Nutrición versus alimentación

La nutrición el conjunto de procesos mediante los cuales nuestro organismo utiliza, transforma e incorpora en sus estructuras una serie de substancias químicas que forman parte de los alimentos y elimina los productos de transformación de las mismas.

Las finalidades de la nutrición pueden resumirse en tres:

1) Suministrar la energía necesaria para el mantenimiento del organismo y de sus funciones.

2) Suministrar los materiales necesarios para la construcción de las estructuras corporales, así como para su renovación y reparación.

3) Suministrar las substancias necesarias para la regulación de las numerosas reacciones químicas que tienen lugar en el organismo y que reciben el nombre de metabolismo.

Las substancias que intervienen en los procesos nutritivos reciben el nombre de nutrientes. Dichas substancias las obtenemos de los alimentos después de someterlos a un conjunto de procesos que denominamos digestión. Son nutrientes las grasas, los hidratos de carbono, las proteínas, las vitaminas, las sales minerales y el agua. Todos ellos tienen unas funciones biológicas más o menos diferentes. También son distintas las cantidades que necesitamos ingerir de unos y de otros a través de los alimentos para cubrir nuestras necesidades y mantener un buen estado de salud.

A diferencia de la nutrición, que es un acto involuntario, la alimentación es un acto voluntario que responde a un conjunto de factores relacionados con el ámbito personal y el ámbito social. La biología, la ecología, la tecnología, la economía, la ideología y la cultura condicionan de forma variable la decisión última del ser humano de qué es lo que se lleva a la boca cuando puede elegir entre diferentes alimentos, como ha puesto de manifiesto la antropología (Marvin, 1993).

Los hábitos alimentarios de las poblaciones son la expresión de sus creencias y tradiciones y están ligados al medio geográfico y a la disponibilidad alimentaria (ilimitada en las sociedades industrializadas). La preferencia por unos alimentos u otros depende de su olor, sabor y textura; de las condiciones de bondad o maldad que se les atribuye (en relación con la salud del cuerpo o con la salud del alma). También depende de las relaciones entre el alimento y el estatus social, de la tradición y, cómo no, de los modelos de consumo aprendidos en el seno de la familia.

Los hábitos alimentarios son especialmente sensibles a los cambios sociales, de ahí que cada vez más dependan de una publicidad al servicio de unas multinacionales de la alimentación que cabalgan a lomos de una nueva tecnología de los alimentos. El resultado es una homogeneización progresiva de la alimentación (Contreras, 1993) en las sociedades avanzadas, que relega las necesidades reales de alimento del ser humano a un segundo plano y cuya primera víctima suele ser la salud.

En la actualidad, existe una gran preocupación por la salud y se reconoce a la alimentación adecuada como un instrumento de protección de la salud y prevención de la enfermedad, lo que ha conducido a la defensa generalizada de la dieta mediterránea. Por otro lado, las encuestas demuestran que la elección de alimentos está condicionada por el factor económico y el gusto, en primer lugar, seguido de la comodidad, la simplicidad en la preparación culinaria y el valor nutritivo que los alimentos aportan a la dieta.

En resumen, la alimentación es una necesidad fisiológica necesaria para la vida que tiene una importante dimensión social y cultural que se plasma en unos hábitos alimentarios que se forjan en el seno de la familia, que sufre las presiones del marketing y la publicidad ejercida por las empresas agroalimentarias y que influye de manera importante en nuestra salud.

Alimentos

Algunas culturas en que son tabú o ilegal

Son alimentos aceptados en

Ranas Estados Unidos, Inglaterra Francia, Italia, Asia, Argentina, Bolivia, México, España
Perros Gran parte de Europa y América China, Corea, Congo y Suiza
Insectos Europa y parte de América Asia, África, tribus amazónicas, sur y oriente de México
Gatos Europa y América China, Corea y Perú (Solo en Cañete o barrios habitados mayormente por población afrodescendiente, en el resto del país es tabú)
Caballo Estados Unidos, Inglaterra, Australia, México Francia, Italia, Alemania, Japón, Chile (charqui)
Ratas Europa y América Ghana, Tailandia y México (ratas de campo)
Vacas Hinduismo Cristianismo, Islam, América
Tortugas Judaísmo Asia, América
Iguanas Europa, Colombia, Centroamérica, México
Cerdos Judaísmo, Islam Mundo cristiano
Pájaros cantores Europa, Argentina Bolivia, Italia, Francia, México, Portugal
Arañas Europa, América Laos, tribus amazónicas
Lagartos Gran parte de Europa, Asia y América Asia, México, Panamá, algunas tribus australianas, y Caribe Colombiano (se consume la iguana verde)
Vísceras América latina, España
Morcillas y otros alimentos preparados con sangre Islam, judaísmo, Testigos de Jehová Gran parte de América del Sur, México, España, Perú, Alemania, Reino Unido y Estados Unidos

Carta de presentación

Soy Licenciado en Ciencias Químicas (química orgánica), Posgraduado en Dietética y Nutrición, y obtuve en su momento la suficiencia investigadora dentro del Programa de doctorado de Nutrición, tecnología e higiene de los alimentos (Universidad de Barcelona, bienio 1997-1999).

Me jubilé en 2018 como catedrático de enseñanza secundaria en la especialidad de educación física después de más de 3o años de enseñanza de dicha materia.

He escrito numerosos artículos sobre alimentación, dieta mediterránea, obesidad y la influencia del ejercicio físico sobre la grasa personal, entre otros temas. Los podéis consultar clicando aquí.