Crónicas de la clase (7)

Crónica de República Dominicana

Por César M.

 

Día 24 de Junio: llegué a mi país y después me subí al coche de mi madre. Me llevaron al monumento más fascinante y conocido en mi país, el faro a Colon. Después cuando entramos en él y vi lo espectacular que es por dentro.farocolon

Cuando había pasado una hora o así cogimos rumbo hacía mi pueblo natal, Neyba. Son tres horas y media de trayecto, así que duramos bastante.

Día 25 de Junio: Estaba en mi pueblo, cuando me desperté vimos a nuestros familiares, los saludamos y como para darme la bienvenida me llevaron a un balneario público de otro pueblo cercano. Ese balneario se llama La Zurza.

Cuando volvimos, me encontré una grata sorpresa… Era de noche pero lo pude reconocer en cuanto lo vi, era mi abuelo, un hombre de casi 90 años. Había subido a mi casa a saludarme y a darme la bienvenida. Sentí una gran tristeza por las condiciones en las que estaba.

Bueno es mi crónica, espero que haya gustado.



Un cuento fantástico de Sexto

ZOMBIS CONTRA HUMANOS

Había una vez en un país llamado Araska, es un país muy bonito donde casi siempre nieva.

Un día por la noche todos los habitantes que habían en Araska se dieron cuenta que habían llegado unos hombres muy pero que muy raros. Esos no eran humanos normales y corrientes, eran… ¡¡¡ZOMBIS!!!

Los zombis eran súper raros, feos… Bueno y no sigo porque no acabaría.

Bueno, a lo que íbamos. Todos nosotros nos dimos cuenta que si nos llegaban a morder, en vez de morir nos convertiríamos en uno de ellos.

Pero… ¿A que no sabéis cuál es su punto débil? Bueno os lo digo.

Ellos odiaban la luz, por eso cuando llegaron al pueblo iban a las casas a morder las personas, pero primero cortaban los cables de la luz. Hasta que sólo sobrevivieron 5 personas, uno de ellos era mi primo Erick, que le dijo a su novia:

– Tengo un plan, pero eso arriesgaría mi vida.

– ¿Cuál es tu plan, cariño? -Le dijo ella

– Tengo que sacarle sangre a uno de ellos, pero tiene que estar muerto, y después me la inyectó, de esta manera los podré matar.

Lo peor es que cuando amaneció se convirtió en ceniza, en los hombros de  su chica.

Esa fue la triste historia que pasó. Arriesgó su vida para salvar a su chica y a los demás.

Eso sí que es tener buen corazón, y además no pensó sólo en él, sino que pensó en los demás.

 

Wendy  A.

 6º Claret, Curso 2010-2011



Una exposición de la Comunidad gallega

CONOCE GALICIA

De Aina R.

Galicia es una región muy verde y húmeda, porque llueve bastante. 

Las casas típicas están hechas de piedra y barro, a su lado están los hórreos, que son pequeñas casas de piedra y madera donde la gente guardaba parte de sus cosechas y de sus matanzas del cerdo.

Mucha gente de los pueblos vive de su agricultura, también cosechan uvas para hacer vino. Otro licor que hacen es el aguardiente que utilizan para hacer su “queimada” que es una de sus bebidas típicas de Galicia.

Algunos de las productos típicos de Galicia son la empanada, el pulpo, el churrasco (que es carne de ternera), el chorizo y la “tetilla”(que es el queso típico), también encontramos el jamón y las morcillas.



Crónicas de la clase (6)

Crónica del Caribe

Por Andrea J.

El verano pasado mis padres y yo nos fuimos al Caribe.

Preparamos mucha ropa de verano; ¡tanta que no nos cabía en la maleta!.

A las 10:30 llegamos al Aeropuerto de Barcelona. Fueron 10 horas de viaje, porque tuvimos que esperar las maletas que no volvían, pero al final sí. Llegamos sobre las 20:30.

 

andreajCasi sin darnos cuenta llegamos a Cuba, pusimos los pies en el suelo pero,de tan maravilloso clima, nos dio la sensacion de volar.

Luego esperamos un taxi para ir hacia el hotel. Llegamos 10 minutos más tarde.

A las 21:20 nos fuimos a cenar a un restaurante y a pasear por las calurosas calles, estuvimos hasta las 00:00!

Nos fuimos a descansar al hotel porque a la mañana siguiente nos esperaba un largo día en la playa que hay enfrente del hotel.

