Poemas: Juan Ramón Jiménez

“Conciencia plena”

 Tú me llevas, conciencia plena, deseante dios, 

por todo el mundo.

 En este mar tercero, 

casi oigo tu voz; 

tu voz del viento 

ocupante total del movimiento; 

de los colores, de las luces 

eternos y marinos.

 Tu voz de fuego blanco 

en la totalidad del agua, el barco, el cielo, 

lineando las rutas con delicia, 

grabándome con fúljido mi órbita segura 

de cuerpo negro 

con el diamante lúcido en su dentro

•          (Animal de fondo, 1949) 

 

«El otoñado»

Estoy completo de naturaleza 

en plena tarde de áurea madurez 

alto viento en lo verde traspasado. 

Rico fruto recóndito, contengo 

lo grande elemental en mí (la tierra, 

el fuego, el agua, el aire), el infinito. 

Chorreo luz: doro el lugar oscuro, 

trasmino olor: la sombra huele a dios, 

emano son: lo amplio es honda música, 

filtro sabor: la mole bebe mi alma, 

deleito el tacto de la soledad. 

Soy tesoro supremo, desasido, 

con densa redondez de limpio iris, 

del seno de la acción. Y lo soy todo. 

Lo todo que es el colmo de la nada, 

el todo que se basta y que es servido 

de lo que todavía es ambición. 

(La estación total, 1946)

«Rio de cristal dormido»

Río de cristal dormido 

y encantado; dulce valle, 

dulces riberas de álamos 

blancos y de verdes sauces… 

El valle tiene un ensueño 

y un corazón sueña y sabe 

dar con su sueño un son triste 

de flautas y de cantares. 

Río encantado; las ramas 

soñolientas de los sauces, 

en los remansos dormidos 

besan los claros cristales. 

Y el cielo es plácido y dulce, 

un cielo bajo y flotante 

que con su bruma de plata 

va acariciando los árboles. 

Mi corazón ha soñado 

con la ribera y el valle, 

y ha llegado hasta la orilla 

dormida para embarcarse; 

pero al pasar por la senda, 

lloró de amor, con un aire 

viejo, que estaba cantando 

no sé quién por otro valle. 

De Arias Tristes (1903)

Juan Ramón Jiménez

Adolescencia

 

 En el balcón, un instante 

nos quedamos los dos solos. 

Desde la dulce mañana 

de aquel día, éramos novios. 

 –El paisaje soñoliento 

dormía sus vagos tonos, 

bajo el cielo gris y rosa

del crepúsculo de otoño–. 

 Le dije que iba a besarla; 

bajó, serena, los ojos 

y me ofreció sus mejillas, 

como quien pierde un tesoro.

 –Caían las hojas muertas 

en el jardín silencioso, 

y en el aire erraba aún 

un perfume de heliotropos–. 

 No se atrevía a mirarme; 

le dije que éramos novios,

. . .y las lágrimas rodaron 

de sus ojos melancólicos.

Juan Ramón Jiménez

 

 (. . . Rit de la fraicheur de l’eau

  Victor Hugo)

 Con lilas llenas de agua, 

le golpeé las espaldas.

 Y toda su carne blanca 

se enjoyó de gotas claras. 

 ¡Ay, fuga mojada y cándida, 

sobre la arena perlada!

 –La carne moría, pálida, 

entre los rosales granas; 

como manzana de plata, 

amanecida de escarcha–. 

 Corría, huyendo del agua, 

entre los rosales granas.

 Y se reía, fantástica. 

La risa se le mojaba. 

 Con lilas llenas de agua, 

corriendo, la golpeaba . . .

Juan Ramón Jiménez

El viaje definitivo

 

 . . . Y yo me iré. Y se quedarán los pájaros

cantando;

y se quedará mi huerto, con su verde árbol,

y con su pozo blanco. 

