Hoy me he despertado tarde. He llegado 10 minutos tarde a la clase, y tengo mucha hambre.
También hoy tengo entrenamiento y con el frió que hace me da mucha pereza ir, pero si quiero jugar los partidos, tendré que ir a los entrenamientos.
Por lo que os he dicho parece un día normal, como todos los lunes.
Pues no,¡hoy es especial!.
Hoy ha llegado el día de que me hagan lo que llevo esperando desde hace tres años:
¡ Me quitan los hierros de la boca!
Los llevo puestos desde que empecé a hacer segundo de ESO.
Llevar hierros es muy comprometido. Hay tipos de comida que no puedo comer, como la carne, o el chicle. Cuando hacía king bonxing llevaba doble protección.
Muchas veces cuando estoy practicando algún deporte me hago algún corte a los labios, un corte pequeño pero de esos que duelen.
Pero a partir de hoy podré hacer lo que no he podido hacer durante estos tres años.