El mes se nos pasó volando. Ya era septiembre y teníamos que volver a casa.

¡Fue increíble!



Crónicas de la clase (5)

Crónica de un viaje a otro mundo

De Rafael Sánchez Martínez

 

Todo empezó cuando íbamos a mi camping. Íbamos  por un túnel, y vimos una salida que ponía: ‘Salida para camping La Volta’.

 

Giramos por la salida pero no vimos el camping sino… ¡Un campo lleno de árboles y flores! Fue impresionante.

 

Continuamos por el campo hasta llegar a una casa de gran tamaño con un jardín excelente para jugar a fútbol. Tocamos al timbre pero no respondía ni abrían la puerta. Vimos un cartelito que ponía: ‘Quien encuentre la llave se quedara con la casa’.

 

Nosotros, impresionados, cogimos las llaves y entremos pero de repente…Aparecieron unos niños diciendo:

 

-¡Sorpresa! Os estábamos esperando. Vaya broma os hemos gastado, ¿Eh?

 

Al final cogimos todos y nos fuimos a cenar al restaurante del mismo camping.



Crónicas de la clase (4)

REALIZA TU PRIMER SUEÑO

Por Milka V. Q.

En el verano de 2008 hice una pequeña excursión con mis padres, mi tía y yo al parque de milka02atracciones PortAventura.

Aquella tarde tuvimos que salir a las 3 de la tarde con el equipaje de ropa y algunas cosas más. Llegamos muy cansados y nos fuimos a un hotel que se llama Regina. Era muy bonito, tenía dos piscinas, sauna, buffet libre, sala de juegos, casinos, tienda de chuches, yacuzzis, etc.

Al otro día nos levantamos temprano y fuimos a desayunar, luego cogimos un autobús que nos dejaba en el parque de PortAventura, pagamos la entrada y nos dieron un mapa para guiarnos.

 

milka01Dentro del parque nos subimos a todas las atracciones; la que nos gustó mucho fueron las tacitas, aunque salimos de allí mareados.

Ya llegó la hora de irnos, cuando llegamos al hotel, nos pusimos el bañador y fuimos a la piscina mi tía y yo, mientras que mis padres se fueron a la sauna.

Ya eran las ocho de la noche y fuimos a comer al buffet, todo estaba delicioso, hasta los postres de 3 o de 4 bolas.

Ya era hora de irnos a dormir, los dos días que nos quedaron dimos un paseo por el centro y compramos recuerdos.

Este viaje nunca lo olvidaré, que quedé impresionada.



Crónicas de la clase (3)

Prados de Oro

Por Mireia B.

 

Este viaje comienza un día caluroso del verano del 2006, yo tenía 7 años. Mi padre tenía que ir al pueblo de mis abuelos que se llama Els Prats de Rei, para gestionar unas cuestiones con el tractorista del pueblo.

Decidimos ir a pasar un fin de semana. Yo era la primera vez que iba y estaba contenta por descubrir todo aquello, pero a la vez nerviosa. La noche antes del viaje preparamos las bolsas con todo lo necesario: una muda de ropa, gorras, agua, crema solar, más gorras y poca cosa más.

mireia01El itinerario queda aproximadamente a 80 km. De Barcelona, está entre la autovía N11 y el Eix transversal, Desde Barcelona pasamos y vimos varios pueblos como Martorell, Abrera, Esparraguerra, Collbató, el Bruc, Igualada, Jorba, Copons y Prats de Rei. Fuimos en furgoneta, y yo no paraba de preguntar cuánto quedaba de camino.

El viaje fue muy caluroso ya que no teníamos aire acondicionado. Paramos en un restaurante por el camino entre Collbató y el Bruc, por cierto, que se come de maravilla.

Hacía mucho calor y paramos a tomar un refresco, patatas, etc. en la sombra y corría un aire fresco genial. Desde allí podíamos ver parte del Parque Natural de la Montaña de Montserrat.

Después de esta parada, y de alegrarnos la vista con esas magníficas montañas, decidimos continuar el viaje.

Nos paramos en la siguiente localidad, Igualada, y por casualidad coincidió en que se celebraba la gran concentración de globos aerostáticos más importante de España y de Europa. En dicha concentración se celebran competiciones de vuelos de globos aerostáticos, además de realizar un espectáculo piromusical, es decir, con música y fuegos artificiales. Todo lo cual fue increíble.