 Todas las tardes, el cielo será azul y plácido; 

y tocarán, como esta tarde están tocando, 

las campanas del campanario. 

 Se morirán aquellos que me amaron; 

y el pueblo se hará nuevo cada año; 

y en el rincón aquel de mi huerto florido y encalado, 

mi espíritu errará, nostáljico . . . 

 Y yo me iré; y estaré solo, sin hogar, sin árbol 

verde, sin pozo blanco, 

sin cielo azul y plácido . . . 

Y se quedarán los pájaros cantando.

Juan Ramón Jiménez

“Retorno fugaz”

 ¿Cómo era, Dios mío, cómo era? 

–¡Oh corazón falaz, mente indecisa!–

¿Era como el pasaje de la brisa? 

¿Como la huida de la primavera?

 Tan leve, tan voluble, tan lijera 

cual estival vilano . . . ¡Sí! Imprecisa 

como sonrisa que se pierde en risa . . . 

¡Vana en el aire, igual que una bandera!

 ¡Bandera, sonreir, vilano, alada 

primavera de junio, brisa pura . . . 

¡Qué loco fue tu carnaval, qué triste!

 Todo tu cambiar trocóse en nada 

–¡memoria, ciega abeja de amargura!–

¡No sé cómo eras, yo que sé que fuiste!

Juan Ramón Jiménez

Octubre

 Estaba echado yo en la tierra, enfrente

del infinito campo de Castilla,

que el otoño envolvía en la amarilla

dulzura de su claro sol poniente.

 Lento, el arado, paralelamente

abría el haza oscura, y la sencilla

mano abierta dejaba la semilla

en su entraña partida honradamente.

 Pensé arrancarme el corazón, y echarlo,

pleno de su sentir alto y profundo,

al ancho surco del terruño tierno;

 a ver si con romperlo y con sembrarlo,

la primavera le mostraba al mundo

el árbol puro del amor eterno.

Juan Ramón Jiménez

Soledad

 (1 de febrero)

 En ti estás todo, mar, y sin embargo,

¡qué sin ti estás, qué solo,

qué lejos, siempre, de ti mismo!

 Abierto en mil heridas, cada instante,

cual mi frente,

tus olas van, como mis pensamientos,

y vienen, van y vienen,

besándose, apartándose,

en un eterno conocerse,

mar, y desconocerse,

 Eres tú, y no lo sabes,

tu corazón te late, y no lo siente . . .

¡Qué plenitud de soledad, mar solo!

Juan Ramón Jiménez

 ¡Intelijencia, dame

el nombre exacto de las cosas!

. . . Que mi palabra sea

la cosa misma

creada por mi alma nuevamente.

Que por mí vayan todos

los que no las conocen, a las cosas;

que por mí vayan todos

los que ya las olvidan, a las cosas;

que por mí vayan todos

los mismos que las aman, a las cosas . . .

¡Intelijencia, dame

el nombre exacto, y tuyo,

y suyo, y mío, de las cosas!

Juan Ramón Jiménez

 Vino, primero pura,

vestida de inocencia;

y la amé como un niño

 Luego se fue vistiendo

de no sé qué ropajes;

y la fui odiando, sin saberlo.

 Llegó a ser una reina,

fastuosa de tesoros

¡Que iracundia de yel y sin sentido!

 . . . Mas se fue desnudando.

Y yo le sonreía.

 Se quedó con la túnica

de su inocencia antigua.

Creí de nuevo en ella.

 Y se quitó la túnica,

y apareció desnuda toda . . .

¡Oh pasión de mi vida, poesía

desnuda, mía para siempre!

Juan Ramón Jiménez

2 thoughts on “Poemas: Juan Ramón Jiménez

  1. alejandro

    eeehhh joan enric n’hi han molts poemas i son molt “guapos” els poemes jejejej xD

  2. estela

    A mi m’agradat molt el bloc perquè surten poemes, videos,etc…
    resumint m’ha agradat molt.

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