Cuando hemos terminado de la clase me ido a la entrada del instituto, donde mis amigas estaban esperándome. Me he despedido de ellas y me he venido a casa para poder comer un buen plato de macarrones con tomate, de los que hace mi madre, que están muy ricos. Después me ido a duchar, a cambiarme y a estírame el pelo. Luego me ha llamado mi amiga y me ha dicho que ella ya estaba en la estación. He ido corriendo a decirle a mi madre si me podría llevar a la estación de tren, donde estaba mi amiga. Mi madre ha cogido el coche y me ha llevado a donde había quedado yo con ella. Al cabo de poco rato mi madre se fue, y mi amiga Aida y yo nos fuimos a tomar un zumo de naranja cada una. Después, nos levantamos y nos fijamos en la gente que había llegado de Barcelona. En ese momento me puse muy nerviosa ya que tenía que ver a una persona muy especial… Seguramente habrían cogido el siguiente tren …pero de repente me giro y veo a esa persona. Cuando la vi, me puse a correr y me tiré encima para abrazarla. ¡Que gran felicidad…!

Nora. 

SUSANA

La historia de hoy va de una niña de siete años: Se llama “Susana”.

Era una niña rubia, con los ojos azules, muy bonita pero muy traviesa.

Esta niña vivía con sus padres en una casita en medio de la ciudad, así que un día de verano la niña se levantó y decidió ir a pasear por el bosque. Ella nunca había ido allí y no sabía cómo era. Se lo imaginaba como la ciudad pero con más árboles.

Decidió ir sola y sin decírselo a nadie, porque sabía que si se lo hacía no le dejarían ir.

Pero la alegría y la emoción que tenía Susana no duró mucho, porque cuando llego al bosque se perdió. Ella iba caminando y caminando y no se daba cuenta de que cada vez estaba más lejos de la ciudad.

Pasaron días y días y nadie la encontraba. Sus familiares y conocidos estaban muy preocupados y no dejaban de buscarla. Al cabo de un mes perdieron la esperanza y dejaron de hacerlo.

Pasaron años y años y la niña seguía sin salir del bosque porque no encontraba la salida,

hasta que un día unos niños se fueron de excursión y vieron algo que se movía entre unos matorrales. Se acercaron y la vieron. Era Susana, pero nadie la reconoció porque ya habían pasado diez años.

La llevaron a la policía y allí la interrogaron. Ella les explicó todo lo que le había pasado. Dos policías la llevaron a su casa.

Los padres estaban emocionados y muy contentos de haber recuperado a su hija.

AVISPAS

Os voy a contar una historia que sucedió de verdad en mi jardín; yo era pequeña y no tenía conocimiento, ya que de no ser así, habría echo caso de los mayores.

-¡No piséis la hierba descalzas, o las avispas os picarán!- nos decían-.

Pero nosotras, mi hermana y yo, como si oyéramos llover. Íbamos corriendo y saltando sin parar hasta  que un día, estando solas, me picó una avispa. De repente note como todo mi alrededor se hacía cada vez más grande, y yo más pequeña. Lo vi todo en blanco, como si estuviera ciega y de repente caí.

Recuperé la vista y vi como unas personitas muy pequeñas que yo creo que eran como una especie de gnomos amarillos con manchas azules que me arrastraban a su cueva. Allí me ataron a una roca y empezaron a preparar una olla con agua hirviendo.

Comenzaron a hacer una especie de ritual, mientras todos ellos, me miraban, gritaban, y bailaban a mí alrededor. ¡Estaban histéricos!

De un rincón, salió un personaje más grande y regordete que los demás: se hizo un silencio aterrador. Era azul, con manchas amarillas al revés que todos los otros, también llevaba un bastón enorme y muchas joyas en las muñecas, los tobillos y el cuello. Hizo un gesto que yo interpreté como que me echaran a la olla y todos reaccionaron inmediatamente.

Todos vinieron hacia a mi, me cogieron y me inmovilizaron para que no pudiera moverme. Me llevaron a la olla, me echaron dentro de ella con muchas especies y cuando empecé a sentir el calor del agua hirviendo, oí unas voces muy familiares: Eran mis padres. Al parecer me había desmayado y todo había sido una pesadilla.

La foto inesperada.

Hoy cuando he empezado a limpiar mi habitación me he encontrado una foto del verano en Alcorisa. He dejado todo lo que estaba haciendo y me he puesto a recordar…

En general lo que más me he acordado han sido los muchos ratos de risas y de

aventuras que pasé allí. He pasado un buen rato, es como si hubiera revivido todo lo bueno que pasé allí.

Me he dado cuenta que he cambiado mucho: antes tenía el pelo corto y ahora lo tengo muy largo, y mi forma de pensar es diferente; antes pensaba en cosas que ahora no le doy importancia y que en aquel momento eran muy importantes para mi; ahora hay otras cosas que me preocupan o que me importan.

Cada día tengo mas responsabilidades como por ejemplo la de ayudar a mi madre con el trabajo de casa , que los estudios me vayan bien para poder pasar al siguiente curso, o procurar mejorar con el baile…

Antes no me dejaban salir por las noches de fiesta porque mis padres tenían miedo que me pasara algo, ya que era mas pequeña…

Estar en la adolescencia tiene su parte positiva y su la parte negativa. Gracias a adolescencia vamos aprendiendo a pensar y a ser mas responsables y a afrontar los problema. ¡Y todo esto por una foto!

Nora.

Día de Rally

El fin de semana pasado fui todo el día al rally que hacían entre Osor y Sant Hilari.

Primero me tuve que levantar a las 7 porque a las 8 y media teníamos que estar mas allá de Osor con todo preparado.

Cuando ya estábamos preparados, paso el coche de seguridad y nos dijo que no podíamos tener la moto aparcada junto a la valla. Nos la hizo bajar por un camino que mas bien se parecía a un barranco.

Tuvieron que hacer dos tandas porque en la primera se estrello un coche y no pudieron continuar.

Cuando ya acabaron las dos tandas subimos hacia Sant Hilari para ir a Coll de Revell. Por poco nos cierran la carretera cuando íbamos hacia allí. Nos equivocamos de camino y tuvimos que dar la vuelta. Cuando encontramos una buena curva, nos paramos en ella, y dejamos las motos en un camino que había por allí. El tramo que hicieron fue divertido y los coches pasaron rapidísimos.

Lo malo fue cuando tuvimos que bajar, no porque fuese de noche, si no por el frío que hacía. En fin, fue una aventura más y se tiene que repetir.