Decidimos continuar el viaje, pasamos por Jorba y Copons, y finalmente llegamos a els Prats de Rei. Fue impresionante, ya que todo el pueblo está rodeado de campos, y los campos estaban llenos de trigo, muy bonito.mireia02

Nada más entrar a este municipio, nos encontramos con la iglesia del pueblo, llamada Mare de Déu del Portal, es pequeña y muy acogedora, pero a su vez hermosa, de estilo barroco. Justo en frente de la iglesia está la casa de mis abuelos y desde sus terrazas podemos ver perfectamente toda la iglesia.

Pero lo más asombroso y espectacular de todo este viaje fue ver campos y campos llenos de trigo, muchísimas hectáreas de espigas de trigo, de color amarillo, con ese olor indescriptible. Andar entre los trigales era fantástico, las espigas se balanceaban con esa brisa que no paraba y ese olor que no olvidaré jamás.

Y entre trigales y ese olor inconfundible se acaba la crónica de este viaje, espero que algún día podáis disfrutar e ir vosotros también.

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Crónicas de la clase (2)

Mi viaje asombroso

Por Sara L.

 

Fuimos a Pamplona con mi madre. El viaje era en tren duró cuatro horas. El viaje fue cansado pero valió la pena.

Al llegar a la estación vi a todos los de mi familia que vivían en Pamplona.

¡Ahora nos esperaban tres días de diversión y recuerdos con mi familia!

El primer día fue el día que llegamos. Llegamos antes de comer y por eso estuvimos bastante tiempo el primer día.

Primero, fuimos a casa de mis abuelos, allí comimos, nos presentó nuestra habitación.

Luego fuimos a casa de mis tíos, un poco lejos pero es muy bonita. Estuvimos bastante tiempo y luego volvimos en coche, cenamos sobre las diez y media y luego me duche y todos nos fuimos a dormir.pamplona01

El segundo día vi al resto de la familia. A las hermanas de mis abuelos, que en total eran 18, y también vi a sus hijos. Lo demás fue más o menos igual que el primer día.

El último día cuando me desperté ya era hora de irse.

Fuimos hasta la estación acompañados de todos los de mi familia.

Fue triste, pero lo superé. Espero volver a ver a mi familia de Pamplona.



Crónicas de la clase (1)

La aventura en Rubí

De Adrián A.N.

 

canoriol01Llegamos a Rubí, a la casa de colonias Ca n’Oriol. Antes de deshacer las maletas fuimos a comer.

Cuando acabamos de comer deshicimos las maletas y elegimos cama y nos dejaron libre.

Wendy y yo nos fuimos jugar al parque donde había una tirolina.

Alba tenía a su padre de cocinero junto a dos más, que eran dos señoras.

Casi siempre íbamos a  la piscina por la mañana y por la tarde.

Adri, el monitor, nos dio una carta a cada uno ya que teníamos que hacer alguna cosa, a mí me toco coger una sandía de la cocina sin que los/as cocineros se dieran cuenta.

Cuando cogí la sandía y la escondí en un cilindro de cemento, la cogí cuando los/as cocineros estaban comiendo, cuando fui a buscarla ya no estaba, me quedé con la boca abierta y grité:

¡¡¡¡¡¡¡NO PUEDE SER!!!!!!!!!

Al día siguiente nos dieron un trozo de cartulina pequeña para poner nuestros nombres.

El juego consiste en dar un beso en la mejilla sin que nadie de nuestro grupo nos viera, gana quien tiene más cartulinas.

Fui a dar un beso a Wendy pero se giro y casi se lo doy en la boca.

Llegó la noche y nos fuimos a la cama, Dani,  Paul, Carlos y yo hicimos un concurso de peditos; gané yo pero me castigaron a vigilar la piscina, iba descalzo y tuve que ir a caballito en la espalda del Barra, porque el camino estaba llenó de piedras pequeñas.

A la noche siguiente nos contaron una historia de miedo. Explicaron que la casa era un manicomio y que había dos locos que se escaparon con el profesor Oriol y por eso se llama la casa de Can Oriol.canoriol02

Había una cartulina que ponía cuatro nombres y el nombre de un monitor. Cada grupo tenía que hacer una tarea. A mí me tocó con Wendy, Guille y Saray; el monitor era Ignasi. Nos tocó lavar los lavabos, pero a Wendy y a Soray les tocó el de abajo y se escondieron en el lavabo; pero Ignasi las pilló y las castigó más que a nosotros.

