Las aventuras del tío Paco (9)
Paco, mi gran tío.
Era una vez un sábado, mi tío Paco me contó que fue a ver unas pirámides mayas en un sitio muy largo a las afueras de España. Me contó que había sido muy divertido y que se lo pasó muy bien.
Mi tío me explicó que descubrió una tumba llena de oro y un cadáver, lleno de huesos y grande. Me contó que también no tenía ojos. La tumba de oro estaba repleta de escarabajos, pero dijo que le costó encontrarla, o sea que no había sido fácil.
Lo que me contó fue que habían muchos caminos, largos y estrechos, como un laberinto. Él ya sabía por qué y es que los dueños o familiares lo habían hecho para que no cogieran o robaran el oro y todo lo de prestigio. Por eso hacían esos caminos laberínticos o lo que fueran.
Pero en resumen, que había sido muy divertido, guay, chulísimo, una gran aventura.
Por todo eso fue uno de los grandes arqueólogos mundiales y para mí un gran tío y también porque lo quiero mucho y no solo porque fuera un gran arqueólogo sino por todo.
Mi madre y mi hermana estaban haciendo la comida, pero también estaban escuchando asombradas lo que decía mi tío Paco, sus aventuras o sus cosas por decirlo de alguna manera.
Walter H.
6º Curso 2010-2001
Espero que os haya gustado mi redacción… Me hubiera gustado que Sergi hubiera escrito lo siguiente: ‘Walter, me ha gustado mucho. ¡Es una de las mejores que he visto!