El último día hicimos las maletas y entonces apareció una cosa muy curiosa, alguien se hizo caca en nuestro cuarto…

Fue muy conmovedor todo y espero que os allá gustado mi crónica, tenéis que venir os lo pasaréis genial.

 



Vamos a publicar las crónicas que leeremos en clase.

Crónica de un encuentro interesado

Cuando llegué tan puntual a la cita pensé duranto largo tiempo que todo el largo recorrido y esfuerzo que había realizado había sido en vano. Me levanté a las cinco de la mañana para coger el primer tren que salía del pueblo en dirección a la capital. De milagro conseguí coger el tren, no sin antes correr de lo lindo de mi casa a la estación.

En el tren pude descansar un buen rato e incluso llegué a hacer una cabezadita que más bien duró poco a medida que avanzaba el día y entraban en el vagón nuevos pasajeros que añadían más voces al concierto existente.

El tren llegó casi puntual a la estación Término. Y la llegada del mismo coincidió con el incremento de mi ansiedad por lo que en poco tiempo podía o no sucederme. No comí nada en todo el trayecto, por eso al salir de la estación y sabiendo que tenía todavía mucho tiempo, entré en una cafetería de la Plaza de la Estación. La verdad que me sentó de maravilla el café con leche calentito y las dos tostadas que me zampé. Fui a los baños, a orinar y aprovechando que me limpié las manos y me sequé con papel higiénico cogí un buen trozo y me lo metí en el bolsillo. Y salí y me dirigí hacia la Plaza Mayor.

La cita era a las doce del mediodía, en medio de la plaza, al lado de la fuente del reloj. Más precisión imposible. Llegué al lugar a las doce menos cuarto, hora del reloj de la fuerte y de mi móvil que no había sonado en todo lo que llevaba de viaje. Y ya me veis plantado al lado de la fuente, en medio de la plaza, lejos de mi pueblo y esperando a alguien que sólo conocía por Internet. ‘Iré con pantaloneta, una camiseta naranja y una gorra. Y yo que creía que con eso sería suficiente para reconocer a la persona con la que me había citado. Cuál fue mi sorpresa al ver que se acercaba alguien con esa vestimenta, pero detrás de esa persona venía alguien más, y detrás más… En diez minutos la plaza se llenó de gente con pantaloneta, una camiseta naranja y una gorra. Todos iban de la misma guisa, todos excepto yo que ya empezaba a dudar que encontraría a María.

Empecé a preguntar por María, llegué incluso a gritar su nombre pero mi voz quedaba apagada, sepultada por las cientos de voces del gentío que estaban allí. Yo estaba desalentado, no funcionaba el móvil, no encontraba a María y mucho me temía que no la iba a encontrar. Así que me subí a la fuente del reloj y empecé a gritar su nombre. Los que estaban alrededor creyendo por mi vestimenta que debía ser alguien de la producción repitieron María, María… Yo volví a repetir María… Y toda la plaza empezó a decir María… Dije ¿Dónde estás? Y toda la plaza empezó a decir ‘¿Dónde estás?’. Y que locura, que locura. Esto no puede ser, esto no puede ser…

Y Dios mío, Dios mío… ¿Qué iba a hacer? No sabía cómo encontrar a María. Y lo único que se me ocurrió fue decir ‘María López llámame, soy tu ciberamigo Mariano’… Decir esto, repetirlo la gente varias veces y crearse un gran silencio después. Y mi móvil sonó por primera vez ese día.

  Sí, soy yo… María que alegría. ¿Dónde estás que no te veo?

  Tranquilo, tronco, y continúa en tu sitio que la grabación está saliendo genial.

¿Qué? ¿Qué? Una grabación para realizar un anuncio de telefonía… ¡Que cara dura la de María! Me había visto desde hacía un buen rato. Era ella y no yo la que iba a reconocerme y de paso producir su anuncio publicitario. Y era yo y no ella la persona a la que iba todo el mundo a ver y reconocer. Y su interés por verme, más bien por grabarme, era más grande que mi interés por estar con ella y conocerla. La hubiera degollado allí mismo.. Y en cuanto pudo acercarse a mí tenía unas ganas locas de hacerlo, pero me contuve y en vez de eso le di dos besos. Lo que pasó después ya forma parte de otra crónica que a ustedes no creo que les interese.

Manel P. Curso 2010-2011